Oposiciones: los altos funcionarios no quieren perder la memoria
La reforma del acceso a la funci¨®n p¨²blica que prepara el Gobierno inquieta a los cuerpos superiores de la Administraci¨®n

Javier (nombre ficticio) dej¨® su trabajo en la empresa privada en enero de 2020, prepar¨® un cuarto con un escritorio en el piso que comparte con su novia en Vallecas, y se consagr¨® al ¡°monacato ambulante¡±, en palabras del escritor Francisco Umbral, de preparar la oposici¨®n al cuerpo superior de administradores civiles del Estado. Su vida se ha convertido en un marat¨®n de 10 horas diarias de estudio ¡ªcon un d¨ªa de descanso semanal ¡°sagrado¡±¡ª para preparar y memorizar (retengan esta palabra, es esencial en este reportaje) los 166 temas que componen el grueso del proceso selectivo que le dar¨¢ acceso a la ¨¦lite de la funci¨®n p¨²blica.
La realidad de Javier la rigen ahora t¨¦rminos como ¡°ir a cantar¡± o ¡°recitar¡± los temas una vez por semana ante un ¡°preparador¡± particular ¡ªnormalmente un funcionario del mismo cuerpo al que se pretende ingresar¡ª y que cobra, seg¨²n la oposici¨®n, alrededor de 150 euros mensuales por someter al opositor, presencialmente o por Skype, a un simulacro de lo que se encontrar¨¢ en el examen. ¡°Practicar ¡®el cante¡¯ es supernecesario: por mucho que sepas, si no sabes calzar en 15 minutos todos los ep¨ªgrafes de un tema y en funci¨®n a su importancia fracasas¡±, cuenta. Javier ha dado ya dos ¡°vueltas¡± ¡ªrepasos completos¡ª al temario, que incluye conocimientos profundos de Derecho, Historia y Econom¨ªa, entre otras materias.
Adem¨¢s, en este tiempo ha procurado ¡°vivir en ingl¨¦s¡± para preparar una dura prueba eliminatoria de este idioma que tambi¨¦n forma parte de la oposici¨®n. Y como en todo marat¨®n, tambi¨¦n se top¨® con el muro, el momento de la carrera en el que las fuerzas fallan y el ¨¢nimo decae peligrosamente: ¡°Me lo encontr¨¦ alrededor del tema 80, en los temas de contratos p¨²blicos¡±, recuerda. El joven ha encontrado un aliado inesperado en la covid-19: ¡°He tenido menos tentaciones: este a?o ten¨ªa muchas bodas y algunas se suspendieron, me quitaron bastantes dilemas¡±, admite.
Como ¨¦l, decenas de miles de espa?oles, muchos de ellos estudiantes brillantes, pasan los mejores a?os de su juventud bajo la luz del flexo en una rutina extenuante. La Encuesta de Poblaci¨®n Activa (EPA) registraba hasta 2020 el n¨²mero de buscadores de empleo que declaraban estar ¡°esperando los resultados de una oposici¨®n¡±: en el primer trimestre de ese a?o, justo cuando Javier se encerr¨® a estudiar, eran 61.100 personas. El af¨¢n de servicio p¨²blico, la tranquilidad de un trabajo estable frente a las sacudidas del sector privado ¡ª¡±el garbanzo del Estado es duro pero seguro¡±, dice un viejo refr¨¢n de funcionarios¡ª o el prestigio profesional asociado a los grandes cuerpos civiles (abogados del Estado, diplom¨¢ticos, inspectores de Hacienda, jueces, interventores¡) les llevan a acometer esta incierta inversi¨®n en la que apenas triunfa alrededor del 10% de los candidatos.
El Gobierno presentar¨¢ en las pr¨®ximas semanas su reforma del sistema de acceso al empleo p¨²blico. En diferentes comparecencias, el ministro de Administraci¨®n Territorial y Funci¨®n P¨²blica, Miquel Iceta, ha avanzado, sin entrar en detalle, las l¨ªneas maestras para la puesta al d¨ªa de un sistema m¨¢s que centenario al que sus detractores acusan de perpetuar rasgos clasistas en el seno de la Administraci¨®n, y que sus defensores consideran el modo m¨¢s objetivo de garantizar los principios de igualdad, m¨¦rito y capacidad en el proceso para convertirse en uno de los 1,45 millones de funcionarios de carrera tanto del Estado como de las administraciones auton¨®micas y locales. ¡°Necesitamos un acceso a la funci¨®n p¨²blica en el que se tenga m¨¢s en cuenta la capacidad y la aptitud y menos la habilidad memor¨ªstica de los candidatos, como ocurre ya en muchos pa¨ªses de nuestro entorno¡±, resumi¨® Iceta en el Congreso el 22 de abril. El equipo del ministro no ha querido desvelar m¨¢s detalles de la reforma ¡°porque se sigue trabajando en ello y ser¨¢ ¨¦l quien revele las novedades¡±, posiblemente esta misma semana.

Plazas vacantes
Uno de los motivos que justifican la reforma, seg¨²n el Ejecutivo, es que el sistema actual, por su dureza y por su coste econ¨®mico para el opositor que pasa a?os sin ingresos, ahuyenta a muchos j¨®venes con vocaci¨®n de servicio p¨²blico. Y eso hasta el punto de que ¡°en demasiadas ocasiones las plazas que se ofertan quedan vacantes¡±, explic¨® Iceta a los diputados en aquella ocasi¨®n. En noviembre de 2019, en las oposiciones al cuerpo de interventores y auditores del Estado se cubrieron ocho de las 25 plazas convocadas, o en el de t¨¦cnicos superiores de la Seguridad Social se adjudicaron 56 plazas de las 100 que sal¨ªan a concurso.
El anuncio del Ejecutivo, que llega tras seis meses de debate de expertos en el Instituto Nacional de Administraci¨®n P¨²blica (INAP), ha despertado recelos en un sector del alto funcionariado. En las ¨²ltimas semanas, asociaciones y representantes de los cuerpos superiores, pese a reconocer que hay que reformar algunos aspectos del acceso al empleo p¨²blico, han expresado su temor a que se abra la puerta a m¨¦todos de selecci¨®n m¨¢s subjetivos, como la entrevista personal, que traigan consigo funcionarios y empleados p¨²blicos de menor calidad t¨¦cnica, y lo que es peor, seleccionados por criterios de amistad o afinidad pol¨ªtica, y m¨¢s permeables a las presiones de sus jefes. El desasosiego se ha trasladado a los foros de funcionarios y opositores y a las redes sociales.
Elisa de la Nuez, abogada del Estado ahora en el sector privado es autora del estudio Acceso a la funci¨®n p¨²blica: atraer talento y cambiar el modelo (2018), en el que plantea la necesidad de que el Estado, ante la pr¨®xima jubilaci¨®n de funcionarios contratados en los a?os ochenta y noventa del siglo pasado, reclute a perfiles profesionales ¡°capaces de responder con flexibilidad a nuevas funciones y servicios p¨²blicos que hoy ni siquiera podemos imaginar¡±, como analistas de datos. Tambi¨¦n reclama reformas que tiendan a ¡°despolitizar la administraci¨®n¡±, especialmente en las administraciones local y auton¨®mica.
De la Nuez considera ¡°obsoletas¡± las actuales pruebas de acceso, con tanto peso de lo memor¨ªstico, pero con matices. ¡°No debemos tirar al ni?o con el agua de la ba?era. Las oposiciones en su formato actual garantizan objetividad y transparencia, por su car¨¢cter p¨²blico¡±. Esta jurista aboga por complementar las pruebas orales de conocimiento con otro tipo de pruebas de aptitud, como la resoluci¨®n de casos pr¨¢cticos, que sirvan para reclutar determinados perfiles profesionales, como directivos o analistas.
La ¡°memoria inteligente¡±
Ana de la Herr¨¢n, vicepresidenta de la asociaci¨®n Inspectores de Hacienda del Estado, considera que con la rebaja de la exigencia memor¨ªstica, ¡°se ha originado un problema donde no lo hab¨ªa¡± y ve ¡°peyorativo¡± que se hable del sistema de oposiciones como algo ¡°anquilosado, anticuado o retr¨®grado¡±. Reconoce que el actual modelo puede dejar fuera a gente muy buena, pero los que superan las pruebas han demostrado ser ¡°gente muy preparada¡±. ¡°Desde fuera [el sector privado] nos admiran, nos captan y nos pescan; no es raro ver en empresas a funcionarios de cuerpos superiores, la preparaci¨®n est¨¢ muy demostrada¡±.
La inspectora De la Herr¨¢n rechaza tajantemente el car¨¢cter elitista de la Administraci¨®n. ¡°Estudiar un m¨¢ster es infinitamente m¨¢s caro que la oposici¨®n. Con la digitalizaci¨®n se ha abaratado la preparaci¨®n y no te tienes ni que mover. En otros cuerpos, como los notarios, existe una fundaci¨®n que sufraga gastos de los opositores¡±, recuerda. Precisamente, el ministro Iceta, en su comparecencia en el Congreso, afirm¨® que el Gobierno estudiar¨¢ ¡°la viabilidad de un sistema de ayudas dirigidas a aspirantes que tienen grandes dificultades para dedicar varios a?os de su vida a preparar una prueba de acceso¡±.
Todas las personas consultadas para este reportaje defienden la utilidad de la memoria para el funcionario p¨²blico. De la Herr¨¢n habla de una ¡°memorizaci¨®n inteligente¡± en la que el aspirante consigue relacionar los conceptos aprendidos para luego ponerlos en pr¨¢ctica tanto en otras pruebas pr¨¢cticas de la oposici¨®n como en el ejercicio de la profesi¨®n. ¡°Tener un conocimiento pr¨¢ctico y profundo de la materia luego nos da agilidad en el servicio p¨²blico, eso no se debe perder¡±.
Jordi Sol¨¦, presidente de la Federaci¨®n de Asociaciones de los Cuerpos Superiores de la Administraci¨®n Civil del Estado (Fedeca), que agrupa a 44 asociaciones y sindicatos de altos funcionarios, reconoce que el sistema actual ¡°no se adapta del todo bien al siglo XXI¡±, en el que, sostiene, ¡°el sistema educativo ha abandonado la memoria¡±. No obstante, aunque se abre a ¡°rebajar un poco¡± esta carga de conocimientos e incorporar pruebas que eval¨²en otras habilidades, advierte: ¡°En Espa?a hay que hacer un plus de pensar muy bien los tribunales para evitar que los sistemas m¨¢s delet¨¦reos permitan arbitrariedad o amiguismos¡±.
El actual sistema de acceso a la funci¨®n p¨²blica es una herencia de la Francia napole¨®nica y se instaur¨® en 1833 cuando tras la muerte de Fernando VII, se comenz¨® a modernizar la Administraci¨®n, explica el catedr¨¢tico Carles Rami¨®. Sin embargo, durante el siglo XIX, especialmente en su segunda mitad, el sistema no consigui¨® ser absolutamente meritocr¨¢tico y se daba el fen¨®meno de los cesantes, funcionarios que perd¨ªan el puesto al cambiar el Gobierno de turno. La oposici¨®n como forma de ingreso en la Administraci¨®n no lleg¨® hasta 1918 con el llamado Estatuto de Maura.
Carles Rami¨®, catedr¨¢tico de Ciencia Pol¨ªtica y de la Administraci¨®n de la Universidad Pompeu Fabra y miembro del comit¨¦ que asesora al Gobierno en la reforma del sistema de oposiciones, reconoce que ¡°la memoria no hay que despreciarla, es el primer auxiliar de la inteligencia¡± y concede la raz¨®n en parte a quienes se resisten al cambio de modelo. ¡°La oposici¨®n es memoria y an¨¢lisis, y ah¨ª tienen raz¨®n. Les lleva cuatro a?os de media aprobar, ah¨ª tenemos una motivaci¨®n y una cultura del esfuerzo a prueba de bomba¡±, admite. Sin embargo, Rami¨® considera que el sistema necesita un ¡°cambio radical¡± porque ¡°se va detectando que hay menos j¨®venes brillantes y con talento que quieran pagar el peaje de pasar a?os preparando oposiciones¡±.
¡°?Y la igualdad?¡±
Rami¨® afirma que el sistema vigente garantiza en buena medida los principios de m¨¦rito y capacidad, pero no tanto el de igualdad. ¡°?Qu¨¦ familias se pueden permitir sufragar cuatro a?os a tiempo completo memorizando y con preparadores y academias? Socialmente es poco equitativo y se detecta una endogamia en los funcionarios de la Administraci¨®n General del Estado¡±, sostiene. Rami¨® cita un art¨ªculo de 2005 del profesor de econom¨ªa de la Universidad de Warwick (Reino Unido) Manuel Bagues, que analiz¨® la evaluaci¨®n de 40.000 opositores a siete de los principales cuerpos del Estado, entre ellos jueces, fiscales, notarios y cuerpo diplom¨¢tico. En ese estudio, Bagues hall¨® sesgos que contradec¨ªan el car¨¢cter objetivo que se supone a las oposiciones tradicionales, entre ellos factores de azar como el d¨ªa y la hora en que se realiza el examen, la posibilidad de un aplazamiento o la edad del tribunal. Tambi¨¦n hall¨® ¡°indicios de discriminaci¨®n¡± tanto por parentesco, como por sexo o por origen geogr¨¢fico, como que en ciertos cuerpos, como la carrera diplom¨¢tica hab¨ªa m¨¢s aprobados que eran parientes de miembros del propio cuerpo y tambi¨¦n de Madrid por el hecho de que los preparadores estaban en la capital.
El experto, no obstante, reclama un ¡°sistema estrictamente meritocr¨¢tico¡±, y rechaza de plano ¡°experimentos raros¡± que conviertan a la oposici¨®n en un ¡°coladero de clientelismo pol¨ªtico¡±. ¡°Es obvio que la entrevista no puede formar parte bajo ning¨²n concepto del proceso de selecci¨®n¡±, afirma. Rami¨® plantea un sistema parecido al que rige en la Comisi¨®n Europea: una combinaci¨®n de pruebas de inteligencia y de personalidad, propias de la psicolog¨ªa organizativa y que son ¡°neutras y objetivas¡±, acompa?adas de pruebas pr¨¢cticas adecuadas al puesto que se necesita cubrir. Todo ello acompa?ado de ¡°tribunales neutros y profesionalizados¡±, compuestos por funcionarios del cuerpo formados espec¨ªficamente para las tareas de selecci¨®n.
Una de las quejas de los cuerpos superiores de la Administraci¨®n en este proceso de reforma es que apenas han sido escuchados. Rami¨® plantea que estos grandes cuerpos cl¨¢sicos, muchos de los cuales tienen tent¨¢culos muy poderosos en la pol¨ªtica o en el Ibex 35, y que suelen presentar ¡°resistencias numantinas¡± a los cambios y que han hecho del n¨²mero de temas de su oposici¨®n parte de su prestigio ¡ª¡±rebajar tres temas la oposici¨®n lleva un esfuerzo terrible¡±, afirma¡ª se pueden mantener de momento como est¨¢n. Y defiende comenzar a implantar el cambio de modelo en los nuevos perfiles de empleados p¨²blicos que se vayan necesitando y tambi¨¦n en cuerpos intermedios de gesti¨®n, en los que se podr¨ªa instaurar ¡°un sistema h¨ªbrido¡±, con una memorizaci¨®n algo m¨¢s suave combinada con los test de inteligencia y pruebas de competencia. ¡°Yo creo que los cuerpos superiores van a solicitar ellos mismos una reforma cuando detecten que el sistema funciona y no es clientelar, y que incorpora buenos perfiles y tienen menos candidatos en sus procesos¡±, afirma el catedr¨¢tico.
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