El ¡°erial¡± de Eduardo Zaplana
La Guardia Civil refleja en declaraciones de se?oras de la limpieza, conserjes, patrones de barco o arquitectos c¨®mo fue el exministro del PP quien se benefici¨® de los fondos presuntamente procedentes de mordidas y retornados a Espa?a
El exministro y expresidente de la Generalitat valenciana, Eduardo Zaplana, tuvo sumo cuidado en no aparecer formalmente en las sociedades que, supuestamente, blanquearon el dinero procedente de las mordidas por la adjudicaci¨®n del Plan E¨®lico valenciano y los servicios de ITV. Sin embargo, la investigaci¨®n, reflejada en un informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil y entregado al juzgado, desvela que fue el exministro el que disfrut¨® de los bienes adquiridos en Espa?a, tal como han ido declarando se?oras de la limpieza, conserjes, patrones de barco o arquitectos. Los investigadores tambi¨¦n han recopilado documentaci¨®n y cruzado esta con los apuntes de la detallada agenda de Zaplana para concluir que ¨¦l fue el beneficiario final del dinero que retorn¨® a Espa?a tras su paso por sociedades de Luxemburgo y Andorra. El exministro fue detenido e imputado en 2018 por la presunta comisi¨®n de los delitos de blanqueo y cohecho en la operaci¨®n conocida como caso Erial.
Una de las operaciones que describe el informe de la UCO es el de la compra de una vivienda en la Calle N¨²?ez de Balboa, en el distrito madrile?o de Salamanca. El piso fue adquirido por una empresa, Costera de Glorio, por 1,6 millones de euros. Eduardo Zaplana no aparece en los registros oficiales de la empresa pero la Guardia Civil asegura que fue el ¨²nico que vivi¨® en esa casa, entre 2010 y 2018, a?os en los que trabaj¨® para Telef¨®nica, hasta que fue arrestado. Son varios los indicios que se?ala el informe. El hecho de que el exministro y portavoz del Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar fuera una persona p¨²blica y f¨¢cilmente identificable facilit¨® a los investigadores que cualquier persona con la que hab¨ªa tratado se acordara de ¨¦l. La empleada de la inmobiliaria asegur¨® que fue a Zaplana a quien le ense?¨® la vivienda por la que mostr¨® mucho inter¨¦s¡±. El piso, finalmente, no se compr¨® a su nombre pero la Guardia Civil asegura en el que informe que se le relaciona ¡°con la adquisici¨®n y las visitas previas a este inmueble, las reformas acometidas en el mismo, la adquisici¨®n de determinados enseres, la contrataci¨®n de su empleada del hogar y la toma de decisiones¡±. Porque, en realidad, no dejaba en manos de otros las decisiones. ?l mismo apunt¨® en su agenda, el 24 de febrero, una visita a las 17.30 a la tienda Bang & Olufsen. Seg¨²n refleja el informe, las adquisiciones en esa tienda, que tampoco se realizaron a su nombre, se entregaron en el piso el 1 de marzo.
Tambi¨¦n el conserje asegur¨® haberle visto varias veces y que ¡°habitualmente utilizaba el montacargas¡±. Declar¨® que a los que m¨¢s ve¨ªa era tanto al escolta del exministro como a su ch¨®fer, con los que, a veces, tomaba caf¨¦. ¡°Zaplana era la ¨²nica persona que usaba la casa y las cosas que hab¨ªa en la vivienda, como por ejemplo la ropa, eran de ¨¦l¡±, asegur¨® la empleada del hogar.
Pero adem¨¢s de los indicios y las declaraciones, el momento de su detenci¨®n, en mayo de 2018, ¡°junto a otra serie de documentos relacionados con el inmueble de N¨²?ez de Balboa, en su malet¨ªn personal, se localizaron las n¨®minas de enero y febrero de la asistenta¡±. Esta explic¨® que, en ocasiones, era el propio Zaplana quien le pagaba y que otras veces se lo dejaban en la vivienda ¡°o se lo daba el ch¨®fer de Zaplana o, en alguna vez tuvo que ir a buscarlo al edificio de Telef¨®nica y se lo daba la secretaria de Zaplana¡±.
Otra de las operaciones que detalla la UCO en su informe es la de la adquisici¨®n de una casa en La Finca, una urbanizaci¨®n de lujo en Pozuelo de Alarc¨®n. ¡°Las evidencias recopiladas otorgan un papel protagonista de Eduardo Zaplana¡±, mantienen los investigadores, que incluyen la declaraci¨®n de uno de los mediadores en la compra que recordaba ¡°que la operaci¨®n de compra se hizo a trav¨¦s de una persona interpuesta, un testaferro, del que no recuerda el nombre, que acompa?aba a Eduardo Zaplana, que todas las instrucciones en relaci¨®n al inmueble las daba Eduardo Zaplana¡±. La casa se vendi¨® dos a?os y medio despu¨¦s a la inmobiliaria a la que una de las empresas que supuestamente trajeron el dinero a Espa?a procedente de las mordidas hab¨ªa adquirido. En dos a?os y cinco meses se gener¨® una plusval¨ªa de cerca de 3,5 millones puesto que la empresa que se relaciona con Zaplana la compr¨® por 700.000 y posteriormente la vendi¨® por m¨¢s de cuatro millones. Esa fue, a juicio del arquitecto Joaqu¨ªn Torres, una manera de hacerle un favor a Eduardo Zaplana. ¡°Fue un negocio especulativo¡±, describi¨® Torres, tal como recoge el informe. El mismo arquitecto se?al¨® que le dio la sensaci¨®n de que el exministro nunca tuvo intenci¨®n de vivir en la Finca, ¡°fue a hacer negocio y las propuestas de reforma de esta vivienda nunca se llevaron a cabo¡±.
Un caso similar refleja la adquisici¨®n de un barco aunque, en este caso, Eduardo Zaplana s¨ª aparece como uno de los ocho propietarios de la embarcaci¨®n. Los investigadores hacen hincapi¨¦ en que solo era titular de un 6% de la embarcaci¨®n que cost¨® casi 500.000 euros. Sin embargo, el patr¨®n declar¨® que cuatro de los propietarios nunca hicieron uso de ella y otro, lo normal es que lo usara en compa?¨ªa del dirigente del PP.
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