La tragedia golpea a una tripulaci¨®n curtida en el mar

La tripulaci¨®n que afront¨® a bordo del Villa de Pitanxo el terrible temporal que azota Terranova estaba integrada en buena parte por marineros experimentados, curtidos en alta mar. Manuel Queima?o, expatr¨®n del barco y buen conocedor de la mala mar de esos caladeros, explica que el buque se encontraba adem¨¢s bien conservado y ha resistido unas cuantas galernas. ¡°Pero algo pas¨® y se acab¨® la suerte¡±, lamenta.

Uno de los supervivientes es el patr¨®n, Juan Pad¨ªn Costa, de 53 a?os y vecino de Cangas (Pontevedra). Trabaja desde los 16 a?os de marinero y tiene mucha experiencia en los caladeros de Canad¨¢. Veterano y de la misma localidad es tambi¨¦n otro de los tres tripulantes que han sido hallados con vida, su sobrino Eduardo Rial Pad¨ªn, de 42 a?os. Y el primer oficial, Juan Antonio Cordero Coro, de 55 a?os y de Lepe (Huelva), que estaba a punto de jubilarse. Ellos y sus compa?eros dejaron en tierra parejas e hijos, algunos reci¨¦n nacidos, que han vivido angustiados la llegada de noticias a cuentagotas. La noche del mi¨¦rcoles, las autoridades canadienses informaron de que se suspend¨ªan las labores de b¨²squeda en alta mar. Poco despu¨¦s, la familia de Cordero Coro pidi¨® que no se paralizara el rescate por pocas esperanzas que hubiera de encontrarlo, seg¨²n inform¨® Efe.

El jefe de m¨¢quinas, Francisco de Pazo, de 70 a?os, es un profesional del mar muy conocido en Mar¨ªn (Pontevedra), padre de la exconcejala del PP en este municipio Mar¨ªa Jos¨¦ de Pazo. Lleva toda una vida vinculado a la pesca aunque ahora, ya jubilado, solo se embarcaba de forma espor¨¢dica, cuenta Queima?o. El anterior jefe de m¨¢quinas del buque al que sustituy¨®, a?ade, se retir¨® justo en la marea anterior al naufragio.

En el buque estaba enrolado el cocinero Fernando Santom¨¦, de Bueu (Pontevedra), de unos 50 a?os, casado y con dos hijas, con a?os de navegaci¨®n a sus espaldas. M¨¢s joven pero no menos experimentado es el marinero Jonathan Calder¨®n, de 39 a?os, originario de Per¨² aunque afincado en Mar¨ªn desde hace mucho tiempo. Su compatriota William Ar¨¦valo P¨¦rez atesora una larga carrera en el sector pesquero. Su t¨ªo es cocinero de barco.

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Im¨¢genes a bordo del 'R¨ªo Caxil', uno de los barcos que trata de rescatar a los desaparecidos

¡°Los peruanos son muy buenos marineros y suelen pertenecer a familias enteras que trabajan en el mar. Si no tienen a sus familiares en el mismo barco, los tienen en otro¡±, apunta Queima?o, horas antes de conocerse la suspensi¨®n de las tareas de b¨²squeda. Es el caso de Edwin C¨®rdoba, de 29 a?os, vecino de Vigo y padre de cuatro ni?os peque?os, uno de ellos una beb¨¦ de solo seis meses. Se enrol¨® en el buque ahora siniestrado junto a dos parientes, Daniel More, con dos hijos, y Diego Andr¨¦s More. Un experimentado marinero de Per¨² es tambi¨¦n Miguel Lumbres Cumpra, de unos 50 a?os. Entre los tripulantes m¨¢s j¨®venes est¨¢ Ra¨²l Gonz¨¢lez Santiago, de 24 a?os, vecino de Cangas y miembro de una familia muy vinculada al mar. El gallego Fernando Gonz¨¢lez, de 53 a?os, encaraba su primera marea en Terranova, aunque ya hab¨ªa estado en Malvinas.

La tripulaci¨®n del Villa de Pitanxo incluye a marineros llegados a Galicia desde Ghana. Edemon Okutu, de unos 45 a?os y hermano del atleta Jean Marie Okutu, es el contramaestre del barco. Afincado en Mar¨ªn, tambi¨¦n viene de una familia con ra¨ªces marineras en ?frica. ¡°Es muy bueno, un profesional muy respetado. ?l cuenta que su abuelo ten¨ªa un barco all¨¢ en Ghana y que por eso sabe manejar tan bien las redes¡±, se?ala Queima?o, expatr¨®n del buque naufragado, que comparti¨® con Okutu varias mareas. De Ghana tambi¨¦n procede Samuel Kwesi Koufie, de unos 30 a?os, que tienen a su familia en su pa¨ªs de origen. All¨ª est¨¢n sus cinco hijos, incluido un beb¨¦ al que a¨²n no ha podido conocer. Se trata del tercer superviviente, seg¨²n han confirmado sus allegados a Europa Press.

A bordo del Villa de Pitanxo viajaba el bi¨®logo Francisco Manuel Navarro Rodr¨ªguez, de 33 a?os y oriundo de Las Palmas de Gran Canaria. Su puesto es el de observador, encargado de controlar las capturas. Tampoco reside en Galicia el primer oficial del barco, Juan Antonio Cordero Coro, de 55 a?os y vecino de Lepe (Huelva). El Ayuntamiento de esta poblaci¨®n andaluza ha informado de que era ¡°muy conocido y querido en la localidad¡±, dedicado desde hace tiempo al mundo del mar, casado y con dos hijos. Le quedaba un mes para jubilarse.

¡°La pregunta del mill¨®n es ?c¨®mo se pudo hundir?¡±

Cordero Coro lleva toda su vida en el mar. Empez¨® con su padre con 15 a?os, primero en bajura en la costa de Huelva y al poco tiempo en la de altura, sobre todo en las costas de Mauritania, pero tambi¨¦n conoc¨ªa bien las fr¨ªas aguas de Terranova. Este era el tercer a?o que formaba parte de la tripulaci¨®n del pesquero Villa de Pitanxo y deb¨ªa volver en menos de 23 d¨ªas a Lepe. Su familia es realista, pero se aferra firmemente al ¨²ltimo hilo de esperanza, explica su sobrino, que ejerce como portavoz de la familia. Tanto su esposa, como sus hijos, de 30 y 21 a?os, est¨¢n recibiendo ayuda psicol¨®gica prestada por los servicios del Ayuntamiento de Lepe y por una vecina psic¨®loga. Como ella, muchos de los amigos del barrio se han volcado en darles ¨¢nimos y consuelo.

Otro afectado por la tragedia del Villa de Pitanxo es Jaime Valladares Rodr¨ªguez, un patr¨®n de Cangas do Morrazo, de 45 a?os. ¡°Estoy jodido, muy mal, porque me toca muy de cerca. Yo estuve 10 a?os de capit¨¢n en el barco y conoc¨ªa a mucha gente de la tripulaci¨®n¡±, cuenta por tel¨¦fono Valladares, que fue el patr¨®n del buque naufragado hasta 2014. Ahora dirige el nav¨ªo portugu¨¦s Princesa Santa Joana, de 92 metros de eslora (longitud) y 15 de manga (anchura), que se encuentra desde hace un mes en aguas de Terranova, unas millas m¨¢s al sur del lugar del accidente.

¡°La pregunta del mill¨®n es ?c¨®mo se pudo hundir el Villa de Pitanxo, que era un barco nuevo [es de 2004], muy bueno, muy marinero y muy estable?¡±, cuenta Valladares, que empez¨® a trabajar en el mar a los 17 a?os y solo par¨® durante nueve meses cuando ten¨ªa 21 porque se fue a hacer la mili. El buque, que naufrag¨® el martes a 450 kil¨®metros al sureste de la isla canadiense, sol¨ªa hacer mareas de dos meses, que es el m¨¢ximo tiempo que su autonom¨ªa les permit¨ªa mantenerse en alta mar, en pleno Atl¨¢ntico norte, pescando flet¨¢n, cabra, raya y otras especies. El barco estaba a punto de regresar a Mar¨ªn, donde ten¨ªa su base, porque los oficiales ya daban por terminada la marea. ¡°La situaci¨®n es muy complicada porque si los cuerpos no ten¨ªan el chaleco salvavidas, tienden a ir hacia el fondo¡±, explica Valladares, que considera casi una misi¨®n imposible la localizaci¨®n de los 12 desaparecidos.

Con informaci¨®n de Eva Saiz.