Pons marca distancias con la ¡°extrema derecha¡± de Vox pero Abascal ve posibles m¨¢s acuerdos

En los 32 minutos que dur¨® su primer discurso como candidato a presidir el PP nacional y por tanto el Gobierno de Espa?a el gallego Alberto N¨²?ez Feij¨®o no mencion¨® este mi¨¦rcoles las siglas de Vox, ni la palabra ultraderecha, ni por supuesto se acord¨® de Santiago Abascal. Guard¨® las formas y dio por hecho que todo el PP lo apoyar¨¢ masivamente en el Congreso extraordinario del 1 y 2 de abril en Sevilla. Luego construy¨® una arenga ya de precampa?a, pero en su estilo, nada enardecido.

Las dos voces por ahora de su nuevo PP, el veterano eurodiputado Esteban Gonz¨¢lez Pons y la portavoz en el Congreso y coordinadora nacional, Cuca Gamarra, marcaron en la primera jornada de la nueva etapa distancias enormes con Vox. Pons les llam¨® sin tapujos ¡°extrema derecha¡±, una calificaci¨®n que tanto evitaban los anteriores l¨ªderes y que rechaza la madrile?a Isabel D¨ªaz Ayuso. Gamarra fue m¨¢s diplom¨¢tica: ¡°El PP es otro partido, no es Vox y ya est¨¢¡±.

El l¨ªder gallego defiende que es posible otorgar al presidente de Castilla y Le¨®n, Alfonso Fern¨¢ndez Ma?ueco, libertad para negociar en la comunidad con Vox para mantenerse en el gobierno auton¨®mico, aunque sea a consta de ceder algunos cargos institucionales, y al tiempo promover ¡°entendimientos¡± y acuerdos de Estado con el PSOE y el Gobierno de Pedro S¨¢nchez, al que prometi¨® no insultar.

El presidente de Vox, Santiago Abascal, replic¨® a todas esas alusiones desde el Congreso. Primero advirtiendo a Pons y a los que les tachan de ultraderecha que cada vez que les pretenden arrinconar de esa manera les regalan un aluvi¨®n de votos y se refiri¨® al 21% que les otorgan ahora algunas encuestas. Y luego precis¨® que espera que ahora se abra una ¡°nueva etapa¡± con la llegada de Feij¨®o tras corroborar que con el PP de Pablo Casado estaban todos los puentes rotos hace tiempo.

Abascal obvi¨® los enfrentamientos y ataques que ¨¦l y otros portavoces de Vox, como Iv¨¢n Espinosa de los Monteros, sol¨ªan propinar a Feij¨®o hasta ahora al equipararle con un pol¨ªtico nacionalista y demasiado galleguista y progresista. Y se mostr¨® dispuesto a hablar con el presidente gallego, si le convoca. Abascal intuye un giro ya en la relaci¨®n y las negociaciones en marcha en Castilla y Le¨®n al apuntar que el popular Ma?ueco y su equipo ya hablan de ¡°acuerdos program¨¢ticos¡± y posibles puestos como la presidencia del Parlamento regional. Le parece que van en la buena direcci¨®n.

El PP de Feij¨®o sigue mostrando mientras tanto sus distintas voces con respecto a Vox. El presidente del comit¨¦ organizador del c¨®nclave sevillano, Esteban Gonz¨¢lez Pons, fue n¨ªtido en Telecinco: ¡°Vox no es el PP ni representa la ideolog¨ªa en la que consiste el PP. Vox es un partido de extrema derecha. El PSOE tampoco es el PP. Nosotros tenemos que definir nuestras relaciones con quienes geogr¨¢ficamente est¨¢n a nuestros costados. Pero el PP no se define por referencia a nadie. Somos un partido de centroderecha¡±.

Pons recibi¨® contestaci¨®n desde la Comunidad de Madrid que preside Ayuso. El n¨²mero dos y consejero de Presidencia, Enrique L¨®pez, replic¨®: ¡°Nosotros trabajamos con ellos y nos ha ido bien¡±. Una tesis que ha defendido Ayuso varias veces. En su exposici¨®n del martes ante la Junta Directiva Nacional del PP, frente a Feij¨®o y Casado, la presidenta madrile?a quiso volver a insistir: ¡°Somos la casa com¨²n del centroderecha, donde deben volver todas las corrientes. Negar que quien hoy vota a Vox o (en menor medida) a Ciudadanos, era nuestro votante, es estar completamente ciego y alejado de la realidad. Cosa distinta es defender desde las instituciones todo aquello que nos separa de estas dos formaciones, muy err¨¢ticas en numerosas ocasiones pero a las que nos une un objetivo com¨²n: el cambio de rumbo en Espa?a¡±.