El juez cita como imputados a tres exjefes de ETA por el asesinato de Miguel ?ngel Blanco

El juez de la Audiencia Nacional Manuel Garc¨ªa-Castell¨®n ha citado a declarar como imputados a tres antiguos jefes de ETA por el asesinato de Miguel ?ngel Blanco en 1997: Mikel Albisu, Mikel Antza; Jos¨¦ Javier Arizcuren, Kantauri (procesado ya como inductor del crimen); y Mar¨ªa Soledad Iparraguirre, Anboto. El magistrado toma esta decisi¨®n tras recibir un contundente informe de la Guardia Civil que se?ala a estos exdirigentes de la banda como ¨²ltimos responsables del atentado contra el concejal del PP de Ermua (Bizkaia). Sin embargo, el juez considera prescritos los delitos atribuidos a un cuarto terrorista: Miguel Gracia Arregui, I?aki de Renter¨ªa. Kantauri y Anboto se encuentran en prisi¨®n. Antza, al igual que I?aki de Renter¨ªa, hace tiempo que est¨¢ libre.

Este no es el ¨²nico caso abierto en la Audiencia Nacional contra las antiguas c¨²pulas de ETA. En los ¨²ltimos meses, a ra¨ªz de nuevas querellas de Dignidad y Justicia, el tribunal ha reimpulsado y reabierto este y otros cinco sumarios contra exjefes de la banda, investigados como autores mediatos (una especie de inductores que ten¨ªan el control absoluto) de distintos atentados. Entre ellos, el asesinato del concejal popular Gregorio Ord¨®?ez en 1995, donde se ha llamado tambi¨¦n a declarar como imputados a I?aki de Renter¨ªa y a Mikel Antza.

El nuevo documento policial sobre el asesinato de Miguel ?ngel Blanco, fechado el 20 de junio, confirm¨® las tesis del magistrado. El instructor, que dirigi¨® la investigaci¨®n hace 25 a?os, decidi¨® reabrir el sumario el pasado marzo tras una denuncia de la asociaci¨®n Dignidad y Justicia para averiguar si nueve antiguos dirigentes de ETA participaron en la decisi¨®n de perpetrar el atentado, y tambi¨¦n si, pudiendo impedirlo, no lo hicieron. Es decir, si cometieron un delito por ¡°omisi¨®n¡±. El instituto armado, al igual que el instructor y la asociaci¨®n denunciante, mantiene que la banda era una organizaci¨®n ¡°piramidal, jer¨¢rquica y militar¡±, regida por una c¨²pula que controlaba con mano de hierro a sus miembros y que cumpl¨ªa una funci¨®n ¡°decisiva y necesaria¡± para materializar cualquier acci¨®n terrorista.

En una resoluci¨®n de este viernes, Garc¨ªa-Castell¨®n argumenta que existen ¡°indicios¡± suficientes que ¡°permiten sustentar la presunta participaci¨®n de los integrantes del comit¨¦ ejecutivo de ETA en la acci¨®n investigada¡±. ¡°Tanto en la planificaci¨®n y toma de la decisi¨®n como en el resultado¡±, subraya el escrito, que a?ade: ¡°Pese a no ser los ejecutores materiales del secuestro y asesinato de Miguel ?ngel Blanco, podemos apreciar, desde la provisionalidad de este momento, una participaci¨®n en comisi¨®n por omisi¨®n, atendida la posici¨®n de dominio que ostentaba el ¨®rgano ejecutivo de la organizaci¨®n terrorista con capacidad real durante las m¨¢s de 48 horas en las que se prolong¨® el secuestro, para poder detenerlo, pudiendo deducir de la negativa a hacerlo una intenci¨®n manifiesta en la producci¨®n del resultado¡±.

¡°Objetivo preferente¡±

¡°La v¨ªctima de esta acci¨®n, en su calidad de miembro del PP, se hab¨ªa convertido en objetivo preferente de ETA¡±, prosigue el juez: ¡°No ya del comando Donosti [autor material del crimen], sino de toda la organizaci¨®n terrorista¡±. Seg¨²n expone el magistrado, en el verano de 1997, el comit¨¦ ejecutivo de ETA buscaba ¡°con urgencia secuestrar y asesinar a un cargo electo de la referida formaci¨®n pol¨ªtica¡±. ¡°Las comunicaciones org¨¢nicas dirigidas en esas fechas por el responsable del aparato militar, Kantauri, a otro comando de liberados de la organizaci¨®n terrorista, el comando Bizkaia, as¨ª lo pusieron de manifiesto¡±, indica.

La Audiencia Nacional ya conden¨® en su d¨ªa a tres personas por este crimen: a Francisco Javier Garc¨ªa Gaztelu, Txapote, que apret¨® el gatillo; a su pareja, Irantzu Gallastegi, Amaia, que tambi¨¦n particip¨® en la ejecuci¨®n del atentado; y a Ib¨®n Mu?oa, exedil de Herri Batasuna en Eibar (Gipuzkoa), que trabajaba cerca de donde lo hac¨ªa el concejal del PP y que facilit¨® la informaci¨®n a los anteriores. A Jos¨¦ Luis Geresta M¨²jica, Ttotto, que sujet¨® a Blanco mientras lo asesinaban, nunca se lo lleg¨® a juzgar: su cad¨¢ver se encontr¨® en 1999 con un tiro en la sien. Los forenses concluyeron que se suicid¨®.

Garc¨ªa-Castell¨®n incide en que los miembros del comit¨¦ ejecutivo o zuba ¡ªdenominaci¨®n que recib¨ªa la c¨²pula de ETA en el argot de los terroristas¡ª ¡°eran plenamente conscientes de la posici¨®n de mando que ostentaban¡± dentro de la banda y ¡°de su amplia capacidad de actuaci¨®n¡±: ¡°Es decir, la de ordenar la comisi¨®n de acciones terroristas concretas o bien, la de evitarlas¡±. Y eran tambi¨¦n ¡°plenamente conocedores de la existencia del secuestro¡±. El magistrado a?ade que no solo ¡°decidieron, planificaron y ordenaron¡± el atentado, sino que se ¡°responsabilizaron¡± del mismo a trav¨¦s de los medios de comunicaci¨®n y mediante un ¡°comunicado justificando la acci¨®n terrorista¡±.

En este sentido, la resoluci¨®n de este viernes remacha: ¡°Pese a los m¨²ltiples llamamientos que, tras el secuestro de la v¨ªctima, se produjeron por parte de la gran mayor¨ªa de la sociedad civil espa?ola y de la clase pol¨ªtica dirigente en ese momento, los miembros del comit¨¦ ejecutivo no realizaron ning¨²n acto para que finalizara el secuestro ni [para evitar] la muerte de la v¨ªctima, evidenciando una voluntad inequ¨ªvoca en la producci¨®n del resultado¡±. ¡°Eran plenamente conscientes de que ten¨ªan a su alcance los medios para hacer cesar esa situaci¨®n y su posible resultado final, el asesinato de la v¨ªctima¡±, concluye.