El sector conservador del Poder Judicial logra dilatar la renovaci¨®n del Tribunal Constitucional
El bloque rebelde pretendi¨® que se encargara un dictamen sobre el l¨ªmite para elegir a dos magistrados del tribunal de garant¨ªas, que vence el pr¨®ximo d¨ªa 13
El sector conservador del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) consigui¨® este jueves su prop¨®sito de dilatar el proceso de elecci¨®n de los dos magistrados del Tribunal Constitucional que le corresponde nombrar al ¨®rgano de gobierno de los jueces. Lo logr¨® al precio de incumplir la ley impulsada por el Gobierno y aprobada por el Parlamento para que el Consejo recuperase la competencia sobre dichas designaciones. Esta reforma legal fijaba el 13 de septiembre como fecha l¨ªmite para llevar a cabo los nombramientos. Pero tanto los vocales conservadores como los progresistas coinciden en estimar que ya no ser¨¢ posible, dado que este jueves no pudo cerrarse una previsi¨®n de calendario. Se intent¨®, pero fue en vano.
El eje de la discusi¨®n fue el conjunto de reglas del proceso de elecci¨®n de los candidatos y las posteriores votaciones. Para tratar de agilizar el debate, el pleno se suspendi¨® durante m¨¢s de una hora y tres de los vocales se reunieron en un despacho con el fin de ultimar esas normas. Jos¨¦ Mar¨ªa Mac¨ªas, Wenceslao Olea y ?lvaro Cuesta llegaron a un acuerdo que supone una clara concesi¨®n al sector conservador, que siempre ha puesto el acento en la importancia de fijar por escrito las pautas de procedimiento, con el argumento de que esta es la ¨²nica forma de prevenir que las decisiones que se adopten se ajustar¨¢n a las normas y h¨¢bitos del Consejo, de modo que no puedan ser luego impugnadas con perspectivas de ¨¦xito.
En todo caso, conservadores y progresistas coinciden en estimar que es m¨ªnima la posibilidad de que dichas reglas de procedimiento den lugar a sorpresas en las votaciones. A estos efectos es clave el papel que pueda jugar el presidente del Consejo de Poder Judicial y del Supremo, Carlos Lesmes, quien ha buscado apoyos entre los vocales conservadores para que dejen de arrastrar los pies en este proceso y propongan a un candidato de su perfil. Tras el pleno de ayer, Lesmes almorz¨® con Jos¨¦ Mar¨ªa Mac¨ªas, muy cr¨ªtico con las reformas que el Gobierno ha impulsado para limitar primero las competencias del Consejo y aumentarlas despu¨¦s, en este ¨²ltimo caso para permitir la renovaci¨®n del Constitucional. El objetivo de Lesmes ¡ªsubrayan fuentes del Consejo¡ª es que esta renovaci¨®n quede acordada durante el presente mes de septiembre. Su posible dimisi¨®n ¡ªanunciada el pasado martes¡ª no se producir¨ªa antes de dejar resuelto este cap¨ªtulo.
El acuerdo sobre las reglas de juego de este proceso, aprobadas este jueves por unanimidad, constituye el primer paso para lograrlo. El texto prev¨¦ que se acuda a un nuevo pleno cuando haya acuerdo para proponer a dos candidatos, uno de cada sector. Pero permite al propio tiempo que antes de iniciarse las votaciones cualquier vocal pueda defender otra u otras candidaturas. Fuentes de ambos grupos descartan que esta previsi¨®n ¡ªsusceptible de introducir aspirantes sorpresa al Constitucional¡ª implique una rendija por la que puedan colarse intentos de adulterar el pacto previo que se haya alcanzado sobre los candidatos, ya que en caso de existir un acuerdo, el nuevo nombre no obtendr¨ªa los 12 votos necesarios para ser designado.
Ambas partes sostienen que se trata m¨¢s bien de garantizar la libertad de voto de los vocales, en modo alguno sujetos a una especie de mandato imperativo. Una vez regulada la posibilidad de presentar candidatos a t¨ªtulo individual, queda preservada la libertad de voto de los miembros del pleno, sin que ello haya de representar necesariamente un riesgo para los acuerdos que se hayan alcanzado entre conservadores y progresistas. Los vocales que se ci?an a los candidatos previamente pactados lo har¨¢n por ser esta su libre determinaci¨®n y sin coartar el criterio de quienes eventualmente quieran defender otra opci¨®n.
Rafael Mozo, Roser Bach y ?lvaro Cuesta formar¨¢n la representaci¨®n progresista en la negociaci¨®n que se va a abrir para la elecci¨®n de los dos magistrados que le corresponde nombrar al Poder Judicial. El sector conservador designar¨¢ a otros tres vocales. El diferente ritmo con el que ambos grupos encaran este proceso qued¨® en evidencia ayer en todo tipo de detalles. Esta diversidad de estrategias fue reconocida por uno de los vocales del grupo conservador al afirmar que ¡°ellos quieren hacerlo deprisa, nosotros queremos hacerlo bien¡±.
Pero en otras fases del pleno se puso de manifiesto que la inclinaci¨®n normativista de los conservadores no deriva solo de un posible perfeccionismo jur¨ªdico, sino de una propensi¨®n dilatoria m¨¢s que aparente. Desde dicho grupo se propuso, por ejemplo, que se encargara al gabinete t¨¦cnico del Consejo del Poder Judicial la confecci¨®n de un dictamen sobre la correcci¨®n y encaje legal del l¨ªmite de tres meses que la ley concede al ¨®rgano de gobierno de los jueces para acordar dichos nombramientos. Al sector conservador esta previsi¨®n siempre le pareci¨® equivalente a un yugo injustificado y cuestionable. No obstante, la propuesta de que se elaborase dicho dictamen se rechaz¨® por innecesaria, m¨¢xime teniendo en cuenta que ambos grupos coinciden en que la fecha l¨ªmite del pr¨®ximo d¨ªa 13 se va a rebasar.
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