Madrid, Comunidad Valenciana y Canarias, territorios clave para las alianzas de la izquierda en mayo
Podemos e IU protegen el di¨¢logo para una coalici¨®n en las auton¨®micas y municipales de la tensi¨®n entre Iglesias y D¨ªaz. Las negociaciones est¨¢n hoy muy abiertas
Las elecciones auton¨®micas y municipales de mayo pondr¨¢n de nuevo a prueba la unidad a la izquierda del PSOE, muy tocada tras los comicios andaluces y con el proyecto de la vicepresidenta Yolanda D¨ªaz a¨²n a medias. A seis meses de la cita con las urnas, los partidos del grupo se afanan en forjar candidaturas que eviten una debacle como la de junio y permitan llegar a noviembre de 2023 con la organizaci¨®n intacta. En un contexto de fuertes tensiones en Unidas Podemos (UP), las negociaciones se antojan clave en comunidades como Madrid, Comunidad Valenciana y Canarias, que incluyen a otros actores en la ecuaci¨®n, en algunos casos predominantes, como M¨¢s Madrid y Comprom¨ªs. El escenario est¨¢ a¨²n hoy muy abierto y el papel de D¨ªaz, a¨²n por decidir, es una de las principales inc¨®gnitas.
Desde la vuelta del verano, las conversaciones entre las dos principales organizaciones de UP no han avanzado demasiado. Podemos acaba de celebrar sus primarias e IU est¨¢ haciendo ya lo propio all¨ª donde se presenta m¨¢s de una candidatura. Ambos partidos trasladan la intenci¨®n de llegar a acuerdos y prefieren resguardar este proceso de las ¨²ltimas declaraciones de Pablo Iglesias en las que el exvicepresidente pidi¨® a D¨ªaz ¡°respeto¡±, la urgi¨® a sentarse a negociar con los partidos y lanz¨® reproches a IU. Pero el clima es de desconfianza y el ruido no ayuda.
El partido del ministro Alberto Garz¨®n se ha dado de plazo hasta finales de enero para lograr un acuerdo con la formaci¨®n de Ione Belarra. La consigna en los dos lados es clara. Nadie quiere repetir un escenario como el andaluz, donde las negociaciones se apuraron tanto que Podemos y el ecologista Alianza Verde acabaron fuera del registro de la marca. La pol¨¦mica lastr¨® a la confluencia, que obtuvo tan solo cinco diputados, frente a los 17 de cuatro a?os antes.
¡°Lo que no puede ser es que cada negociaci¨®n sea un todos contra uno¡±, advierte ahora una fuente de Podemos. El partido, que reivindica su papel de liderazgo, asegura tener voluntad de cerrar pactos para ir en coalici¨®n, pero reclama que estos sean ¡°justos¡± y no se intente obtener en los despachos la representaci¨®n que no se logr¨® en las urnas. IU, mientras, hace valer su implantaci¨®n territorial y alcald¨ªas emblem¨¢ticas como Zamora o Rivas-Vaciamadrid.
Podemos, que en 2019 se qued¨® fuera de los parlamentos de Cantabria y Castilla-La Mancha, se juega ahora revalidar su presencia en los ejecutivos de coalici¨®n de seis comunidades: Navarra, La Rioja, Arag¨®n, Comunidad Valenciana, Baleares y Canarias. Pero la batalla va m¨¢s all¨¢ y adquiere gran relevancia en territorios como Madrid, cuna del partido. En esta comunidad, M¨¢s Madrid, principal fuerza de la oposici¨®n con M¨®nica Garc¨ªa como portavoz en la Asamblea, ya ha rechazado diluirse en otra marca y fuentes de Podemos, que postula a Alejandra Jacinto, descartan tambi¨¦n un pacto. El riesgo de quedarse sin representaci¨®n existe. Izquierda Unida, por su parte y pese a ser consciente de las dificultades, no cierra ninguna puerta y reitera su m¨¢xima de sentarse a hablar con ¡°todas las fuerzas progresistas¡±.
En la Comunidad Valenciana, otro territorio complejo, el cierre de alianzas est¨¢ a¨²n muy lejos, ya que Comprom¨ªs tiene de plazo hasta enero para celebrar sus primarias. De momento, y a pesar de las pol¨¦micas estatales, las previsiones apuntan a que Esquerra Unida y Podem repetir¨¢n acuerdo para concurrir juntos a las auton¨®micas. Ambos partidos estar¨ªan dispuestos tambi¨¦n a sentarse con Comprom¨ªs ¡ªsu diputado en el Congreso Joan Baldov¨ª se ha postulado como candidato¡ª, para debatir un posible pacto a tres, pero esta formaci¨®n se resiste a compartir papeleta. Yolanda D¨ªaz apoy¨® en un primer momento al diputado en el Congreso y obvi¨® al candidato de Podemos, H¨¦ctor Illueca, aunque luego matiz¨® su respaldo.
La ¨²ltima brecha se ha abierto en Canarias, donde la aparici¨®n de Proyecto Drago, el movimiento abanderado por el ex n¨²mero tres de Podemos, Alberto Rodr¨ªguez, muy popular en las islas, complica a¨²n m¨¢s el escenario para su antiguo partido, golpeado en el ¨²ltimo a?o por varias escisiones. Con el proyecto reci¨¦n lanzado, todav¨ªa es pronto para esbozar alianzas y los partidos negocian en una mesa con varios actores, pero la coalici¨®n de Rodr¨ªguez ¡ªtambi¨¦n antiguo militante de IU¡ª con Podemos semeja a priori compleja.
La situaci¨®n var¨ªa de un territorio a otro. Las formaciones ir¨¢n juntas por primera vez en Navarra y repetir¨¢n en La Rioja. La confluencia se da por descontada en Baleares (comunidad en la que no competir¨¢ el juez y actual vicepresidente Juan Pedro Yllanes) o Extremadura, pero parece dif¨ªcil en otras autonom¨ªas donde hist¨®ricamente se han presentado por separado, como Arag¨®n o Asturias.
Con informaci¨®n de Mar¨ªa Fabra y Lourdes Lucio.
El mapa dispar de las municipales
En Cataluña, la adhesión en las municipales en torno a los comunes de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, está asegurada. Las heridas, sin embargo, siguen aún muy abiertas en Andalucía y las organizaciones trabajan por ahora en paralelo. Aunque en el caso de IU serán las asambleas locales las que tengan la última palabra, su coordinador autonómico, Toni Valero, aboga por candidaturas “amplias y plurales” que incluyan a partidos e independientes. Mientras las conversaciones se desarrollan sin sobresaltos en Euskadi, el escenario gallego es más complejo. Después de que en 2015 las mareas llegaran al Gobierno de A Coruña, Santiago y Ferrol, los comicios de 2019 supusieron un fuerte retroceso. Podemos quiere buscar la confluencia con Esquerda Unida y lo que queda de las mareas, pero la alianza con Anova, de corte nacionalista, se complica. La situación es difícil en el caso de A Coruña, donde la Marea Atlántica tiene una hoja de ruta propia.
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