El Constitucional opta por aislarse del ruido sobre su renovaci¨®n

El Tribunal Constitucional ha convocado para la pr¨®xima semana ¡ªlos d¨ªas 20, 21 y 22¡ª un nuevo pleno, que probablemente ser¨¢ el ¨²ltimo del a?o, en el que, una vez m¨¢s, no ha incluido ning¨²n asunto conflictivo. Las deliberaciones sobre leyes relevantes siguen aparcadas, a la espera de ver si el Consejo General del Poder Judicial elige a los dos magistrados del ¨®rgano de garant¨ªas que le corresponde nombrar. Cuando se produzca, esa elecci¨®n supondr¨¢ el punto final a seis meses de resistencia del sector conservador del Consejo, que mantiene bloqueada la obligada renovaci¨®n del tribunal desde el 12 de junio, fecha en la que caduc¨® el mandato de su actual composici¨®n.

El criterio dominante en el Constitucional es que el relevo de cuatro de sus magistrados ¡ªentre ellos el presidente, Pedro Gonz¨¢lez-Trevijano, y el vicepresidente, Juan Antonio Xiol, conservador y progresista, respectivamente¡ª ya no podr¨¢ hacerse hasta el pr¨®ximo enero, aunque se desbloquee en el pleno ordinario que el Poder Judicial tiene tambi¨¦n convocado para el 22 de diciembre. Lo previsto, en este sentido, es que la reforma legal impulsada por el Gobierno para facilitar la renovaci¨®n se apruebe en esa misma fecha en el Senado, lo que supondr¨¢ la apertura de un breve plazo para la presentaci¨®n de candidatos. En el Constitucional se estima, por tanto, que la toma de posesi¨®n de los nuevos magistrados tendr¨ªa lugar pasado el par¨¦ntesis de Navidad y Reyes.

Un magistrado del grupo progresista del tribunal define as¨ª la situaci¨®n: ¡°Aqu¨ª lo que se ha acordado es una estrategia de cuerpo a tierra, con la confianza de que la nueva ofensiva del sector conservador del Poder Judicial para entorpecer la renovaci¨®n no tenga el menor ¨¦xito¡±.

En el sector conservador del Constitucional se considera previsible el rechazo, este martes, de Rafael Mozo, presidente suplente del Poder Judicial, a celebrar una reuni¨®n urgente para elegir a los dos magistrados del tribunal de garant¨ªas que le corresponde designar al Consejo. Entre los progresistas, en cambio, se ha recibido con satisfacci¨®n la noticia, pues consideran que hay que aplicar la reforma legal que impulsa el Gobierno sin dilaciones.

En paralelo, la mayor satisfacci¨®n del grupo conservador del tribunal de garant¨ªas se centra en la constataci¨®n de que con la nueva normativa para la renovaci¨®n del Constitucional ya no va a ser precisa, al menos, la celebraci¨®n de un pleno espec¨ªfico en el que haya que dar o negar el pl¨¢cet a Juan Carlos Campo y Laura D¨ªaz, los dos magistrados que ya ha designado el Gobierno. Los integrantes de este bloque ya hab¨ªan advertido de su oposici¨®n a admitir a los dos juristas elegidos por el Ejecutivo mientras no vinieran acompa?ados de los dos que corresponde designar al Poder Judicial. Sin embargo, fuentes de este grupo admiten que un pleno celebrado bajo dichas circunstancias les hubiera hecho pasar a la historia del tribunal como responsables de la segunda vuelta de tuerca ¡ªtras la aplicada por el Poder Judicial¡ª para conseguir el bloqueo del Constitucional, dando la imagen de aferrarse a unos cargos en los que tuvieron que haber cesado hace ahora medio a?o.