El Gobierno apura su marat¨®n legislativo en medio de la gresca

En este Congreso siempre se puede esperar que lo peor est¨¦ por venir. Desde finales de noviembre, cada semana parec¨ªa alcanzar la cumbre de la tensi¨®n hasta que la siguiente se encargaba de elevar la cota. Tras 18 a?os en el Parlamento, la diputada de Coalici¨®n Canaria Ana Oramas confes¨® el jueves en la tribuna: ¡°Nunca pens¨¦ que iba a ver esto¡±. Oramas sobrevolaba la disputa que ese d¨ªa convirti¨® el pleno del Congreso en un jaleo suburbial. Junto a la derecha, la diputada se opon¨ªa a la reforma del C¨®digo Penal y a ese modo en que se ha tramitado, reconocido como ¡°chapucero¡± hasta entre los aliados del Gobierno. Pero al mismo tiempo compart¨ªa con la izquierda un sentimiento de gravedad ante el temor de que el Tribunal Constitucional escribiese una p¨¢gina hist¨®rica suspendiendo una votaci¨®n parlamentaria. Entre esas dos aguas, Oramas emple¨® su exiguo minuto y medio en pedir calma y apelar a Braulio, un viejo cantante canario: ¡°Si se imponen las pasiones, yo no s¨¦ qu¨¦ va a pasar¡±.

Nadie escuch¨® a Oramas, por supuesto. El debate sigui¨® encanall¨¢ndose, entre el vocer¨ªo de las bancadas y la inflamaci¨®n de los oradores que se acusaban unos a otros de golpismo. Una nueva cumbre superada, a la espera de otra semana parlamentaria repleta de citas candentes. El Gobierno afrontar¨¢ en tres d¨ªas un marat¨®n legislativo tanto en el Congreso como en el Senado. Hasta 17 proyectos se votar¨¢n entre ambas C¨¢maras y no sobre cuestiones menores. Por si la cosa se enfr¨ªa, el calendario promete un nuevo cara a cara de Pedro S¨¢nchez y Alberto N¨²?ez Feij¨®o en la C¨¢mara alta, ese lugar casi olvidado que la presencia del l¨ªder del PP ha vuelto a poner en el foco. En los pr¨®ximos d¨ªas lo estar¨¢ m¨¢s que nunca.

Tras su trepidante paso por el Congreso, la reforma del C¨®digo Penal se dispone a un tr¨¢nsito no menos presuroso por el Senado. El martes se ver¨¢ en comisi¨®n y el jueves se someter¨¢ a pleno, siempre a expensas de que el Tribunal Constitucional no decida el lunes atender el recurso del PP y suspender la tramitaci¨®n, lo que desatar¨ªa una crisis institucional sin precedentes con las Cortes Generales como epicentro. Si el proceso sigue adelante y no se introducen m¨¢s modificaciones en el texto, el Senado lo dejar¨¢ listo para remitirlo al BOE. El Gobierno espera que suceda lo mismo con los Presupuestos del Estado, que el martes pasan su ¨²ltimo tr¨¢mite en la C¨¢mara alta.

El Ejecutivo se ufana siempre de su copiosa producci¨®n legislativa, hasta 175 proyectos en tres a?os. El PP le reprocha que semejante cantidad va a menudo en detrimento de la calidad, sobre todo cuando se trata de iniciativas tramitadas a toda prisa. Una de las que m¨¢s han combatido en ese aspecto los populares es la que crea los impuestos extraordinarios a las energ¨¦ticas, la banca y las grandes fortunas, tambi¨¦n en el men¨² del Senado para la semana pr¨®xima, que suma 10 proyectos en total.

Otras siete leyes, con sus textos ya cerrados, se someter¨¢n al tiempo al pleno del Congreso. En el paquete va la ley trans, gran dolor de cabeza de los ¨²ltimos meses para los socios del Gobierno. El PSOE ya ha renunciado a mantener la enmienda que ampliaba de 14 a 16 a?os el l¨ªmite de edad en que los cambios de sexo han de contar con autorizaci¨®n judicial, pero el grupo de mujeres socialistas hostiles a la norma sigue presionando hasta el minuto final. Este texto a¨²n deber¨¢ pasar por el Senado, junto a otros cuatro que el Congreso espera dejar listos la pr¨®xima semana: los de universidades, empleo, mercado de valores y protecci¨®n de las personas que denuncian casos de corrupci¨®n. Uno m¨¢s, la ley del deporte, ya est¨¢ de vuelta de la C¨¢mara alta, listo para su aprobaci¨®n definitiva y su env¨ªo al BOE.

Los dur¨ªsimos choques de los ¨²ltimos d¨ªas con la derecha han ayudado a apretar filas en el Gobierno, pero quedan unas cuantas minas por desactivar. La ley de bienestar animal, promovida por el ministerio de Ione Belarra, encabeza ahora mismo la lista. Para el martes est¨¢ convocada en el Congreso la comisi¨®n que debe redactar el texto y a estas alturas la divergencia entre los socios del Ejecutivo es total. El PSOE no cede en su pretensi¨®n de dejar fuera de las nuevas normas protectoras a los perros pastores y de caza. El proyecto puede embarrancar. Tampoco son muy optimistas las perspectivas sobre una de las promesas estrella de la coalici¨®n, la reforma de la ley mordaza, pese a que la semana entrante se reanudar¨¢n los trabajos de su ponencia tras una par¨¢lisis de 10 meses. Durante este tiempo, los partidos no han dejado de hablar sin que las diferencias entre el PSOE y los grupos a su izquierda ¨Dque exigen prohibir el uso de pelotas de goma como material antidisturbios¨D se hayan superado.

A diferencia de la pasada semana, con Pedro S¨¢nchez de cumbre europea, el presidente estar¨¢ en el centro de la refriega. S¨¢nchez se siente a gusto en la confrontaci¨®n parlamentaria y el mi¨¦rcoles protagonizar¨¢ un ins¨®lito doblete: sesi¨®n de control en el Congreso por la ma?ana y en el Senado por la tarde con Feij¨®o. El ¨²ltimo duelo de ambos l¨ªderes, hace un mes, son¨® muy ¨¢spero. Ni el menor indicio invita a pensar que esta vez no vaya a resultar peor.