Arranca el a?o electoral en el que l¨ªderes y partidos se juegan ser o no ser
Las elecciones auton¨®micas y municipales de mayo se ven como unas primarias de las generales previstas para diciembre. Las formaciones preparan un comienzo fuerte para dar impulso a una campa?a dura y prolongada
2023 es el a?o en el que se definir¨¢ el futuro de l¨ªderes y partidos. El PSOE se juega retener la presidencia de nueve autonom¨ªas, 22 capitales de provincia y su continuidad en La Moncloa. El PP se enfrenta a sus propias expectativas: retener el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid, arrebatar alg¨²n gobierno regional a los socialistas y ganar las generales. Podemos y Vox medir¨¢n su utilidad como fuerzas clave para formar coaliciones y Ciudadanos pondr¨¢ a prueba su propia supervivencia. La gran pregunta es si habr¨¢ o no cambio pol¨ªtico en Espa?a: si la derecha (sola o con el apoyo de la extrema derecha) arrebata el poder al primer Gobierno de coalici¨®n progresista desde la restauraci¨®n de la democracia. El final de 2022, con una crisis institucional sin precedentes y el radical desacuerdo entre los principales partidos, es el preludio de lo que viene. As¨ª lo reconocen en los puentes de mando de las formaciones: un a?o pol¨ªtico todav¨ªa m¨¢s a cara de perro, previsto como una largu¨ªsima campa?a que culminar¨¢ en las elecciones generales, en principio previstas para diciembre. No habr¨¢ tregua, y no hay tiempo que perder. La primera meta volante son las elecciones auton¨®micas y municipales del 28 de mayo, unos comicios decisivos que har¨¢n de primera vuelta de las generales y cuya precampa?a empieza ya en enero. Estas son las principales claves de esa cita marcada en rojo en el calendario de un a?o electoral de v¨¦rtigo.
As¨ª llegan los partidos
El PP encara 2023 liderando las encuestas, salvo la del CIS, y con la remodelaci¨®n auton¨®mica del partido hecha sin grandes conflictos. Pero Alberto N¨²?ez Feij¨®o no ha terminado el a?o c¨®modo, envuelto en primera l¨ªnea en la crisis institucional por el bloqueo del PP a la renovaci¨®n de los ¨®rganos del Poder Judicial. En el partido se espera que el sucesor de Pablo Casado ampl¨ªe su direcci¨®n en el arranque de a?o para dar impulso a la formaci¨®n en un curso tan crucial, mientras en Ferraz y La Moncloa sienten que han cumplido el objetivo que se marcaron en verano tras el descalabro del PSOE en las elecciones andaluzas: contrarrestar el efecto Feij¨®o y llegar a final de a?o con opciones para revalidar el poder en la pr¨®xima legislatura.
El cierre de 2022 ha ido mejor de lo esperado, con la inflaci¨®n m¨¢s baja de la UE ¡ª5,8%, casi la mitad que cuando toc¨® techo en julio (10,8%)¡ª y un crecimiento de la econom¨ªa que, seg¨²n Pedro S¨¢nchez, rebasar¨¢ el 5%. Espa?a no ha entrado en recesi¨®n, pese a la incertidumbre por la guerra de Ucrania y sus secuelas econ¨®micas y sociales, a cuya contenci¨®n el Gobierno ha destinado 45.000 millones de euros. Pero los progresistas deben resolver sus cuitas si aspiran a evitar un cambio de ciclo: las auton¨®micas y municipales llegan en plena reconfiguraci¨®n del espacio a la izquierda del PSOE, con las alianzas entre Podemos e IU a¨²n en el aire en la mayor¨ªa de territorios, un clima de desconfianza entre las organizaciones y fuertes tensiones ¡ªcon amenaza de ruptura¡ª por el papel del partido de Ione Belarra en Sumar, el proyecto que ultima Yolanda D¨ªaz de cara a las generales.
L¨ªderes nacionales a la carretera
El PP tiene claro que quiere hacer de las municipales y auton¨®micas unos comicios en clave nacional. ¡°Hay que conseguir 8.131 plebiscitos sobre Pedro S¨¢nchez¡±, resume un dirigente, citando el total de municipios que hay en Espa?a. Feij¨®o se volcar¨¢ en la campa?a. G¨¦nova baraja hasta cinco grandes actos con presencia del l¨ªder a principios de a?o: dos de presentaci¨®n de los candidatos, un foro intermunicipal y otro interparlamentario, as¨ª como otro gran mitin que podr¨ªa tener tambi¨¦n contenido program¨¢tico. Se trata de mostrar m¨²sculo y movilizar al partido para la campa?a.
Los socialistas no plantear¨¢n la estrategia tan en clave nacional y los barones y alcaldes tendr¨¢n una gran autonom¨ªa, pero s¨ª har¨¢n gala de las pol¨ªticas del Ejecutivo. ¡°Hay quien se pregunta qu¨¦ har¨¢ el Gobierno progresista en un a?o electoral. La respuesta es simple: lo mismo que en los dem¨¢s a?os. [...] Gobernaremos siempre para las mayor¨ªas, para las clases medias y trabajadoras, para la gente de a pie¡±, recalc¨® S¨¢nchez el 30 de diciembre en una carta a los militantes del PSOE. Las fricciones con Emiliano Garc¨ªa-Page, el presidente de Castilla-La Mancha, o Javier Lamb¨¢n (Arag¨®n) por las reformas penales de la sedici¨®n y la malversaci¨®n, de las que se beneficiar¨¢n los dirigentes del proc¨¦s y otros cuadros independistas a la espera de juicio, se aparcar¨¢n, y S¨¢nchez se desplegar¨¢ por todo el territorio.
Mucho menos claro est¨¢ el papel de la vicepresidenta D¨ªaz, quien, envuelta en la preparaci¨®n de Sumar ¡ªque no concurre en mayo¡ª, ya ha deslizado que su presencia en campa?a se limitar¨¢ a aquellos territorios donde haya unidad (como es el caso de Barcelona). De confirmarse, su estrategia la llevar¨ªa a ausentarse de territorios tan fundamentales como Madrid, donde en 2021 apoy¨® a Pablo Iglesias. La secretaria general de Podemos, Ione Belarra, ya ha expresado p¨²blicamente su deseo de que D¨ªaz se implique con las candidaturas de la coalici¨®n, pero por ahora la titular de Trabajo no ha recogido el guante.
La batalla por el poder territorial del PSOE
Los socialistas han sufrido como una tortura la estrategia del PP de implantar la imagen de un PSOE que iba de derrota en derrota con el adelanto de elecciones en Madrid en 2021 y el a?o pasado en Castilla y Le¨®n y Andaluc¨ªa. Pero en 2023 llegar¨¢ el momento de los barones: el PSOE se jugar¨¢ todo su poder territorial el 28 de mayo. De las 12 comunidades que celebrar¨¢n comicios, el PP solo gobierna en dos: Madrid y Murcia. Del resto, Arag¨®n, Asturias, Baleares, Canarias, Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana, Extremadura, La Rioja y Navarra tienen presidentes socialistas, y en Cantabria el PSOE cogobierna con el PRC de Miguel ?ngel Revilla. ¡°Llega nuestro turno y jugamos en casa¡±, sentencia un presidente auton¨®mico socialista que conf¨ªa en que los votantes valoren su gesti¨®n de la pandemia, como ya sucedi¨® a favor del PP en las comunidades gobernadas por la derecha. El PSOE, en todo caso, no depende solo de s¨ª mismo: necesita que Podemos no se hunda. Tras a?os de declive electoral, el socio minoritario se juega revalidar su presencia en los gobiernos de coalici¨®n de seis comunidades (Navarra, La Rioja, Arag¨®n, Comunidad Valenciana, Baleares y Canarias) y sortear un nuevo retroceso que debilite su posici¨®n ante la cita de final de a?o.
Otro factor que convierte las auton¨®micas en una primera vuelta de las generales es que S¨¢nchez necesita que el PSOE aguante en mayo para consolidar sus posibilidades de reelecci¨®n. El tir¨®n del presidente benefici¨® a los barones en las elecciones de 2019, pero ahora la situaci¨®n es diferente. Por eso el PP quiere que los comicios sean en clave nacional y no auton¨®mica, para explotar el desgaste de La Moncloa.
¡°Creemos que, con mayor o menor dificultad, estamos en condiciones de ganar en cualquiera de las comunidades que celebran elecciones en 2023¡å, dijo Feij¨®o en el balance de fin de a?o. Otra cosa es gobernar. En el PP tienen esperanzas de lograr un cambio en la Comunidad Valenciana y Arag¨®n, pero siempre dependiendo de la suma con Vox. En Ferraz y La Moncloa, entre tanto, creen que Feij¨®o se impuso una presi¨®n innecesaria en el cara a cara con S¨¢nchez del 22 de noviembre en el Senado, cuando afirm¨® que la moci¨®n de censura que le demandan Vox y Ciudadanos ¡°se har¨¢ el 28 de mayo, pero no en una urna en el Congreso de los Diputados, sino en miles de urnas en todos los ayuntamientos de Espa?a¡±. Si no se traduce en un vuelco auton¨®mico, el l¨ªder del PP tendr¨ªa un problema.
Unas municipales convertidas en ¡®minigenerales¡¯
Las elecciones locales servir¨¢n de term¨®metro del clima electoral en toda Espa?a. Al celebrarse en todo el pa¨ªs, a diferencia de las auton¨®micas, los partidos interpretar¨¢n sus resultados como una especie de minigenerales que les ayudar¨¢n a testar el grado de movilizaci¨®n de sus votantes. Otra cosa muy distinta ser¨¢n las alianzas que permitan la formaci¨®n de los gobiernos municipales. El PSOE, con 2.700 alcald¨ªas, defiende el bast¨®n de mando en 22 de las 52 capitales de provincia, frente a un PP que en 2019 pas¨® de hacerlo en 21 a 13, aunque recuper¨® la joya de la corona: Madrid. Los populares, que tambi¨¦n gobiernan en Zaragoza ¡ªsu regidor, Jorge Azc¨®n, se presentar¨¢ a las auton¨®micas¡ª y M¨¢laga, est¨¢n sufriendo para encontrar candidato en Barcelona. Intent¨® un acuerdo amplio con Ciudadanos, pero el partido de Arrimadas dio un portazo. Feij¨®o baraja cuatro candidatos, alguno de fuera del PP.
Los socialistas lo tienen m¨¢s claro: ven al alcance de la mano lograr la alcald¨ªa de Barcelona aprovechando el tir¨®n del PSC con Salvador Illa y las pol¨ªticas de S¨¢nchez para enterrar el proc¨¦s. Retener Sevilla, principal ciudad en manos socialistas, es otra prioridad, adem¨¢s de sumar para mantener Valencia con Comprom¨ªs. La apuesta del PSOE para Madrid, Reyes Maroto, es un interrogante: la ministra de Industria apenas ha tenido recorrido en la capital desde que se formaliz¨® su candidatura.
Entrar de nuevo en el Ayuntamiento de Madrid es uno de los objetivos de Podemos, que presentar¨¢ como cabeza de lista al exatleta Roberto Sotomayor. Pero la relaci¨®n con M¨¢s Madrid no es buena. Podemos perdi¨® en 2019 la mayor¨ªa de los llamados ayuntamientos del cambio. Tras el ¨¦xito de 2015, en las siguientes elecciones solo Barcelona (con los comunes de Ada Colau) y C¨¢diz (con el anticapitalista Kichi, hoy fuera del partido) resistieron. La implantaci¨®n territorial ha sido siempre el tal¨®n de Aquiles de la formaci¨®n de Belarra, que encuentra grandes dificultades ahora en Galicia, donde la confluencia con lo que queda de las mareas se descarta en ciudades como A Coru?a. IU, mientras, reivindica su fortaleza con alcald¨ªas emblem¨¢ticas como la de Zamora o Rivas (Madrid) y los m¨¢s de 2.000 concejales que posee la formaci¨®n en toda Espa?a.
Feij¨®o, obligado a despejar la inc¨®gnita de Vox
Los pactos postelectorales de mayo forzar¨¢n a Feij¨®o a tomar una de las decisiones m¨¢s trascendentes como l¨ªder del PP: si aprueba o no la formaci¨®n de gobiernos conjuntos con Vox. Ya existe uno auton¨®mico, en Castilla y Le¨®n, del que Feij¨®o trat¨® de desvincularse porque su formaci¨®n se produjo cuando estaba asumiendo el mando del partido, pero los acuerdos de mayo se har¨¢n totalmente bajo el paraguas de su liderazgo. El presidente popular elude siempre la respuesta a esa pregunta, mientras presenta al PP como un proyecto ¡°transversal y sin etiquetas¡±. Sin embargo, es consciente de que arrebatar el poder al PSOE en alg¨²n territorio tendr¨¢ que pasar previsiblemente por pactar con los ultras. Los candidatos del PP tambi¨¦n, y presionar¨¢n para tener manos libres.
Pactos en el aire en la izquierda
Los comicios de mayo medir¨¢n la capacidad de resistencia de los partidos a la izquierda del PSOE y la unidad de su espacio pol¨ªtico, a¨²n sin contar con la nueva marca de Yolanda D¨ªaz. El temor, adem¨¢s, es que una hipot¨¦tica p¨¦rdida de representaci¨®n en esa cita electoral influya en las negociaciones de las generales. Tras la crisis entre Podemos e IU este a?o, la coalici¨®n entra en 2023 con la mayor¨ªa de confluencias por concretar. El ¨²ltimo acuerdo fue el de Madrid para Ayuntamiento y Comunidad (donde el riesgo de quedarse fuera en caso de ir separados era real), y antes lo hubo en Navarra y La Rioja. La lista conjunta se da por descontada en Baleares o Extremadura, pero se complica en comunidades como Arag¨®n o Asturias, donde nunca ha habido unidad. Fuentes de Podemos reclaman ¡°acuerdos justos¡± y creen que querer sentar a la mesa a otros partidos de escasa implantaci¨®n enturbia las negociaciones. Otro escenario que se ha complicado es Canarias, con la irrupci¨®n de Proyecto Drago, la nueva plataforma liderada por Alberto Rodr¨ªguez. Los de Belarra ya han descartado que su exn¨²mero tres, enfrentado ahora a la direcci¨®n estatal, pueda liderar una candidatura con un espacio, dicen, que ¡°surge pr¨¢cticamente de la nada¡±. El antiguo diputado, sin embargo, es muy popular en las islas, y formaciones como IU lo reconocen como un referente.
Ayuso se examina
La presidenta de la Comunidad de Madrid vuelve a someterse a las urnas apenas dos a?os despu¨¦s de arrasar logrando m¨¢s esca?os (65 de 136) que toda la izquierda junta, pero obligada a lograr su investidura con los votos de Vox, que le ha tumbado los ¨²ltimos Presupuestos. Isabel D¨ªaz Ayuso busca no depender ahora de la extrema derecha. Lo tiene m¨¢s dif¨ªcil que en 2021, seg¨²n reconocen en su entorno, porque Pablo Iglesias no se presenta por Unidas Podemos y porque ahora se celebrar¨¢n tambi¨¦n municipales a la vez: el PSOE cuenta con un importante poder municipal en Madrid ¡ªgobierna en 60 de las 179 localidades de la regi¨®n, incluidas ocho de las diez grandes ciudades-. Adem¨¢s, Ayuso termin¨® el a?o encajando su primer gran golpe con la multitudinaria manifestaci¨®n contra el deterioro de la sanidad p¨²blica. La huelga de atenci¨®n primaria, paralizada hasta el 11 de enero, sigue en pie. El resultado de Ayuso, que ya tras el 4-M tuvo la sensaci¨®n de haber obtenido ¡°mucho voto prestado¡±, tendr¨¢ una importante lectura interna en el PP, para una eventual sucesi¨®n de Feij¨®o si no consigue ganar las elecciones generales a S¨¢nchez.
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