El PSOE negociar¨¢ enmiendas al ¡®solo s¨ª es s¨ª¡¯ con Podemos y otros socios, pero no con el PP

La crisis en el Gobierno de coalici¨®n pasa a una nueva fase. Despu¨¦s de una semana de intensas negociaciones y conflicto abierto entre los dos socios por la reforma de la Ley de Libertad Sexual, conocida como ley del solo s¨ª es s¨ª, la decisi¨®n del PSOE, adelantada por EL PA?S, de registrar este lunes y en solitario su propuesta de modificaci¨®n en el Congreso para garantizar que las futuras condenas a los agresores sexuales tengan id¨¦ntica pena a la que exist¨ªa antes de entrar en vigor la norma el pasado octubre, ha acentuado la brecha entre ambas formaciones. Nadie ha querido hablar de ruptura, pero tampoco han escondido las serias discrepancias. El PSOE y Unidas Podemos se emplazan ahora a negociar enmiendas en el tr¨¢mite parlamentario, que quieren solventar con urgencia, en menos de un mes, pero no aclaran con qu¨¦ grupos contar¨¢n.

Los socialistas aseguran que solo negociar¨¢n sobre los ¡°ajustes t¨¦cnicos¡± a la norma con Unidas Podemos y sus socios del bloque de investidura, pero no con el PP, que, sin embargo, se convierte de hecho en un aliado m¨¢s que probable y necesario para sacar adelante este proyecto estrella y emblem¨¢tico del Ministerio de Igualdad de Irene Montero. ¡°Lamentamos que no haya habido acuerdo [con Unidas Podemos] pero ahora se abre el per¨ªodo de enmiendas. No hemos negociado con ning¨²n grupo m¨¢s salvo con los socios [de Gobierno]. Ahora hablaremos con el bloque de la investidura, con el resto de formaciones que se mostraron dispuestas a reformar la ley. Con el PP no tenemos nada que negociar¡±, ha aseverado el portavoz del PSOE en el Congreso, Patxi L¨®pez, tras registrar la proposici¨®n de ley en solitario.

La definici¨®n del consentimiento ¡ªel elemento que ha definido desde siempre los delitos sexuales¡ª no se toca en la propuesta del PSOE, pero Podemos considera que reintroducir el elemento de la existencia de violencia o intimidaci¨®n para modular las penas supone desplazar ah¨ª el foco de atenci¨®n, en lugar de atenerse a la idea de la ausencia de consentimiento que define la agresi¨®n sexual.

El movimiento del PSOE, aunque estaba sobre la mesa, ha tensionado la relaci¨®n con Podemos. Fuentes de este partido consideran ¡°inexplicable¡± la decisi¨®n y reprochan que, habiendo ¡°opciones para el acuerdo¡±, la formaci¨®n mayoritaria del Ejecutivo ¡°decida romper para presentar la misma propuesta que el PP¡± por la subida de penas. La ministra de Justicia, Pilar Llop, ha justificado que se trata de ¡°una decisi¨®n pol¨ªtica¡± que hay que ejecutar ¡°con valent¨ªa y determinaci¨®n¡± ante la alarma social que ha generado la rebaja de condenas a unos 400 delincuentes sexuales y la excarcelaci¨®n de m¨¢s de una treintena. ¡°Nosotros construimos leyes, no relatos. Los jueces aplican leyes, no relatos. Y lo que cambia la vida de la gente son las leyes, no los relatos¡±, ha abundado la ministra, en una cr¨ªtica manifiesta a Podemos. Fuentes de la parte socialista del Gobierno han comunicado que las propuestas que les remiti¨® Igualdad eran poco solventes.

El registro de la proposici¨®n de ley por parte del PSOE se ha producido tras constatar en la ¨²ltima ronda de negociaciones del fin de semana que era imposible el consenso con el Ministerio de Igualdad. El portavoz socialista en el Congreso intent¨® justificar esa actuaci¨®n en la necesidad de ¡°corregir los efectos no deseados de una muy buena ley y en respuesta a una demanda social¡±. L¨®pez admiti¨® la urgencia por la preocupaci¨®n social provocada por la rebaja de condenas y precis¨®, para rectificarlas, algunas acusaciones que se est¨¢n formulando estos d¨ªas desde Unidas Podemos e Igualdad. El PSOE reitera que no se toca el art¨ªculo 178 del C¨®digo Penal, donde ya figura ahora la relevancia del consentimiento. Tampoco se retrocede al pasado para distinguir entre abuso y agresi¨®n sexual ¨D¡±todas ser¨¢n agresiones sexuales¡±¡ª y no se ha cedido a la presi¨®n medi¨¢tica y pol¨ªtica de la derecha. L¨®pez ha incidido mucho en que el PSOE ¡°no ha negociado nada con la derecha¡± y que tampoco lo har¨¢ durante la negociaci¨®n de las enmiendas. ¡°Queremos acordar con todos los que quieren esta ley, y el PP no la quiere. Que no nos vengan con cuentos, el PP nunca ha apoyado las leyes con avances para las mujeres¡±, subray¨®.

La discusi¨®n se centrar¨¢ a partir de ahora m¨¢s en el Congreso, donde se anticipa una tramitaci¨®n compleja, porque por el momento los populares son los ¨²nicos que han mostrado su apoyo a la iniciativa y Podemos ya ha anunciado que seguir¨¢ peleando. ¡°El PSOE tendr¨¢ que decidir con qui¨¦n quiere sacar adelante esta ley¡±, ha advertido el presidente del grupo parlamentario de Unidas Podemos, Jaume Asens, durante una entrevista en TVE en la que ha descartado una ruptura del Ejecutivo y se ha mostrado convencido de que todav¨ªa ¡°hay margen para el acuerdo¡±. Sin embargo, una de las portavoces de Podemos, Mar¨ªa Teresa P¨¦rez, ha elevado el tono contra su socio y ha tachado de ¡°totalmente incomprensible¡± e ¡°intolerable¡± la decisi¨®n de los socialistas. La tambi¨¦n secretaria de acci¨®n institucional del partido ha rechazado hasta en cinco ocasiones pronunciarse sobre su permanencia en el Gobierno y ha adelantado su ofensiva en la C¨¢mara baja: ¡°Nuestro objetivo es proteger el modelo del consentimiento en la tramitaci¨®n parlamentaria y como haga falta¡±.

Ma?ana martes, la Mesa del Congreso tendr¨¢ que calificar (admitir, en el lenguaje parlamentario) la iniciativa, con la idea por parte del PSOE de que el debate para la toma en consideraci¨®n (el primer paso) se lleve al pleno del martes de la semana que viene. En ambos casos ser¨¢ curioso y revelador contar los apoyos de esos primeros tr¨¢mites. El dirigente del PSOE precis¨®, eso s¨ª, que su objetivo es que la ley supere todos esos pasos y entre en vigor, ya retocada, antes de que acabe febrero, porque se quiere resolver esta situaci¨®n complicada cuanto antes. No ser¨¢ f¨¢cil. El portavoz socialista en el Parlamento no pudo aclarar este lunes con qui¨¦n sacar¨¢ esta reforma e intent¨® restar trascendencia a un posible respaldo del PP: ¡°Hay que distinguir entre negociar o que la vote el PP¡±.

El PSOE hace equilibrios para mantener la negociaci¨®n abierta, no molestar en exceso a su socio principal, no romper la coalici¨®n en este inicio del a?o electoral y asumir que la norma ten¨ªa defectos y efectos indeseados. ¡°La mejor forma de defender esta buena ley es reconocer que no est¨¢ funcionando adecuadamente¡±, corrobor¨® junto a L¨®pez la secretaria de Igualdad de la ejecutiva socialista, Andrea Fern¨¢ndez. ¡°Esto no va de cesiones ni de egos ni de relatos¡±, zanj¨® sobre el malestar en Podemos. L¨®pez, por su parte, obvi¨® las diferencias internas de Unidas Podemos en esta negociaci¨®n ¨Dentre Podemos y el sector que lidera la vicepresidenta, Yolanda D¨ªaz¨D y que el PSOE y el Gobierno dicen que s¨ª han notado. Prefiri¨® no contestar.

¡°El PSOE tendr¨¢ que decidir con qui¨¦n quiere sacar adelante esta ley, porque los partidos de la mayor¨ªa de la investidura creo que lo tienen claro pr¨¢cticamente todos. Los partidos de la izquierda est¨¢n en esta pol¨¦mica con el Ministerio de Igualdad; por tanto, [el PSOE] deber¨¢ decidir si quiere sacar esto con el PP, mirar a su derecha o mirar a su izquierda¡±, ha retado Asens.

¡°Nos parece totalmente incomprensible y nos preocupa que con los votos del PP quieran volver al C¨®digo Penal de La Manada [en referencia a la sentencia tras la violaci¨®n grupal a una mujer de 18 a?os en los sanfermines de 2016], cuando ten¨ªan que ser las v¨ªctimas las que demostraban si se hab¨ªan resistido lo suficiente y cuando se pon¨ªa la violencia y la intimidaci¨®n en el centro de la norma¡±, ha insistido Mar¨ªa Teresa P¨¦rez en rueda de prensa. ¡°Ten¨ªan propuestas que proteg¨ªan el consentimiento y han preferido hacer una propuesta unilateralmente¡±, ha afeado la portavoz, que se ha resistido a confirmar si Podemos se plantea una salida del Ejecutivo, un escenario que, seg¨²n puntualizan fuentes de la formaci¨®n, no contemplan.

¡°Las discrepancias las tenemos que naturalizar en un Gobierno de coalici¨®n donde hay dos partidos que tienen visiones diferentes. No es la primera vez que esto sucede y seguramente no ser¨¢ tampoco la ¨²ltima. No hay que sacar las cosas de quicio. El Gobierno de coalici¨®n no est¨¢ en riesgo porque ninguno de los dos socios est¨¢ dispuesto a ponerlo en riesgo y menos en este momento de la legislatura, a las puertas de unas elecciones municipales y auton¨®micas¡±, ha se?alado Asens, m¨¢s conciliador, en referencia a los comicios del 28 de mayo. Unidas Podemos es consciente de que una salida del Ejecutivo supondr¨ªa un enorme coste electoral a menos de cuatro meses de la cita con las urnas y en un a?o tambi¨¦n de generales. El diputado de En Com¨² Podem cree que el asunto se puede ¡°solucionar f¨¢cilmente¡±. ¡°Hay margen para el acuerdo y tiene que ver con situar la violencia o intimidaci¨®n en el nivel de los agravantes [no en la descripci¨®n del tipo penal]¡±.

Esta discusi¨®n t¨¦cnica es precisamente la que ha hecho encallar las negociaciones en la ¨²ltima semana. Igualdad se abri¨® ya el lunes pasado a una subida de las penas para dar una salida al conflicto, pero considera que la propuesta de Justicia, que quiere incrementarlas distinguiendo si hay o no violencia o intimidaci¨®n, es una vuelta al modelo anterior y afecta, por tanto, a la esencia de la norma.