?Qu¨¦ implica para Puigdemont la renuncia a ser eurodiputado?

La decisi¨®n de Carles Puigdemont de presentarse a las elecciones catalanas del 12 de mayo y su anunciada renuncia a las europeas del 9 de junio tiene un efecto directo: en el momento en el que deje el acta del Parlamento de Estrasburgo, el l¨ªder de Junts perder¨¢ la inmunidad que protege a los eurodiputados y que, hasta ahora, le ha servido para frenar la orden europea de detenci¨®n lanzada por el Tribunal Supremo. Al quedarse sin ese blindaje, el alto tribunal podr¨ªa activar una nueva euroorden contra ¨¦l y se arriesgar¨ªa a ser detenido en cualquier punto de la UE.

No obstante, esta consecuencia tiene matices. El primero es la ley de amnist¨ªa, que prev¨¦ que se levanten de forma ¡°inmediata¡± las medidas cautelares y las ¨®rdenes de detenci¨®n, lo que impedir¨ªa su arresto tanto dentro como fuera de Espa?a, por lo que ya no necesitar¨¢ el blindaje de la inmunidad. La previsi¨®n del Gobierno es que est¨¦ definitivamente aprobada en la segunda quincena de mayo, por lo que el Tribunal Supremo deber¨ªa alzar en las siguientes horas o d¨ªas la orden de detenci¨®n nacional que mantiene contra el expresident y no podr¨ªa reactivar la euroorden. Fuentes jur¨ªdicas se?alan que este alzamiento de medidas, en teor¨ªa, debe ser casi autom¨¢tico, al margen de que el tribunal estudie luego si la amnist¨ªa es o no aplicable a Puigdemont en los dos meses de plazo que fija la ley. Con todo, el texto establece que son los jueces los que tienen que levantar las cautelares, por lo que la decisi¨®n estar¨¢ en manos del Supremo.

Si la Sala Penal deja sin efecto la orden de detenci¨®n, Puigdemont podr¨¢ moverse dentro y fuera de Espa?a aunque no tenga la inmunidad de los eurodiputados. La designaci¨®n del nuevo presidente de la Generalitat puede alargarse hasta la ¨²ltima semana de junio (la constituci¨®n de la C¨¢mara tiene que ser como m¨¢ximo el 10 de junio y, a partir de ah¨ª, hay 10 d¨ªas h¨¢biles para investir al jefe del Govern), por lo que el l¨ªder de Junts llegar¨ªa a tiempo de asistir sin riesgo a ser detenido a la sesi¨®n de investidura del Parlament si tiene los votos necesarios, que es el compromiso que adquiri¨® este jueves en su comparecencia en la localidad francesa de Elna.

Pero para entonces, lo previsible es que el Supremo no haya comunicado todav¨ªa si aplica la amnist¨ªa a Puigdemont, que tiene dos causas abiertas: la del proc¨¦s, donde est¨¢ procesado por malversaci¨®n agravada y desobediencia; y la de Tsunami Democr¨¤tic, en la que se le investiga por terrorismo. Desde el momento de la entrada en vigor de la ley, el tribunal tiene dos meses para decidir entre tres opciones: amnistiarle; elevar una cuesti¨®n a la justicia europea o al Tribunal Constitucional; o rechazar aplicar la medida de gracia al expresidente catal¨¢n en alguno de los dos procedimientos. Los dos primeros escenarios garantizan que Puigdemont pueda ejercer sin riesgo a ser detenido, al menos hasta que haya respuesta de la justicia comunitaria o del tribunal de garant¨ªas. Pero una hipot¨¦tica negativa del Supremo a aplicar la amnist¨ªa le dejar¨ªa expuesto y tendr¨ªa que comparecer ante la justicia o afrontar una nueva orden detenci¨®n.

Tras su renuncia a ser eurodiputado, tanto si es investido presidente de la Generalitat como si se queda en diputado auton¨®mico raso, el l¨ªder de Junts ya no estar¨¢ aforado ante el Supremo, sino ante el Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a (TSJC), una baza que con seguridad intentar¨¢ jugar su defensa para cuestionar que el alto tribunal siga siendo el competente para juzgarle. No obstante, la causa de Tsunami seguir¨¢ en manos del Supremo mientras se investigue como terrorismo y fuentes jur¨ªdicas recuerdan que los delitos cometidos fuera de Espa?a por aforados tambi¨¦n corresponden al alto tribunal, un requisito que la Sala Penal cree que cumple la malversaci¨®n del proc¨¦s (desv¨ªo de fondos para la financiaci¨®n del refer¨¦ndum del 1-O).

La mayor amenaza para Puigdemont al renunciar a ser eurodiputado se presentar¨ªa en el caso de que no obtenga votos suficientes para ser investido, decida quedarse en B¨¦lgica a la espera de la amnist¨ªa y el Supremo opte por no aplic¨¢rsela y dicte una nueva euroorden. No obstante, el riesgo de esa decisi¨®n es, hasta cierto punto, limitado. El expresidente catal¨¢n ya estaba a punto de perder de forma definitiva la inmunidad para la causa del proc¨¦s (se la levant¨® la Euroc¨¢mara, lo confirm¨® el Tribunal General de la UE y est¨¢ pendiente de un ¨²ltimo recurso) y, en el caso de Tsunami, la colaboraci¨®n de la justicia belga con la espa?ola se prev¨¦ dif¨ªcil si se le reclama por terrorismo.