El presidente del Poder Judicial tilda la ley de amnist¨ªa de ¡°moneda de cambio¡± entre el PSOE y Junts

El presidente suplente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Vicente Guilarte, se ha pronunciado de forma muy dura contra la ley de amnist¨ªa impulsada por el Gobierno de Pedro S¨¢nchez. En el escrito elaborado para argumentar su voto en blanco al texto aprobado la pasada semana por el ¨®rgano de gobierno de los jueces, que consideraba inconstitucional dicha norma, Guilarte explica su posicionamiento como una muestra de ¡°prudencia¡± ante el intenso ¡°componente pol¨ªtico¡± que rodea dicho debate. Pero, a su vez, insiste en que esta iniciativa legislativa responde a una ¡°transacci¨®n¡± entre el PSOE y los partidos independentistas, que permite a ambas partes obtener ¡°prestaciones mutuas¡± y que, por tanto, constituye una aut¨¦ntica ¡°moneda de cambio¡± entre fuerzas pol¨ªticas que ¡°desvirt¨²a¡± la justificaci¨®n que se daba en la exposici¨®n de motivos de la ley, donde se subrayaba que se hac¨ªa por el ¡°inter¨¦s general¡±.

El pasado jueves, el sector conservador (y mayoritario) del CGPJ dio luz verde al dictamen confeccionado por el vocal Wenceslao Olea que considera inconstitucional la ley de amnist¨ªa. El texto, que no es vinculante, obtuvo el apoyo de 9 de los 10 vocales propuestos por el PP. Guilarte, tambi¨¦n respaldado en su d¨ªa por la formaci¨®n conservadora, y el progresista Enrique Lucas votaron en blanco. Por su parte, los cinco vocales propuestos por el PSOE respaldaron un texto alternativo escrito por la vocal progresista Mar Cabrejas, que consideraba que la amnist¨ªa s¨ª tiene encaje en la Constituci¨®n, aunque le pon¨ªa algunas objeciones.

En su escrito, Vicente Guilarte considera la amnist¨ªa una ¡°medida de gracia¡± que puede otorgarse ¡°unilateralmente¡± por el Poder Legislativo, pero que no puede concederse ¡°a cambio de contraprestaci¨®n onerosa alguna¡±: ¡°Pues eso desvirt¨²a radicalmente su causa; pasando, en terminolog¨ªa civil, de la gratuidad a una onerosidad que desdibuja su esencial naturaleza como medida de gracia. Puede donarse gratuitamente un ri?¨®n, pero no a cambio de precio. De igual manera que no cabr¨ªa indultar, menos a¨²n, amnistiar a cambio de una contraprestaci¨®n onerosa¡±.

El presidente suplente del CGPJ sit¨²a el pecado original en el pacto cerrado entre los socialistas y Junts, que supuso la concesi¨®n de la amnist¨ªa a cambio de obtener los votos necesarios para la investidura de S¨¢nchez: ¡°La amnist¨ªa no puede ser sinalagm¨¢tica moneda de cambio de la consecuci¨®n de una mayor¨ªa parlamentaria para la investidura; pues implica convertir la medida de gracia, por definici¨®n unilateral y gratuita, en algo bilateral y oneroso. Habr¨¢ que preguntarse, y no soy capaz de dar respuesta adecuada, si desde una perspectiva constitucional la extinci¨®n de la acci¨®n penal puede ser prestaci¨®n correlativa a la obtenci¨®n de una importante contrapartida pol¨ªtica¡±.

¡°Creo poder concluir que no existen precedentes, ni en Espa?a ni en el resto de naciones que han acordado medidas de gracia similares, donde la amnist¨ªa se haya insertado en una transacci¨®n sinalagm¨¢tica con prestaciones mutuas¡±, prosigue Guilarte, que remacha: ¡°El previo pacto pol¨ªtico alcanzado entre sus mentores, del que la amnist¨ªa trae causa real, si se analiza con una perspectiva civil dif¨ªcilmente superar¨ªa los criterios de validez y licitud exigidos por el art¨ªculo 1.276 del C¨®digo Civil¡±. Este precepto contempla que la ¡°expresi¨®n de una causa falsa en los contratos dar¨¢ lugar a la nulidad, si no se probase que estaban fundados en otra verdadera y l¨ªcita¡±.

El presidente del Consejo considera ¡°sorprendente¡± que la ¡°fara¨®nica¡± exposici¨®n de motivos de la ley de amnist¨ªa guarde ¡°silencio¡± sobre ese pacto pol¨ªtico; y alegue, como justificaci¨®n para impulsar la norma, el ¡°inter¨¦s general¡± que se busca con ¡°la pacificaci¨®n pol¨ªtica y convivencia¡± de Catalu?a. ¡°Finalidad que, sin embargo, nunca fue esbozada previamente en el programa electoral de su otorgante¡±, reprocha Guilarte al PSOE. ¡°La raz¨®n de ser de la ley expresada en la exposici¨®n de motivos no es la que verdaderamente subyace en la prestaci¨®n comprometida y que se concreta en propiciar la amnist¨ªa a cambio del apoyo parlamentario a la investidura del Presidente del Gobierno.

El CGPJ, cuyo mandato caduc¨® hace m¨¢s de cinco a?os, tiene entre sus funciones informar sobre los proyectos de ley, pero la amnist¨ªa a los encausados del proc¨¦s no ha sido sometida a esa consulta porque se tramit¨® como proposici¨®n de ley (presentada por el PSOE) y no como proyecto de ley (presentado por el Gobierno). No obstante, el PP se sirvi¨® de su mayor¨ªa absoluta en el Senado para reclamar un informe al CGPJ y otro a la Fiscal¨ªa. El fiscal general del Estado, ?lvaro Garc¨ªa Ortiz, rechaz¨® hacer el suyo, pero el ¨®rgano de gobierno de los jueces ¡ªque ya se pronunci¨® en contra de la amnist¨ªa antes incluso de que se conociera la primera versi¨®n de la ley¡ª s¨ª acord¨® redactar uno.