El Senado aprueba el conflicto de competencias con el Congreso por la amnist¨ªa
Los socialistas acusan al PP de ¡°deslealtad institucional¡± y comparan su actitud con el golpe del 23-F
El pleno del Senado ha aprobado este mi¨¦rcoles un mecanismo nunca utilizado en 45 a?os de democracia: el conflicto de atribuciones entre la C¨¢mara alta y el Congreso. Y lo ha hecho gracias a la mayor¨ªa absoluta del PP que, en su estrategia de rechazo frontal a la ley de amnist¨ªa, ha puesto en marcha un procedimiento in¨¦dito, regulado en la Ley Org¨¢nica del Tribunal Constitucional. Pero la incertidumbre sobre los distintos pasos a seguir y un calendario a la contra ¡ªla medida de gracia a los encausados del proc¨¦s sigue su curso sin interrupci¨®n¡ª han provocado entre los populares dudas sobre si llevar o no el choque institucional hasta el final, es decir, hasta el punto de denunciar al Congreso ante el Tribunal Constitucional.
El conflicto de competencias ha salido adelante con 148 votos a favor (144 del PP, 3 de Vox y uno de Coalici¨®n Canaria), la abstenci¨®n de UPN y el voto en contra del resto del hemiciclo (112 senadores), tras un debate relativamente sosegado. El PP ha tachado la amnist¨ªa de ¡°aberraci¨®n democr¨¢tica¡± y ha cargado contra el Gobierno por entregarse ¡°a la arbitrariedad¡±. Enfrente, el PSOE ha acusado a los populares de ¡°deslealtad institucional¡± y de ¡°uso partidista¡± del Senado, y ha acabado comparando su actitud con el golpe militar del 23-F.
A juicio del partido de Alberto N¨²?ez Feij¨®o, la ley de amnist¨ªa es una ¡°reforma constitucional encubierta¡± ¡ªcomo tambi¨¦n sostiene el informe elaborado por los letrados del Senado¡ª. Por ello, consideran que su aprobaci¨®n requiere de un consenso mayor que la mayor¨ªa absoluta (la mitad de los esca?os m¨¢s uno) recabada por el PSOE y sus socios en el Congreso. De ah¨ª deducen la existencia de un conflicto de competencias entre ambas C¨¢maras. Y as¨ª lo ha defendido el senador popular Antonio Silv¨¢n: ¡°En una democracia, nadie lo puede todo. Algo tan medular [como una amnist¨ªa] no puede regularse por un simple proyecto legislativo. El poder no tiene derechos, el poder tiene competencias. Est¨¢n tan entregados a la arbitrariedad que empiezan a dar miedo¡±.
El conflicto de atribuciones se produce cuando un ¨®rgano del Estado ¡ªen este caso, el Senado¡ª considera que otro ¨®rgano del Estado ¡ªaqu¨ª, el Congreso¡ª ha adoptado decisiones asumiendo atribuciones que no le corresponden. Para ponerlo en pr¨¢ctica, el ¨®rgano que se considera invadido en sus competencias se lo hace saber al ¨®rgano supuestamente invasor y le solicita que revoque su decisi¨®n. Si este no responde en el plazo de un mes, o responde negando la acusaci¨®n, el ¨®rgano que ha planteado el conflicto puede elevar la cuesti¨®n al Tribunal Constitucional para que este resuelva el choque. Lo que el Senado ha aprobado este mi¨¦rcoles es declarar formalmente abierto ese conflicto de competencias para que el Congreso, antes del 11 de mayo, conteste o no. El PP tendr¨¢ que decidir entonces si da el ¨²ltimo paso y denuncia a la C¨¢mara baja ante el tribunal de garant¨ªas, un movimiento que podr¨ªa complicar un posterior recurso de inconstitucionalidad ya con la ley de amnist¨ªa en vigor.
Los socialistas y sus aliados han negado este mi¨¦rcoles que el Congreso haya incurrido en ¡°usurpaci¨®n¡± de funciones. La proposici¨®n de ley de amnist¨ªa, han subrayado, sigue su tramitaci¨®n parlamentaria como cualquier otra norma. El senador socialista Francisco Manuel Fajardo ha sostenido que la ¡°competencia legislativa¡± se est¨¢ ejerciendo con todos los pasos exigidos y que no existe tal choque institucional. ¡°Es un aut¨¦ntico disparate, es casi un ¡®?quieto todo el mundo!¡±, ha lanzado Fajardo, haciendo un paralelismo entre el planteamiento del conflicto de atribuciones defendido por el PP y el intento de golpe de Estado militar del 23-F. Esa afirmaci¨®n, que ha provocado revuelo en la bancada del PP, ha dado lugar a uno de los pocos momentos tensos de la sesi¨®n. El tambi¨¦n senador socialista Toni Magdaleno ha insistido en que nunca antes se hab¨ªa ¡°producido esta falta de respeto¡± y ¡°deslealtad institucional¡± por parte de un partido pol¨ªtico.
Los socios del Gobierno han abundado en el discurso de ¡°instrumentalizaci¨®n¡± del Senado por parte de los populares. ¡°Las instituciones no est¨¢n para prostituirlas¡±, ha espetado al PP el senador de Comprom¨ªs Enric Morera. ¡°Dejen espacio para debatir las cosas que s¨ª interesan a la gente. ?S¨¢trapas, totalitarios!¡±, ha continuado la parlamentaria de Sumar Carla Antonelli. ¡°[El conflicto] no tiene ning¨²n recorrido efectivo. Tiene un nombre: se llama fraude de ley¡±, ha agregado la parlamentaria del PNV Estefan¨ªa Beltr¨¢n de Heredia. ¡°Dejen en paz el tr¨¢mite parlamentario¡±, ha insistido la senadora de Junts Teresa Pallar¨¨s. Sara Bailac, de ERC, ha tachado la iniciativa de ¡°ocurrencia¡±.
Pese al ruido generado con el anuncio, hace un mes, de esta herramienta nunca antes utilizada en democracia, la iniciativa podr¨ªa quedar diluida si el PP desiste de acudir al Tribunal Constitucional despu¨¦s del 11 de mayo. El movimiento sirvi¨® en un primer momento de parapeto frente a Vox ¡ªque ped¨ªa directamente bloquear la tramitaci¨®n de la amnist¨ªa en el Senado¡ª, pero, si ahora no se llega hasta el Constitucional, eso dejar¨ªa al PP en una situaci¨®n complicada, como algunos senadores populares reconocen en privado. ¡°Es como si pones una denuncia y no vas hasta el final¡±, se?alan. El portavoz del PSOE en la C¨¢mara alta, Juan Espadas, ha afirmado en los pasillos que espera una respuesta ¡°r¨¢pida¡± por parte del Congreso. De producirse as¨ª, podr¨ªa poner en un brete a los populares, que tendr¨ªan que tomar una decisi¨®n antes de lo imaginado.
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