Las quejas por el sistema de asilo desbordan el buz¨®n del Defensor del Pueblo: ¡°Las situaciones se perpet¨²an¡±
La instituci¨®n tramita 2.500 reclamaciones de afectados, que pueden tardar hasta dos a?os en obtener cita
Hace justo un a?o que la Polic¨ªa Nacional asestaba un golpe a un entramado que lograba bloquear las citas de extranjer¨ªa con un robot inform¨¢tico y ganaba decenas de miles de euros vendi¨¦ndolas en el mercado negro. Las citas m¨¢s codiciadas eran las del asilo, que pod¨ªan venderse por hasta 200 euros. La operaci¨®n, en teor¨ªa, deber¨ªa haber acabado con el pirateo, la falta de citas previas y facilitar¨ªa la relaci¨®n del extranjero con la Administraci¨®n, pero no ha sido as¨ª. La cuesti¨®n preocupa al Defensor del Pueblo que tramita ahora 2.500 quejas de personas con dificultades para pedir asilo, un n¨²mero alt¨ªsimo que sit¨²a este problema entre las principales cuestiones que los ciudadanos transmiten a la instituci¨®n. El organismo diagnostica que no se est¨¢n empleando los recursos suficientes.
Tras la detenci¨®n del supuesto cabecilla de la red, un avispado ingeniero que dise?¨® un software capaz de secuestrar los turnos, la polic¨ªa dinamit¨® el tradicional sistema de petici¨®n de citas y cada comisar¨ªa decidi¨® una v¨ªa distinta para canalizar las peticiones (tel¨¦fono, correo electr¨®nico, presencial). As¨ª, en teor¨ªa se garantizaba que las citas fuesen para los verdaderos interesados, y se bloqueaba el negocio de nuevos piratas que nunca dejan de actuar. ¡°Pese a las medidas adoptadas, el Defensor del Pueblo contin¨²a recibiendo un n¨²mero elevado de quejas por falta de citas de asilo¡±, mantiene la instituci¨®n en una resoluci¨®n reciente.
La resoluci¨®n de ?ngel Gabilondo hace una radiograf¨ªa que revela qui¨¦nes se golpean con m¨¢s fuerza contra este muro. Cualquiera de los casos expone c¨®mo en Espa?a se incumple sistem¨¢ticamente la directiva europea que establece un plazo de tres d¨ªas h¨¢biles para registrar la solicitud (y seis meses para resolverla). Otro recordatorio de que el sistema de asilo espa?ol, que reclama reformas estructurales desde hace a?os, tanto para atajar los abusos como para garantizar derechos, sigue en precario a pesar de las cifras. Seg¨²n los datos publicados por el Ministerio del Interior, a 31 diciembre de 2023 se hab¨ªan registrado m¨¢s de 163.218 solicitudes, un 37% m¨¢s que en 2022. La mayor¨ªa vienen de Venezuela, Colombia y Per¨².
Entre las 2.500 reclamaciones enviadas al Defensor del Pueblo hay personas ¡°que llevan meses¡± intentando obtener una primera cita de asilo (el sistema exige tres: la manifestaci¨®n de voluntad para pedir protecci¨®n, la formalizaci¨®n y la entrevista) y que, por tanto, no pueden ni acceder al sistema de acogida, que tampoco logra responder a la demanda.
Tambi¨¦n hay muchas familias que no son atendidas de forma conjunta cuando acuden a las dependencias policiales. ¡°Solo se atiende a un adulto y a los menores, en su caso, indicando [la polic¨ªa] que el resto deben solicitar una nueva cita individual¡±. Esta pr¨¢ctica, recuerda el defensor, supone un obst¨¢culo al mantenimiento de la unidad familiar e impide el acceso de toda la familia al sistema de acogida dando lugar a situaciones absurdas. Si, por ejemplo, solo se atiende a una madre y sus hijos, estos podr¨ªan acceder a un recurso de acogida y documentarse, mientras el marido seguir¨ªa indocumentado y alejado de su familia.
Hay adem¨¢s retrasos estratosf¨¦ricos y Gabilondo da un ejemplo: una mujer venezolana con cita en Lugo dentro de casi dos a?os, el 5 de diciembre de 2025. ¡°Suponiendo que se admita a tr¨¢mite su solicitud, no estar¨¢ autorizada a trabajar hasta junio de 2026, lo que retrasa de forma injustificada su proceso de integraci¨®n e incrementa su dependencia de las ayudas sociales¡±, mantiene. Estos retrasos dejan a personas muy vulnerables en situaci¨®n de calle. En una resoluci¨®n de junio de 2023, Gabilondo recog¨ªa el caso de una mujer argelina de 23 a?os que hab¨ªa huido de un matrimonio forzoso y de malos tratos en su pa¨ªs. Tard¨® 14 meses en formalizar su solicitud de asilo ante la polic¨ªa: ¡°Ha estado viviendo de la caridad, en condiciones muy precarias e, incluso, en situaci¨®n de calle, a pesar de los riesgos que ello implica para una joven sola¡±.
A estas, se suman otras tantas situaciones en las que no se logran citas para renovar la documentaci¨®n lo que, entre otras cosas, obliga a los solicitantes a perder sus trabajos. ¡°Lamentablemente¡±, dice Gabilondo, ¡°las situaciones aqu¨ª descritas no son nuevas, sino que se perpet¨²an desde hace a?os¡±.
Un sistema dependiente de la Polic¨ªa
El Defensor del Pueblo alaba ¡°los esfuerzos¡± de la Secretar¨ªa de Estado de Seguridad y la Polic¨ªa Nacional para ¡°mejorar el acceso al sistema de citas¡±, pero se?ala que las medidas adoptadas ¡°son insuficientes¡±. Pide adem¨¢s cambios puntuales para resolver algunas de las deficiencias planteadas en las quejas. Pero el problema va m¨¢s all¨¢ y pasa por la decisi¨®n del Ministerio del Interior de delegar en la Polic¨ªa Nacional funciones que, en realidad, no le corresponden (asignaci¨®n de citas previas, realizaci¨®n de entrevistas de asilo y expedici¨®n de documentaci¨®n) y sin que se hayan reforzado las plantillas seg¨²n se ha disparado la demanda.
Nadie parece contento con esta decisi¨®n que empez¨® a aplicarse en 2013 en algunas provincias y se generaliz¨® en 2015. Con el volumen de peticiones actual, el asilo sobrecarga a los agentes porque es un tr¨¢mite que requiere recursos, no solo de funcionarios sino tambi¨¦n formativos, al mismo tiempo que perjudica a los interesados. Hay que recordar que la Polic¨ªa Nacional gestiona much¨ªsimos m¨¢s tr¨¢mites, m¨¢s all¨¢ de las citas de asilo, como la toma de huellas, las tarjetas de identidad de extranjeros, los certificados NIE, cartas de invitaci¨®n, pr¨®rrogas de estancia¡.
El cabreo de los mandos policiales con este asunto se pudo constatar hace unos meses con la crisis de solicitantes que se vio en Barajas: los polic¨ªas all¨ª destinados (y los que se envi¨® de refuerzo) eran los ¨²nicos responsables de lidiar con cientos de peticiones de golpe sin que se enviase, por ejemplo, un refuerzo de funcionarios de la Oficina de Asilo y Refugio.
¡°Lo que se plante¨® como algo puntual se est¨¢ perpetuando en el tiempo, provocando disfunciones en el sistema que son objeto de quejas constantes¡±, recordaba en su informe anual de 2020. ¡°La colaboraci¨®n de la Polic¨ªa Nacional ha resultado imprescindible para abordar el fuerte incremento de solicitudes, pero debe ser revisada¡±, mantiene el defensor en su ¨²ltima resoluci¨®n por quinta vez en los ¨²ltimos cinco a?os.
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