Sumar se desmarca del bono de alquiler anunciado por S¨¢nchez tras la protesta por la vivienda

El PSOE se ha levantado este lunes, jornada de resaca de la masiva manifestaci¨®n por la vivienda del domingo, con una idea entre ceja y ceja: evitar que ese malestar se le vuelva en contra. Diversas voces socialistas, desde Pedro S¨¢nchez para abajo, han expresado sinton¨ªa con quienes protestaron ¡ªpese a que hubo cr¨ªticas al Ejecutivo y hasta peticiones de dimisi¨®n de la ministra de Vivienda, Isabel Rodr¨ªguez¡ª, han reivindicado las medidas tomadas, anunciaron otras nuevas y atacaron al PP. Todo con el objetivo de ¡°evitar una asignaci¨®n directa de culpa al Gobierno¡±, se?ala una fuente de Ferraz. Pero el PSOE se ha topado un problema: Sumar, su socio en el Ejecutivo, est¨¢ siguiendo un guion distinto, en parte opuesto, que se puede resumir as¨ª: el PSOE no ha entendido el grito de la calle y as¨ª lo demuestra su propia reacci¨®n a la protesta.

El grupo que ostenta la vicepresidencia segunda en la persona de Yolanda D¨ªaz ha llegado al extremo de presentar desde sus ministerios ¡°una serie de observaciones en el seno del Gobierno alertando de que el bono de alquiler para j¨®venes¡±, para el que el presidente Pedro S¨¢nchez hab¨ªa anunciado 200 millones por la ma?ana, ¡°puede agravar el problema de vivienda¡±. ¡°Tras m¨¢s de dos a?os, la medida ha demostrado ser insuficiente. Muchas comunidades aut¨®nomas a¨²n no han gestionado la totalidad de las ayudas y cientos de j¨®venes siguen esperando los 250 euros mensuales prometidos. El bono, en lugar de solucionar el problema estructural del acceso a la vivienda, abre la posibilidad de que fondos p¨²blicos pasen a manos de los rentistas, que contin¨²an subiendo los precios¡±, se?ala Sumar a trav¨¦s de declaraciones remitidas por escrito.

El acuerdo de gobierno PSOE-Sumar recoge una mayor financiaci¨®n para el ¡°bono alquiler joven¡±. ¡°Consolidaremos el Bono Alquiler Joven como elemento esencial para facilitar el acceso al alquiler asequible, y que se convierta en una medida a largo plazo, ampliando la financiaci¨®n, para llegar a toda la poblaci¨®n joven¡±, dice el pacto. ¡°El bono no tiene sentido sin limitaci¨®n de precios. Se ha demostrado¡±, explica un portavoz de Sumar para justificar su oposici¨®n.

El desencuentro fue escalando a lo largo del d¨ªa. Pedro S¨¢nchez evidenci¨® desde por la ma?ana la voluntad socialista de sintonizar con la esencia de la protesta. ¡°No quiero una Espa?a donde haya propietarios ricos e inquilinos pobres¡±, afirm¨® el presidente en el foro World in Progress en Barcelona. Adem¨¢s de pedir al PP que no ponga ¡°palos en las ruedas¡±, anunci¨® el reparto de 200 millones a las comunidades para financiar el bono de alquiler joven y ¡°un nuevo reglamento¡± contra el ¡°fraude¡± en el alquiler tur¨ªstico y de temporada, medidas que ir¨¢n previsiblemente este martes al Consejo de Ministros.

Antes de que hablara S¨¢nchez, la ministra Rodr¨ªguez, en una entrevista en TVE, ya hab¨ªa dejado claro el esquema: defender sus medidas, anunciar las nuevas y presionar al PP, al que reproch¨® tanto su legado hist¨®rico ¡ªla ley del suelo de 1998 y la venta de viviendas a ¡°fondos buitre¡± en Madrid¡ª como su posici¨®n actual ¡ªla negativa a aplicar el control de precios¡ª. Aunque se refiri¨® al trabajo del Ejecutivo como un motivo de ¡°esperanza¡±, la ministra evit¨® cualquier complacencia. No se revolvi¨® contra quienes piden su dimisi¨®n, mostr¨® ¡°comprensi¨®n¡± ante las protestas y reconoci¨® los problemas ¡°sin pa?os calientes¡±.

Nada de eso convenci¨® a Sumar. Aunque atribuy¨® responsabilidad al PP, el grupo izquierdista puso al PSOE en el disparadero. Su portavoz, Ernest Urtasun, convirti¨® la vivienda en el tema de su rueda de prensa ¡ªsolo desvi¨¢ndose para responder sobre el caso Koldo¡ª y desde la primera frase mostr¨® que van por libre. ¡°La gente est¨¢ cansada de parches. Las primeras reacciones de la ministra son claramente insuficientes¡±, afirm¨® Urtasun, para quien el Gobierno no va ¡°a la ra¨ªz del problema¡±. El tambi¨¦n ministro de Cultura reiter¨® tres propuestas de Sumar: retirar las ayudas de vivienda a las comunidades del PP que no apliquen el control de precios, hacer m¨¢s restrictivo el alquiler de temporada mediante una reforma de la Ley de Arrendamientos Urbanos y prohibir la compra de viviendas en zonas tensionadas si no es para residir en ellas.

Urtasun, que evit¨® hablar de ¡°l¨ªneas rojas¡±, no dirigi¨® sus cr¨ªticas contra S¨¢nchez, sino contra Rodr¨ªguez, aunque el presidente y su ministra defienden las mismas medidas. Tambi¨¦n contra la titular de Vivienda carg¨® Manuela Bergerot, portavoz de M¨¢s Madrid, para quien la manifestaci¨®n fue un ¡°ultim¨¢tum¡± a Rodr¨ªguez. M¨¢s tarde, Sumar, a trav¨¦s de su cuenta de X, apunt¨® a la c¨²spide del Gobierno al compartir un v¨ªdeo con los anuncios del presidente junto a un mensaje cr¨ªtico. El bono de alquiler, sostiene Sumar, es ¡°una subvenci¨®n al rentismo¡±.

Tambi¨¦n se dirigi¨® a S¨¢nchez el portavoz de Catalunya en Com¨², Joan Mena, que advirti¨® al presidente de que su ¡°futuro¡± depende de ¡°su capacidad para resolver el principal reto de nuestra ¨¦poca¡±. Otros socios habituales del Gobierno, como Podemos y EH Bildu, tambi¨¦n cargaron contras las medidas anunciadas por el Gobierno, especialmente contra el bono joven.

Marcando terrenos

La manifestaci¨®n agudiza una din¨¢mica ya observada antes: el PSOE y Sumar carecen de un relato compartido sobre vivienda. Un diputado de Sumar afirma que la vivienda va a ser su ¡°leit motiv¡± dentro del Gobierno: ¡°Una raz¨®n fundamental es la actitud del PSOE, que sigue en el s¨ª pero no, sin tomar medidas para rebajar el rendimiento de la inversi¨®n inmobiliaria, que es la clave. Si a eso le sumas que este es un tema muy nuestro, que nuestra gente est¨¢ muy imbricada en ese movimiento y que necesitamos temas en los que confrontar con el PSOE para que no se nos lleve la corriente, estamos obligados a subir decibelios¡±.

Una fuente de Ferraz cree que Sumar est¨¢ dando ¡°vuelo¡± a ¡°una narrativa¡± que ¡°conviene a la derecha¡±, seg¨²n la cual ¡°el Gobierno es el gran responsable¡±. Y a?ade: ¡°Aunque no es f¨¢cil ver los resultados a corto plazo, tenemos margen para defender un modelo distinto al del PP, que tambi¨¦n tiene que dar la cara por sus comunidades y ayuntamientos. Pero todo se puede estropear si ocurre lo que, competencias y medidas en mano, no deber¨ªa ocurrir: una asignaci¨®n directa de culpa al Gobierno. Eso no solo afectar¨ªa al PSOE, tambi¨¦n podr¨ªa afectar a Sumar¡±.

Esta fuente se?ala que los socialistas intentan evitar que el Gobierno quede se?alado ¡°recalcando las distancias entre lo que hacemos nosotros y lo que hace el PP, porque no queremos que cundan ideas tipo 15-M, como que el PSOE es el PP con color rojo y el PP es el PSOE con color azul¡±. En ese intento de mostrar firmeza entra una ret¨®rica m¨¢s dura. A la cr¨ªtica por parte de Isabel Rodr¨ªguez del funcionamiento del ¡°libre mercado¡± en la vivienda se sum¨® Esther Pe?a, portavoz del PSOE, que advirti¨® durante su rueda de prensa: ¡°Si hay que intervenir, intervendremos¡±.

¡°Intervenir¡± no es un t¨¦rmino cualquiera. El PSOE suele preferir la palabra ¡°regular¡± a ¡°intervenir¡±, m¨¢s propia de Sumar y que conecta con el ¡°intervencionismo¡± con el que el PP suele estigmatizar a la izquierda. Sumar, a trav¨¦s de un portavoz, evita valorar el giro verbal de los socialistas: ¡°Lo que esperamos son medidas concretas¡±. El PSOE, tambi¨¦n a trav¨¦s de un portavoz, se reafirma en que el mercado ¡°no funciona¡± para la vivienda: ¡°No es libre mercado. Lo controlan cuatro¡±.

?lvaro Ardura, profesor de Urbanismo de la Escuela de Arquitectura de Madrid y experto en pol¨ªticas de vivienda, advierte de que la agitaci¨®n de la calle es m¨¢s dif¨ªcil de gestionar para el PSOE y Sumar que para la derecha. ¡°Al PP y a Vox estas movilizaciones les resbalan, no se van a mover de sus propuestas y van a acusar al Gobierno. Pero Sumar tiene la dificultad de atender desde el Gobierno y sin competencias reclamaciones del Sindicato de Inquilinas ¡ªalgunas muy dif¨ªciles de hacer transversales, como la huelga de alquileres¡ª y el PSOE sigue intentando el equilibrio entre defender la actividad econ¨®mica inmobiliaria y el derecho a una vivienda digna¡±, concluye el coautor de First we take Manhattan. La destrucci¨®n creativa de las ciudades.