El ¨²ltimo recurso para los andaluces en extrema necesidad en el extranjero

Hay viajes inolvidables que salen como se han imaginado o mejor, y hay otros que, da igual lo que imagines, tienen todas las papeletas para salir mal y aun as¨ª, se emprenden. Es lo que hizo en junio de 2019 Mari Carmen Franco Collantes, gaditana del Puerto de Santa Mar¨ªa, de 38 a?os. Una semana de vacaciones a Colombia ¨Deso pensaba su familia¨D que dura ya tres a?os en la prisi¨®n de mujeres del Buen Pastor, en Bogot¨¢. La verdadera raz¨®n del viaje era pasar droga a Espa?a. Atrapada en el aeropuerto, Franco tiene una condena de 10 a?os de c¨¢rcel en una prisi¨®n colombiana, donde las condiciones de vida son bastante malas. En julio, cuenta su hermana Manuela, Mari Carmen volver¨¢ a Espa?a a cumplir su condena, lo que ha sido posible gracias a la ayuda legal y t¨¦cnica de la Fundaci¨®n +34 y la ayuda econ¨®mica que la Junta de Andaluc¨ªa tiene para andaluces en el extranjero en serias dificultades de supervivencia.

Andaluc¨ªa aprob¨® hace m¨¢s de 15 a?os el llamado Estatuto de los Andaluces en el Mundo ¡ªt¨¦cnicamente Ley 8/2006 de 24 de octubre¨D y, tanto tiempo despu¨¦s, poco se sabe de ella. La norma insta a la Administraci¨®n p¨²blica, entre otras cosas, a actuar en favor de ¡°la ayuda, asistencia y protecci¨®n de los andaluces en el exterior¡±. Durante a?os, esa asistencia se enfoc¨® a ayudar a las casas andaluzas en el extranjero.

En 2020, a instancias de Fundaci¨®n +34, organizaci¨®n dedicada a ayudar a espa?oles en el extranjero, la Junta a?adi¨® una convocatoria de ayudas para ¡°atender necesidades asistenciales y situaciones de extrema necesidad de personas andaluzas residentes en el extranjero¡±. Eso s¨ª, lo que comenz¨® como un programa de hasta 100.000 euros mengu¨® hasta los 40.000 euros en 2021 para, finalmente, quedar en su convocatoria del mes de abril de este a?o en 35.000 euros. La ayuda a esos andaluces se canaliza a trav¨¦s de ONG que presentan sus proyectos al programa de subvenciones de la Junta andaluza. La Fundaci¨®n +34 es la ¨²nica dedicada a espa?oles en apuros en el extranjero, por lo que, desde la primera convocatoria, es la ¨²nica que opta y consigue gestionar esa ayuda, asegura Javier Casado, su presidente.

Salvar de un apuro

Los andaluces con serias dificultades de supervivencia en el extranjero son, por lo general, presos en c¨¢rceles de pa¨ªses sudamericanos o africanos y, excepcionalmente, otros perfiles de personas que se quedan solos, sin dinero y sin red de apoyo. La subvenci¨®n de la Junta se otorga a proyectos cerrados y la Fundaci¨®n +34 ha enfocado su trabajo all¨ª donde ha considerado que era m¨¢s necesario, a andaluces prisioneros en Marruecos, Colombia, Per¨² y Ecuador. Eso significa que no pueden dedicar un euro a situaciones diferentes a las incluidas en el proyecto, algo que disgusta a su presidente. Porque existen otras situaciones, aunque sean excepcionales.

Casado cuenta dos casos. El de Jos¨¦, un sevillano que tras casarse en Espa?a con una peruana se traslad¨® al pa¨ªs de ella poco antes de la pandemia. Cuando este lleg¨® todo le fue mal: enferm¨® de covid, se separ¨® y se qued¨® solo, sin dinero y sin nada. Tambi¨¦n relata el de una mujer que se cas¨® all¨ª y, al separarse, no ten¨ªa ninguna red de apoyo a la que recurrir. ¡°A ambos tuvimos que ayudarles y traerlos de vuelta a Espa?a¡±, dice, pero no al amparo del dinero de la Junta de Andaluc¨ªa.

La Fundaci¨®n +34 tiene contabilizada su ayuda. ¡°Hemos ayudado a 72 andaluces con problemas legales y m¨¦dicos y a cinco los hemos tra¨ªdo de vuelta. Sin contar otros que han vuelto gracias a la asistencia legal con la que han conseguido terminar de cumplir su condena en Espa?a¡±, aclara Casado.

Uno de esos cinco que retornaron gracias al programa de la Junta andaluza es el granadino Jos¨¦ Gallardo. En 2013 le cay¨® una condena de ocho a?os de prisi¨®n en Ecuador. Gallardo ha cumplido la condena completa. ¡°Soy el ¨²nico espa?ol que lo ha hecho en Ecuador¡±, lamenta. Tres a?os en una c¨¢rcel de Guayaquil y el resto en otra de la ciudad de Cuenca, donde dice, ¡°ten¨ªa cama para m¨ª, pero el miedo por mi seguridad era permanente. All¨ª han pasado cosas muy malas¡±. Gallardo solo recibi¨® visitas en dos ocasiones. En ambos casos fue Javier Casado. ¡°Un h¨¦roe que se merece todo. Me tra¨ªa los productos b¨¢sicos de limpieza y ha sido quien ha organizado mi retorno a Espa?a, lo que no ha hecho nadie¡±. Finalmente, volvi¨® a Granada hace unos meses y ahora vive de su jubilaci¨®n. En los primeros meses, cuenta que Casado ha sido el que le ayud¨® a organizarse.

Otra persona que volver¨¢ en poco m¨¢s de un mes si no hay contratiempos es Mari Carmen Franco. Atr¨¢s dejar¨¢ una prisi¨®n con alrededor de 2.000 presas, con solo hay agua fr¨ªa, ocho o nueve mujeres por celda. ¡°Realmente no sabemos por todo lo que est¨¢ pasando mi Mari Carmen¡±, cuenta su hermana Manuela. Con la salida de Franco, la c¨¢rcel quedar¨¢ vac¨ªa de espa?olas porque la pen¨²ltima, Eva, retorn¨® hace unos meses y ahora termina de cumplir su pena en una prisi¨®n andaluza.

Javier Casado viaja con frecuencia desde Valladolid, sede de su organizaci¨®n, a Latinoam¨¦rica para visitar a estos espa?oles. Es el primer visitante ¨Dacompa?ado siempre de un m¨¦dico¨D que pregunta por ellos en la prisi¨®n. La hermana de Franco dice que ¨¦l es la ¨²nica visita que su hermana ha recibido en tres a?os. ¡°Le lleva productos de higiene y alg¨²n regalillo para levantarle el ¨¢nimo¡±, comenta por tel¨¦fono desde su casa de El Puerto de Santa Mar¨ªa. Pero sobre todo, Casado, su fundaci¨®n y la ayuda de la Junta les ofrece una perspectiva de futuro a estos andaluces en apuros a miles de kil¨®metros.