Los m¨¦dicos de primaria en Andaluc¨ªa exigen que se cumpla el pacto de reducci¨®n de pacientes en su primer d¨ªa de huelga

Esta es una huelga compleja, explica Marta Garc¨ªa Caballos, m¨¦dico de familia en Granada sobre los paros en atenci¨®n primaria en Andaluc¨ªa que han comenzado este mi¨¦rcoles, convocado por el Sindicato M¨¦dico Andaluz (SMA). Ella no ha podido secundarla porque le correspond¨ªa hacer servicios m¨ªnimos. Garc¨ªa Caballos explica que esa complejidad se debe la divisi¨®n entre las organizaciones sindicales que representan a los trabajadores sanitarios andaluces ¡ªUGT, CC OO, Csif y SATSE¨D que no han apoyado la medida de presi¨®n de una huelga indefinida que, paralelamente, impulsa ¡ªcon escasa repercusi¨®n¨D el reci¨¦n creado Sindicato de M¨¦dicas y M¨¦dicos de Andaluc¨ªa. Estas premisas pueden explicar su escaso seguimiento del 3,38%, de acuerdo con los datos facilitados por la Junta a media tarde, unas cifras que, sin embargo, los responsables del SMA cuestionan. A falta de recopilar toda la informaci¨®n, se?alan que en provincias como Sevilla ha estado en un 50%, un 30% en C¨®rdoba o un 20% en M¨¢laga.

¡°Los m¨¦dicos no somos un colectivo muy dado a salir a la calle y las circunstancias y situaciones son distintas en una capital que en una zona de la sierra, pero m¨¢s que el porcentaje de seguimiento, que todos los Gobiernos tienden a rebajar, que haya m¨¢s o menos m¨¦dicos en huelga no minimiza ni cuestiona la situaci¨®n insostenible de la atenci¨®n primaria y que el deterioro es palpable¡±, se?ala el presidente del SMA, Rafael Carrasco, durante la marcha convocada por la organizaci¨®n en el centro de Sevilla este mediod¨ªa. Garc¨ªa, que no pertenece a ese sindicato ni comparte alguno de sus planteamientos, tambi¨¦n coincide en ese deterioro y en c¨®mo los ciudadanos comparten tambi¨¦n esa percepci¨®n. ¡°Los d¨ªas de espera para obtener cita, los pocos minutos por consulta¡­ Ellos notan esa p¨¦rdida del control sobre su tiempo. No solo es un problema de la atenci¨®n primaria, es extensivo al sistema sanitario en general¡±, sostiene.

Rosario, pensionista de 73 a?os, abandona el centro de salud de Marqu¨¦s de Paradas, en el centro de la capital hispalense durante el primer d¨ªa de huelga entendiendo perfectamente las razones que han llevado a los m¨¦dicos a ese punto. ¡°Mi m¨¦dico de cabecera s¨ª estaba, pero por lo menos hab¨ªa unos cuatro en huelga. Yo no s¨¦ si esto ayuda m¨¢s o menos a mejorar la situaci¨®n, pero puedo entender que est¨¦n descontentos, porque nosotros tambi¨¦n estamos un poco cansados¡±, reconoce. Detr¨¢s sale otra paciente que ha tenido peor suerte. ¡°El m¨ªo no estaba por la huelga y me han dado cita para ma?ana, creo que, dentro de todo, eso es lo mejor, que no me van a hacer esperar m¨¢s¡±, sonr¨ªe con cara de circunstancias. De los 13 galenos que suelen estar por la ma?ana, cuatro han hecho paro. Por la tarde, ¨²nicamente se encontraba el de guardia, con servicios m¨ªnimos del 100%. En ese turno, explican en la instalaci¨®n, suele haber cuatro profesionales.

Alrededor de 8.000 m¨¦dicos y pediatras de Andaluc¨ªa estaban convocados a esta huelga impulsada por el SMA, que representa al 95% de los profesionales de la medicina de la comunidad. Los servicios m¨ªnimos del 100% en urgencias y del 30% en el resto de consultas, tambi¨¦n han sido cuestionados por elevados por los convocantes. El sindicato ya hab¨ªa anunciado otro paro para el pasado 27 de enero, pero la Junta consigui¨® evitarlo in extremis pactando exclusivamente con ellos una reducci¨®n de la agenda hasta los 35 pacientes por d¨ªa para los m¨¦dicos y 25 pacientes diarios para los pediatras y una consulta asistencial ¡ªvoluntaria y vespertina, de 25 y 18 usuarios, respectivamente¨D para aligerar las listas de espera. La Consejer¨ªa de Salud se comprometi¨® a hacer efectiva la medida en un mes, pero m¨¢s de dos despu¨¦s, no ha realizado ning¨²n cambio. ¡°Nos sentimos decepcionados y estamos recelosos. No se ha hecho absolutamente nada, por eso nos hemos vuelto a poner en pie de guerra, nos han ense?ado el camino, ellos no se mueven si nosotros no ense?amos lo que tenemos que ense?ar¡±, sostiene Carrasco. ¡°No era necesario que se hubiera culminado el proceso, pero s¨ª podr¨ªa haberse empezado su implementaci¨®n¡±, abunda.

Pesimismo sobre el pacto con la Junta

Adem¨¢s de la aplicaci¨®n efectiva de la reducci¨®n de las consultas diarias, el SMA reclama una equiparaci¨®n salarial con sus compa?eros que pasan consultas hospitalarias ¡ªque actualmente puede ser de entre 5.000 y 10.000 euros mensuales m¨¢s bajo, seg¨²n los datos facilitados por el sindicato¨D, y con otras comunidades aut¨®nomas; que los complementos que reciben en funci¨®n de las tarjetas sanitarias que les corresponden pasen a la masa salarial fija o la actualizaci¨®n de los puestos de dif¨ªcil cobertura.

Algunos de estos puntos aparecen, aunque no en esos t¨¦rminos ni de forma concreta, en el documento redactado por la Junta como base para llegar a un pacto por la atenci¨®n primaria. Del segundo texto que se present¨® el pasado lunes se ha eliminado el punto relacionado con el incremento salarial que se reconoc¨ªa solo para los m¨¦dicos y que constituy¨® uno de los principales escollos en la primera jornada de la negociaci¨®n porque el resto de sindicatos exigieron que esa subida se extendiera al resto de profesionales. ¡°La uni¨®n va a ser imposible. El problema de la atenci¨®n primaria es tambi¨¦n un problema de los m¨¦dicos, nuestro trato es mucho m¨¢s discriminatorio, y el problema de la equiparaci¨®n salarial debe abordarse de manera concreta para nosotros¡±, abunda Rafael Ojeda, el presidente del SMA en Sevilla.

Es precisamente la disparidad de intereses entre las organizaciones sindicales que integran la mesa de negociaci¨®n la que se erige como uno de los principales obst¨¢culos para que salga adelante el pacto. ¡°Ojal¨¢ me equivoque, pero esta propuesta de acuerdo no tiene ning¨²n futuro, porque no recoge todas nuestras reivindicaciones, ni las del resto, y nunca vamos a poder dar todos el visto bueno a todos los puntos, que es el consenso colectivo al que quiere llegar la Administraci¨®n, pero es que adem¨¢s en los puntos en los que podr¨ªamos estar de acuerdo, la Junta se limita solo a decir vaguedades o que revisar¨¢ en un futuro, sin concretar¡±, argumenta Carrasco.

La pr¨®xima huelga est¨¢ prevista para el pr¨®ximo mi¨¦rcoles 19 de abril y a esta le suceder¨¢n otras cuatro m¨¢s -una cada semana- hasta las elecciones municipales del 28 de mayo. Para el 2 de ese mes est¨¢ prevista la siguiente reuni¨®n de la Junta con los sindicatos para avanzar en unas posturas que tras la segunda reuni¨®n parecen m¨¢s alejadas que cuando se citaron la primera vez el 29 de marzo. Por encima del car¨¢cter reivindicativo, el des¨¢nimo es la sensaci¨®n generalizada entre los m¨¦dicos. ¡°Mira Madrid, despu¨¦s de una huelga mucho m¨¢s dura que la de aqu¨ª, lo que se obtuvo fueron m¨ªnimos, y aqu¨ª hay un Gobierno con mayor¨ªa absoluta¡±, se?ala Garc¨ªa.