El coral candelabro vuelve a iluminar la costa de Granada

Una decena de neum¨¢ticos, 47 kil¨®metros de sedales, 21 muertos de hormig¨®n y fondeos caseros, 18 anclas, un kil¨®metro cuadrado de redes de pesca y 24 nasas. Son solo algunos de los residuos encontrados en el fondo marino por el equipo de la asociaci¨®n Coral Soul en una superficie similar a la de una piscina ol¨ªmpica en la costa de Granada. La basura procedente de la pesca profesional, recreativa y los fondeos libres lleva d¨¦cadas da?ando a un excepcional jard¨ªn de coral candelabro (Dendrophyllia ramea) que reside en la Punta de la Mona, en La Herradura (Almu?¨¦car). Su brillante color naranja se hab¨ªa apagado por la mugre y el bosque submarino caminaba hacia la desaparici¨®n, hasta que la iniciativa de esta organizaci¨®n ha conseguido repoblar la zona, en menos de dos a?os, con m¨¢s de 500 ejemplares a partir de esquejes deteriorados. ¡°Es una especie formadora de h¨¢bitats as¨ª que, con ellos, tambi¨¦n aumenta la biodiversidad¡±, se?ala optimista Manuel Gonz¨¢lez Duarte, investigador del Instituto Espa?ol de Oceanograf¨ªa (IEO).

La Punta de la Mona cuenta con 120 hect¨¢reas declaradas Zona de Especial Conservaci¨®n. Las rocas se despliegan bajo el mar en tres ca?ones. A ellos llegan unas corrientes profundas cargadas de nutrientes que alimentan a estas colonias de coral candelabro, que aqu¨ª residen hasta a 30 metros de profundidad, cuando su h¨¢bitat com¨²n baja mucho m¨¢s, entre los 50 y 200 metros. El 72% de los ejemplares presentan da?os por los residuos y sin la ayuda de Coral Soul, la mayor¨ªa estaba destinada a morir.

La m¨¢xima responsable de la entidad es Marina Palacios, quien relata los resultados conseguidos con pasi¨®n. Esta segoviana de 32 a?os se dedica, desde hace ocho a?os, a los corales y ya puso en marcha un proyecto piloto en este rinc¨®n de la costa, donde la Junta de Andaluc¨ªa trabaja en una norma para regular las actividades en la zona por las ¡°presiones y amenazas¡± de la pesca profesional, deportiva, buceo y esn¨®rquel. En 2020, se instalaron con ¨¦xito una guarder¨ªa de corales. Y, en 2021, arrancaron la iniciativa Deep Core Project, que incluye otros cuatro refugios ¡ªtres de ellos a 30 y 36 metros de profundidad¡ª donde se recuperan centenares de corales con un 96% de supervivencia, seg¨²n los datos de la organizaci¨®n. Reciben apoyo t¨¦cnico y recursos econ¨®micos desde la ONG francesa Coral Guardian. Su directora de proyectos, la franco-colombiana Florina Jacob, asegura que no esperaban un progreso tan inmediato. ¡°Es incre¨ªble¡±, destaca.

El camino hacia las buenas cifras est¨¢ formado por una labor integral realizada en varias fases bajo agua. La primera fue un estudio de la poblaci¨®n y la gen¨¦tica de estos corales ¡ªincluidos en el Libro Rojo de los invertebrados de Andaluc¨ªa por su vulnerabilidad¡ª as¨ª como de su contexto acu¨¢tico. Es un trabajo realizado en colaboraci¨®n con el Instituto Espa?ol Oceanogr¨¢fico y las universidades de Sevilla, Granada, C¨¢diz y la de Faro, en Portugal, que permite un an¨¢lisis desde niveles moleculares hasta todo el ecosistema en s¨ª.

M¨¢s tarde, se retiraron los residuos ¡ªque pesaban 1,3 toneladas¡ª de dos de los tres ca?ones de la Punta de la Mona. ¡°El tercero se dej¨® tal y como est¨¢ para poder comparar c¨®mo evolucionan las zonas en las que trabajamos respecto a las que no¡±, explica Palacios, que insiste en la base cient¨ªfica de cada paso que dan. ¡°Esta es una oportunidad poco com¨²n para entender c¨®mo gestionar y conservar especies clave en los ecosistemas marinos¡±, a?ade Pablo L¨®pez-Gonz¨¢lez, catedr¨¢tico del departamento de Zoolog¨ªa de la Universidad de Sevilla.

Una exitosa repoblaci¨®n

Cuando una red cae sobre la zona rocosa atrapa especies y rompe los corales. Otros son da?ados por anclas, plomos o sedales que se enganchan. Y cuando los trozos de la colonia caen sobre suelos arenosos, terminan muriendo. Para que no ocurra, los esquejes son recogidos por el equipo de Coral Soul y trasladados hasta las tres guarder¨ªas, unos paneles met¨¢licos que funcionan a modo de hospital. Fueron instaladas entre 2021 y 2022 y en 2023 llegar¨¢ la cuarta.

All¨ª se hace un an¨¢lisis de las heridas y las patolog¨ªas que sufre cada ejemplar ¡ªdesde tejidos necrosados a perforaciones por par¨¢sitos o restos de sedimento¡ª y se act¨²a sobre ellos con procedimientos mec¨¢nicos para su cicatrizaci¨®n. ¡°Es como la restauraci¨®n de un cuadro, con mucha paciencia y cuidado¡±, subraya Palacios. Los mimos son diarios con inmersiones de entre una y dos horas y media. Cuando recupera su salud, cada coral es trasladado a rocas despobladas y fijado con una resina natural, donde son monitoreados con el objetivo de que se puedan mantener en el tiempo por s¨ª mismos. El 96% de los replantados contin¨²an hoy con vida. Y su lugar en las guarder¨ªas es ocupado por nuevos tallos enfermos para continuar la lucha contra la despoblaci¨®n en este recoveco del Mediterr¨¢neo.

Durante el a?o y medio que lleva el proyecto ¡ªque durar¨¢ cuatro en total, con posibilidad de ampliar un quinto¡ª no solo los corales han mejorado su vitalidad, tambi¨¦n ha habido una explosi¨®n de vida. Seg¨²n un estudio del CSIC, estos arrecifes suelen acoger a pulpos, sargos, esponjas o estrellas de mar y Coral Soul subraya que ahora hay un 46% m¨¢s de especies residiendo en ellos que antes del comienzo de esta iniciativa.

La zona protege a alevines de muchos peces y la salud de la colonia ayuda al crecimiento de otras especies, como las gorgonias. Son algunos de los aspectos que los buceadores relatan durante sus charlas y actividades de sensibilizaci¨®n en las que han participado unas 6.500. personas ¡°La visibilidad y la participaci¨®n de voluntarios y centros de buceo locales es muy importante. El anclaje local del proyecto es incre¨ªble¡±, se sorprenden desde Coral Guardian. ¡°Han sabido integrar en ese objetivo a clubes de buceo, centros de ense?anza desde primaria a universidades y p¨²blico general¡±, insiste L¨®pez-Gonz¨¢lez.

En la entidad destacan tambi¨¦n la relaci¨®n con el gobierno auton¨®mico. Coral Soul reporta sus datos e investigaciones a la Junta de Andaluc¨ªa y ha influido en el impulso de una Orden de la administraci¨®n auton¨®mica para regular las actividades dentro de la Punta de la Mona. Fue lanzada a consulta p¨²blica en primavera de 2021, pero el Ayuntamiento de Almu?¨¦car pidi¨® que se tengan en cuenta las observaciones ¡°de federaciones, asociaciones y clubes de pesca recreativa¡±, seg¨²n un comunicado del municipio. Fuentes del Gobierno andaluz explican que desde entonces estudian esas alegaciones para llegar ¡°al m¨¢ximo consenso¡±. No ponen fechas para la aprobaci¨®n de la norma, pero aseguran que ¡°hay inter¨¦s en sacarla adelante cuanto antes¡±.

¡°No estamos en contra de la pesca. Si de sus consecuencias en este ¨¢rea tan vulnerable. Hay que hacer una gesti¨®n que permita la pr¨¢ctica de todas las actividades [el buceo, por ejemplo, deja casi tres millones de euros anuales en la zona] de manera sostenible. Y est¨¢ demostrado que encima del arrecife no se puede pescar¡±, sostiene Palacios, que ya prepara el pr¨®ximo el proyecto, que realizar¨¢n de manera paralela a este en Cerde?a (Italia). All¨ª investigar¨¢n sobre un bosque de gorgonias ¡ªotro tipo de coral¡ª gracias a un proyecto liderado por el Centro Tecnol¨®gico Naval y del Mar (Cartagena) y el apoyo de la Comisi¨®n Europea, en el que trabajar¨¢n junto a 22 socios de nueve pa¨ªses.