El sector sanitario carga contra el Govern por la gesti¨®n de la quinta ola en Catalu?a
M¨¦dicos y enfermeras denuncian la falta de previsi¨®n y el retraso en tomar medidas para controlar la transmisi¨®n del virus
La quinta ola echa el freno en Catalu?a, pero la presi¨®n asistencial que todav¨ªa arrastran centros de salud y hospitales ha acentuado el malestar del sector sanitario con el Govern por la gesti¨®n de este nuevo envite del virus. M¨¦dicos y enfermeras denuncian la falta de previsi¨®n y reacci¨®n ante el auge de contagios que empez¨® a despuntar a finales de junio y acusan el cansancio de a?o y medio de pandemia. El consejero de Salud, Josep Maria Argimon, hizo autocr¨ªtica y reconoci¨® que los grandes festivales de m¨²sica, por ejemplo, no tendr¨ªan que haberse celebrado. Pero el hartazgo de los profesionales persiste. Ni siquiera las medidas compensatorias de Salud, como pagar al doble la hora de guardia para poder disponer del m¨¢ximo n¨²mero de profesionales, han estado exentas de pol¨¦mica.
A mediados de junio, la curva epid¨¦mica vir¨® su tendencia y empez¨® a despuntar de forma fulgurante hasta mediados de julio, cuando se llegaron a detectar m¨¢s de 50.000 casos en una semana. Pero el Govern tard¨® en reaccionar. De hecho, el 30 de junio anunci¨® que abr¨ªa la vacunaci¨®n al grupo de 16 a 30 a?os en una sola franja debido al auge de contagios en estos grupos de edad. Pero se manten¨ªa la desescalada. Estrella Mart¨ªnez, decana del Consejo de Colegios de Enfermer¨ªa de Catalu?a, se?ala que ¡°hay malestar entre los sanitarios porque esta ola se podr¨ªa haber evitado¡±. ¡°Se abri¨® muy r¨¢pido cuando todos los indicadores mejoraban, pero hab¨ªa mucha poblaci¨®n sin vacunar. Tendr¨ªan que haberse esperado¡±, insiste.
Hasta el 2 de julio, cuando algunas discotecas ya hab¨ªa cerrado motu proprio ante la imposibilidad de hacer cumplir las medidas de seguridad, Salud no hizo la propuesta de tener un test de ant¨ªgenos negativo antes de entrar. Esa medida, no obstante, qued¨® finalmente en agua de borrajas y con la incidencia rondando los 1.000 casos por 100.000 habitantes a 14 d¨ªas, el fin de semana del 7 de julio, cerr¨® completamente el ocio nocturno. Permiti¨®, eso s¨ª, celebrar tres grandes festivales de m¨²sica al aire libre que influyeron en la transmisi¨®n ¡ªse contagiaron cerca de 2.300 participantes, un 58% m¨¢s de lo esperable, seg¨²n un estudio de Salud¡ª. El 12 de julio, cuando se alcanz¨® el pico de contagios diarios de esta ola (9.738), el Govern cerr¨® todas las actividades a las 00.30 y limit¨® las reuniones. El 14 de julio, finalmente, solicit¨® el aval judicial para un toque de queda que a¨²n se mantiene en buena parte de la comunidad. El Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a ha autorizado que siga vigente hasta el 20 de agosto y lo ampl¨ªa a 176 municipios.
Las voces consultadas coinciden en denunciar la lentitud en la respuesta al virus. Antoni Sis¨®, presidente de la Sociedad Catalana de Medicina Familiar y Comunitaria (Camfic), se?ala que ¡°la capacidad de reacci¨®n de toda la Administraci¨®n, no solo de Salud, podr¨ªa haber sido m¨¢s r¨¢pida¡±, aunque admite que ¡°esta quinta ola as¨ª no se la esperaba nadie¡±. Coincide S¨°nia Miravet, vicesecretaria del Colegio de M¨¦dicos de Barcelona: ¡°Algunas medidas que pensamos que ten¨ªan que ser m¨¢s contundentes, se tomaron a posteriori, cuando la atenci¨®n primaria ya estaba saturada. Da la sensaci¨®n de que la experiencia no te aporta mucho m¨¢s y no son capaces de hacer esta previsi¨®n¡±. Coincide Mari Luz Talavera, portavoz del Foro Catal¨¢n de Atenci¨®n Primaria (Focap): ¡°Ha faltado previsi¨®n. Parece que no hemos aprendido nada del a?o y medio de pandemia. Los profesionales de atenci¨®n primaria estamos muy tocados¡±.
Los sindicatos del sector, m¨¢s duros en la cr¨ªtica al Govern, tildan la respuesta del Govern a la quinta ola de ¡°muy mala¡±. Xavier Lleonart, secretario general de Metges de Catalunya denuncia la ¡°improvisaci¨®n total¡± del Ejecutivo catal¨¢n para responder al envite del virus: ¡°La sensaci¨®n es que est¨¢n actuando a toro pasado: cuando la situaci¨®n ya se desborda, intentan poner medidas¡±. Por su parte, David Oliver, portavoz del sindicato de enfermer¨ªa Satse, alerta del ¡°desgaste f¨ªsico y mental de los profesionales ante esta quinta ola: ¡°Lo estamos viviendo muy mal. Lo que vemos es que pasan los d¨ªas y que para el Govern no es una prioridad las enfermeras y el personal sanitario. Llevamos 17 meses as¨ª y la sobrecarga asistencial nos llevan a agotarnos f¨ªsica y mentalmente¡±.
La amenaza de tener que suspender permisos y vacaciones del personal si la pandemia segu¨ªa creciendo tampoco ayud¨® a calmar los ¨¢nimos. Argimon insisti¨® en que trabajar¨ªa para evitarlo a toda costa, pero la posibilidad estaba ah¨ª. Oliver asegura que era ¡°intolerable¡± dejar sin descanso a unos trabajadores exhaustos y Lleonart tilda de ¡°menosprecio al personal¡± tan siquiera plantear la medida. ¡°Esa amenaza de quedarnos sin vacaciones sent¨® muy mal porque los profesionales viv¨ªan dos realidades: la de la calle, que te quitabas la mascarilla, y la del sistema, donde ingresaban pacientes a los hospitales y faltaban manos en atenci¨®n primaria para detectar, hacer test, hacer seguimiento cl¨ªnico y vacunar¡±, recuerda Sis¨®. Talavera urge, de hecho, ¡°personal suficiente y contratos dignos para evitar todos los doblajes y jornadas suplementarias que se est¨¢n haciendo para poder atender a los pacientes¡±.
Los ¨²ltimos pasos de Salud tampoco han estado exentos de pol¨¦mica. Ni siquiera las medidas positivas que compensar¨ªan el sobreesfuerzo de los profesionales. Por ejemplo, el Servicio Catal¨¢n de la Salud (CatSalut) envi¨® una circular donde daba ¡°directrices¡± a los centros sanitarios de la red p¨²blica para doblar el precio de la hora complementaria para, en momento de m¨¢xima presi¨®n asistencial y con las plantillas menguadas por las vacaciones del personal, ¡°poder disponer del m¨¢ximo n¨²mero de profesionales y reforzar las plantillas¡±. MC denunci¨®, sin embargo, que no todos los centros eran favorables a cumplir la directriz y el CatSalut les contest¨® que esa circular eran ¡°orientaciones que no tienen car¨¢cter obligatorio¡±.
Una portavoz de Salud matiza que, efectivamente, si bien la circular ¡°habla de directrices, estas han de ser aprobadas por los ¨®rganos de gobierno de las entidades y adaptadas a la realidad¡± del convenio o pactos retributivos del centro. ¡°El CatSalut no tiene capacidad jur¨ªdica para establecer condiciones retributivas en los centros¡±, agrega esta portavoz. Para Lleonart, la circular es ¡°un brindis al sol¡±: ¡°Al CatSalut le falta autoridad: hay una incapacidad para trasladar directrices homog¨¦neas a todo el sistema. Cada gerente hace lo que le da la gana¡±, protesta.
Medidas controvertidas
Pero no ha sido el tema retributivo la ¨²nica herida abierta entre los profesionales. Las enfermeras tambi¨¦n se han puesto en pie de guerra despu¨¦s de que Salud anunciase que, en caso de necesidad y tras agotar todo el margen de contrataci¨®n de enfermeras, odont¨®logos, m¨¦dicos y pod¨®logos para hacerlo, habilitar¨ªa a los t¨¦cnicos de cuidados auxiliares y de enfermer¨ªa (TCAI) para vacunar contra la covid. Estrella Mart¨ªnez denuncia que ¡°los TCAI no tienen competencias para poder vacunar¡± y, adem¨¢s, que en Catalu?a no es necesario recurrir a este escenario. ¡°Hay enfermeras que se apuntaron a las listas que no han sido llamadas. No hay ninguna necesidad de poner sobre la mesa otras alternativas¡±, protesta. La queja de las enfermeras ha provocado que la directriz quede parada.
Talavera tambi¨¦n lamenta la falta de refuerzo de efectivos de medicina y enfermer¨ªa en los centros de salud. ¡°Se refuerza con psic¨®logos, dietistas y otros perfiles profesionales, un refuerzo de unos profesionales que no necesitamos en este momento. Necesitamos m¨¦dicos, enfermeras, administrativos con los que poder repartir las necesidades de la poblaci¨®n¡±, apunta la enfermera de la Focap. La sanitaria reclama ¡°cupos de pacientes adecuados y condiciones laborales dignas¡± con contratos ¡°m¨ªnimos de un a?o y no de tres meses¡±.
Otra medida controvertida ha sido la instrucci¨®n del CatSalut que ordenaba aplazar toda la actividad no urgente y focalizar los recursos en la atenci¨®n a la covid y los procedimientos de emergencia o no demorables. Sis¨® se?ala que la circular ¡°no fue acertada¡±. ¡°La priorizaci¨®n, de facto, ya se estaba haciendo. Yo lo que quiero es una instrucci¨®n que me ampare a m¨ª en mi decisi¨®n de a qui¨¦n tengo que priorizar¡±, apunta el presidente de la Camfic. Pero esa nota ya marcaba que la priorizaci¨®n era la atenci¨®n a la covid. ¡°Este documento pone por delante que una persona venga al centro de salud a buscar un certificado verde, por ejemplo, porque es un papel que emana de la pandemia. Si vienen 1.000, a m¨ª me est¨¢n desplazando la atenci¨®n a otros pacientes¡±, protesta Sis¨®.
Miravet, por su parte, apunta que todas estas medidas paliativas eran ¡°intentos de empatizar¡± con lo que estaban viviendo los profesionales, pero se interpretaron mal: ¡°La instrucci¨®n quer¨ªa ayudarnos y no se acab¨® de interpretar bien y se vivi¨® muy mal porque parec¨ªa que solo ¨ªbamos a hacer atenci¨®n a la covid. Cuando luego se aterriz¨® en el territorio, no ha sido as¨ª, sino que en funci¨®n de los recursos humanos, hay que adaptarse¡±.
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