?xito rotundo de ¡®El Libro de la selva¡¯ de Akram Khan en el Liceo de Barcelona

La expectaci¨®n que despiertan en nuestra ciudad los espect¨¢culos del afamado bailar¨ªn y core¨®grafo ingl¨¦s de origen banglades¨ª, Akram Khan (Londres, 1974) hizo que la noche del mi¨¦rcoles, el Gran Teatro del Liceo estuviera a rebosar de p¨²blico. Todos ten¨ªan en mente la inolvidable versi¨®n de Giselle que este core¨®grafo realiz¨® para el English National Ballet y que se bail¨® la pasada temporada en este espacio esc¨¦nico. En esta ocasi¨®n, el artista al frente de su compa?¨ªa, formada por 10 magn¨ªficos y disciplinados int¨¦rpretes internacionales, presentaba Jungle Book Reimagined, obra estrenada en el pasado abril en Londres. Se trata de una reinterpretaci¨®n del famos¨ªsimo t¨ªtulo de Rudyard Kipling, publicado en 1894.

No s¨¦ si encontrar¨¦ los adjetivos suficientes para describir la belleza hipn¨®tica y a la vez embriagadora que emana de este espect¨¢culo gracias a unos modernos e imaginativos efectos especiales. En la versi¨®n de Khan, que el presenta en dos actos, Mowgli, el protagonista del cuento, es una ni?a migrante que huye de una ciudad desolada por la consecuencia del cambio clim¨¢tico y llega a una gran metr¨®poli, tambi¨¦n devastada, y en la que conviven diferentes animales, que deciden adoptar a la ni?a. Con la colaboraci¨®n del escritor ingl¨¦s Tariq Jordan, se han creado unos di¨¢logos con voces en off sobre los que los bailarines ejecutan sus variaciones y su trabajo coral. Di¨¢logos que aparecen traducidos al castellano. Describir las im¨¢genes de las intensas lluvias, el paso de la manada de elefantes, de camellos, de p¨¢jaros y de jirafas entre otros o explicar como Mowgli dispara una flecha que cruza todo el escenario del Liceo suspendida en el aire, es casi imposible. Resulta incre¨ªble.

La versi¨®n de Kahn de El libro de la selva, pese a los cambios realizados, posee en esencia el mensaje que encierra la obra de Kipling y seg¨²n ha explicado el propio core¨®grafo reside en la interdependencia indisoluble entre humanos, animales y naturaleza, la necesidad de la familia y la necesidad de pertenencia. Valores que para Khan se han perdido en la actualidad, creando un sentimiento de incertidumbre en los humanos al haberse olvidado la conexi¨®n con el concepto hogar y nuestro planeta. Por ello la obra destila desolaci¨®n m¨¢s que esperanza es una pieza obscura que enfatiza el dise?o de luces de Michael Hulls. Otro aliado de excepci¨®n para este montaje es la m¨²sica de la compositora, la pianista, y violinista inglesa, Jocelyn Pook, autora de numerosas bandas sonoras para cine. En esta ocasi¨®n, esta artista ha credo una emotiva partitura muy l¨ªrica y po¨¦tica, que se intercala con los sonidos de la fauna animal.

Extraordinarios bailarines

Los 10 bailarines de la Akram Khan Company cautivaron al espectador desde su primera aparici¨®n en escena, sus movimientos que se identifican con los animales protagonistas como el oso Baloo, la pantera Bagheera, la serpiente pint¨®n Kaa, los lobos y los monos son aut¨¦nticos. Su baile felino o imitando a los monos dej¨® hipnotizado al p¨²blico. Si a ellos se le suman el hermoso trabajo coral en que mezcla con maestr¨ªa la danza contempor¨¢nea, en su caso formado por ricas frases coreogr¨¢ficos, junto a la danza a la danza kathak, - un baile tradicional del norte de la India, rico en ritmos, estamos ante un expresivo e inolvidable vocabulario coreogr¨¢fico que ilustra un en¨¦rgico y apasionante baile. En este caso el baile animal tiene una solemnidad a?adida, que impregna a la obra de un atrayente misticismo. Menci¨®n especial merece la bailarina filipina Jan Mikaela Villanueva, en el papel de Mowgli. Su gesto salvaje y d¨²ctil a la vez logra emocionar.

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