Jordi Pujol, del ostracismo por corrupci¨®n a merendar con los Mossos
Desde la confesi¨®n hace 10 a?os, han aumentado las expresiones p¨²blicas de apoyo del mundo convergente hacia al ¡®expresident¡¯ y evasor confeso
A finales de julio de 2014, la web del Centre d¡¯Estudis Jordi Pujol enmudeci¨®. Donde todo era actividad pol¨ªtica, reinaba el silencio, como si se tratara de esas mas¨ªas del Tagamanent, una estribaci¨®n del macizo del Montseny, en Barcelona, que el joven Pujol asegur¨® hallar despobladas en los a?os cuarenta. El 25 de julio de hace 10 a?os, el expresident de la Generalitat sacudi¨® los cimientos ¨¦ticos y pol¨ªticos de los que se hab¨ªa autoerigido en guardi¨¢n y confes¨® la existencia de una fortuna familiar que hab¨ªa mantenido oculta en Andorra, y que atribuy¨® a la tan c¨¦lebre como presunta y millonaria ¡°deixa de l¡¯avi Florenci¡± (la herencia del abuelo Florenci).
Desde ese d¨ªa del ap¨®stol Santiago, patr¨®n de Espa?a, Pujol ha reivindicado ¡ªprimero con timidez y luego con insistencia¡ª su derecho a recuperar el honor. Por ello, y a sus 94 a?os reci¨¦n cumplidos, el durante 23 a?os president ha ido administrando in crescendo su presencia en la vida social y pol¨ªtica.
El ostracismo del apestado ha dado paso a aplausos en actos pol¨ªticos, a militar en Junts per Catalunya o a merendar (hace apenas un mes) con los mossos que le escoltaron y sus actuales mandos policiales. Tras la confesi¨®n en la que carg¨® con la cruz de la familia ¡ªsus siete hijos y su esposa¡ª, erigi¨¦ndose en cabeza de turco de la actividad financiera del clan, Pujol ha ido buscando espacios, asumiendo ese papel de padre, que su esposa tantas veces le reproch¨® no haber desempe?ado. A esa singular pasi¨®n contribuye la eternizaci¨®n del procedimiento judicial, en stand by desde que en abril de 2021 se ordenara la apertura de juicio, en el que afronta una petici¨®n de nueve a?os de c¨¢rcel, por crear una ¡°red de clientelismo¡± desde el poder auton¨®mico y acumular y ocultar en Andorra una ¡°ingente cantidad de dinero¡± derivada de la corrupci¨®n.
Pujol en este decenio ha recorrido un peculiar G¨®lgota en busca de redenci¨®n. Y ha logrado pasar de la p¨¦rdida de honores a ser reivindicado p¨²blicamente por el viejo mundo convergente, ahora mutado en Junts. Los que hace 10 a?os ¡ªpor necesidades del guion del proc¨¦s¡ª no pod¨ªan permitirse que la independencia fuera acompa?ada por la m¨¢cula de la corrupci¨®n, le abren ahora en p¨²blico los brazos que en privado nunca le negaron.
El inicio del ostracismo fue duro, pues el durante 23 a?os president perdi¨® su despacho en el se?orial Passeig de Gr¨¤cia barcelon¨¦s y comenz¨® su peregrinaje por zonas m¨¢s discretas, hasta recalar en la calle Cal¨¤bria 255, en el Eixample: un piso de 90 metros cuadrados que consigui¨® en 2015 y cuyo precio de alquiler ¡ªen caso de existir¡ª se desconoce. Carme Alcoriza ¡ªfallecida en 2022 y durante 23 a?os secretaria y jefa de gabinete del president, en total 40 a?os con la etapa de Banca Catalana¡ª era hermana de la gerente de la fundaci¨®n Vila Casas, propietaria de la vivienda en cuesti¨®n. Vila Casas, adem¨¢s, era un viejo conocido de cuando l¡¯avi Florenci se dedicaba al negocio farmac¨¦utico. A Pujol nunca le faltaron complicidades.
Inicialmente retom¨® su actividad social con prudencia: el expresident recib¨ªa a amigos, visitas y alg¨²n que otro indeseado registro policial, como en 2017. El resto del tiempo le daba vueltas a su idea fija: c¨®mo redimirse. Y para ello, el 17 de marzo de 2015, el ya inerte Centre d¡¯Estudis Jordi Pujol daba paso a la Associaci¨® Serviol, creada y presidida por ¨¦l con el fin, entre otros objetivos, de difundir sus textos.
Pujol no se arredraba, pero s¨ª dosificaba sus apariciones p¨²blicas. En septiembre de 2014 y febrero de 2015 particip¨® en dos comparecencias parlamentarias en las que lanz¨® advertencias: ¡°Si vas segando la rama de un ¨¢rbol, al final cae toda la rama¡ con los nidos que hay. Pero no solo cae esa rama, tambi¨¦n caen las otras¡±. Par¨¢bolas amenazantes aparte, no aclar¨® nada de la fortuna oculta. Eran otros quienes afloraban su ¡°pecado¡±. As¨ª, en julio de 2015, en el funeral del cura y alcalde comunista de Santa Coloma de Gramenet, Llu¨ªs Hern¨¢ndez, un asistente al acto le increp¨®, asegurando que deb¨ªa avergonzarse de lo que hab¨ªa hecho. Pujol se mordi¨® la lengua ¡ªpara no hablar de lo mucho que hab¨ªa hecho por Catalu?a como eximente de su ¡°falta¡±¡ª y le respondi¨® que gracias a personas honradas como Hern¨¢ndez exist¨ªa la posibilidad de redenci¨®n para todos. Y por ese motivo ¡ªconfes¨®¡ª sent¨ªa la esperanza en medio de dolor.
Pero lo cierto es que, desde la confesi¨®n, el viejo mundo convergente ha sido comprensivo y compasivo con uno de los suyos. La Operaci¨®n Catalu?a de la polic¨ªa patri¨®tica del PP contra el independentismo le daba elementos para presentar a su familia como una v¨ªctima m¨¢s de la persecuci¨®n. Y, casualidad o no, sus primeras apariciones sin hablar de su ¡°pecado¡± llegaron de la mano de TV3, cuando su director era Vicent Sanchis, ex miembro de la Fundaci¨®n Catalu?a Oberta, pr¨®xima a Converg¨¨ncia. Fue en un programa sobre cooperaci¨®n internacional en enero de 2020. Luego, el 4 de febrero, opin¨® tambi¨¦n en la televisi¨®n catalana sobre Mossos, luces y sombras. Algunos entrevistados hicieron constar su protesta por la aparici¨®n del evasor confeso, seg¨²n un r¨®tulo que apareci¨® al final del reportaje. En primavera de ese a?o subi¨® al Tagamanent en compa?¨ªa de Marta Ferrusola, ¡°la madre superiora¡±, seg¨²n la jerga empleada por la familia Pujol. Desde lo alto de esa colina del Montseny reforz¨® su teleol¨®gica misi¨®n de recuperar el honor perdido por mucho que se considere un pecador d¨¦bil en la observancia de las virtudes teologales.
Ferrusola ¡ªque falleci¨® el pasado 8 de julio¡ª ser¨ªa diagnosticada de demencia sobrevenida unos meses despu¨¦s. En junio de 2021 se public¨® Entre el dolor y la esperanza, en el que el periodista Vicen? Villatoro ¡ªexmiembro de la fundaci¨®n Centro de Estudios Jordi Pujol y ex diputado de CiU¡ª entrevistaba con guante blanco al expresidente. La s¨ªntesis del libro encara la redenci¨®n para pasar a la historia con honor. El expresident ¡ªque supervis¨® y autoriz¨® el texto, como le ha gustado hacer siempre, pues no se f¨ªa de los periodistas¡ª no asisti¨® a la presentaci¨®n del libro ¡°por su avanzada edad y porque no le parec¨ªa oportuno exponerse¡±, seg¨²n explic¨® el presidente de Edicions 62, Josep Ramoneda.
Aunque el texto no tuvo la repercusi¨®n apetecida por el evasor confeso, todo empez¨® a fluir a su favor con mayor rapidez. Mesa redonda con los expresidentes de la Generalitat (febrero de 2022), disertaci¨®n sobre la agricultura en sus a?os de Gobierno (1980-2003) y entrevista en SER Catalunya: ¡°Me duele que me llamen corrupto. Ni yo ni en general mis hijos hemos prevaricado¡±. Pujol verbalizaba por vez primera la inocencia sobre ¡°su problema¡±. Iba lanzado y ni el ictus que sufri¨® despu¨¦s de la Diada ¡ªel 12 de septiembre del 2022¡ª logr¨® frenar su participaci¨®n en actos.
En 2023 continu¨® el crescendo. En febrero asisti¨® entre aplausos a la presentaci¨®n de la candidatura de Xavier Trias a la alcald¨ªa de Barcelona y el 8 de ese mes particip¨® en la presentaci¨®n de la reedici¨®n de su gran obra: Des dels turons a l¡¯altra banda del riu, sus escritos de entre 1961-1962 en la c¨¢rcel de Torrero, donde estuvo internado por redactar un panfleto contra Franco. En el nuevo lanzamiento de su ensayo, entre fotos y dedicatorias de libros, volvi¨® a hacer hincapi¨¦ en esa esperanza que necesitan tanto Catalu?a como ¨¦l mismo. Jaleado desacomplejadamente por el viejo-nuevo mundo convergente, Pujol y los suyos han venido compartiendo la idea de que la culpa ¡ªel ¡°pecado¡±¡ª no puede emborronar su acci¨®n de gobierno.
Y este 2024 ha sido el del soft landing definitivo. Pidi¨® el voto para Carles Puigdemont en las pasadas elecciones auton¨®micas. ¡°Rotundamente votar¨¦ Junts. Y votar¨¦ a Puigdemont¡± (12 de mayo). El hombre a quien la edad imped¨ªa en 2021 asistir a la presentaci¨®n de un libro, resurg¨ªa de sus cenizas en 2024 y le¨ªa de pie en una cena con militantes su adhesi¨®n a Junts. Hace unos d¨ªas ¡ªcasi en v¨ªsperas de los 10 a?os de su confesi¨®n¡ª declar¨® su intenci¨®n de afiliarse al partido.
A la espera que se celebre el juicio, Pujol intenta a contrarreloj que la idea de su restituci¨®n se extienda como una mancha de aceite. De acuerdo con su libro de cabecera, Des dels turons, ¨¦l se reivindica como ¡°hombre hist¨®rico¡±: aquel patriota que lucha por su pa¨ªs. Deja, no obstante, sin respuesta la pregunta de c¨®mo ha podido convivir y dejar campar a sus anchas a tantos ¡°hombres-zorro¡±, aquellos que, seg¨²n ¨¦l, tienen el dinero y los negocios como norte. Ah¨ª quiz¨¢s adem¨¢s de sestear las virtudes teologales tambi¨¦n lo hicieron algunas laicas nociones elementales de ¨¦tica.
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