Abascal regala a Feij¨®o el voto de sus 33 diputados para evitar que S¨¢nchez sea investido con ¡°los enemigos de Espa?a¡±

Vox ha solemnizado este domingo lo que sus dirigentes ven¨ªan sugiriendo en los ¨²ltimos d¨ªas: que ofrece al l¨ªder del PP, Alberto N¨²?ez Feij¨®o, los votos de sus 33 diputados en el Congreso para que sea investido presidente del Gobierno sin exigir nada a cambio. El partido ultra ha hecho expl¨ªcita esta oferta a trav¨¦s de un comunicado en el que justifica regalar sus votos al PP para evitar que Pedro S¨¢nchez sea investido ¡°de la mano de todos los enemigos de Espa?a¡±.

¡°Los 33 diputados de Vox apoyar¨ªan una mayor¨ªa constitucional en la C¨¢mara baja que permita formar un Gobierno que evite dichas amenazas. Vox no ser¨¢ la excusa de nadie ni el impedimento para evitar un Gobierno de quienes pretenden destruir los fundamentos de la Constituci¨®n¡±, proclama el comunicado.

Tras las elecciones del 23-J, el l¨ªder ultra, Santiago Abascal, culp¨® a Feij¨®o de que la suma de PP y su partido no hubiera conseguido la mayor¨ªa absoluta y achac¨® su fiasco electoral (Vox perdi¨® 19 de sus 52 esca?os) a la desmovilizaci¨®n del electorado de la derecha provocada por el triunfalismo del l¨ªder popular y al ¡°blanqueamiento¡± del PSOE con sus ¡°permanentes ofertas de pacto¡±. Abascal se mostr¨® dispuesto a apoyar la investidura de Feij¨®o, pero le puso una condici¨®n imposible: que convenciera a cuatro o cinco diputados socialistas para que lo apoyaran. Adem¨¢s, dej¨® claro que Vox nunca sumar¨ªa sus votos a una investidura de la que formara parte el PNV, descartando as¨ª la ¨²nica f¨®rmula aritm¨¦tica que podr¨ªa dar la victoria a Feij¨®o.

Tras la entrevista privada que Abascal y Feij¨®o mantuvieron a finales de julio, y que se conoci¨® una semana despu¨¦s, el l¨ªder de Vox cambi¨® su discurso y afirm¨® que su partido no ser¨ªa ¡°un obst¨¢culo para evitar un Gobierno de destrucci¨®n nacional¡±, sin a?adir condiciones ni coletillas. Se trata, en realidad, de un brindis al sol, ya que el PNV ha dejado claro que no apoyar¨¢ la investidura de Feij¨®o y no es previsible que ning¨²n diputado socialista rompa la disciplina de voto.

¡°Si Feij¨®o tuviera alguna posibilidad de ser investido, entonces Vox s¨ª pondr¨ªa condiciones; entre otras, entrar en el Gobierno, como en Castilla y Le¨®n, Comunidad Valenciana, Extremadura y Arag¨®n¡±, admiten fuentes cercanas al partido ultra. De hecho, el solemne anuncio de que Vox regala a Abascal sus 33 diputados se produce 48 horas despu¨¦s de que ambos partidos hayan firmado el pacto para formar un Gobierno de coalici¨®n en Arag¨®n y mientras mantienen el pulso, con amenaza de repetici¨®n electoral incluida, sobre el Gobierno de Murcia.

Aunque no tenga consecuencias pr¨¢cticas, el ofrecimiento gratuito de los 33 votos de Vox para la investidura de Feij¨®o sella el pacto entre los dos partidos y abre la puerta a que ambos sumen fuerzas para evitar que la izquierda tenga mayor¨ªa en la Mesa del Congreso de los Diputados, que se constituye el pr¨®ximo 17, forjando as¨ª un frente com¨²n de la derecha y la extrema derecha para la legislatura que va a comenzar.

El presidente de los populares, Alberto N¨²?ez Feij¨®o, se ha apresurado a saludar el ofrecimiento de los votos de Vox a su investidura como ¡°un avance en la direcci¨®n de reconocer los resultados electorales y en el ¨¢mbito del constitucionalismo¡±. Feij¨®o, que ha participado en la fiesta del vino Albari?o en Cambados (Pontevedra), ha apostado por un Gobierno en solitario del PP basado en un acuerdo amplio y constitucional¡±, frente a un ¡°Gobierno de 24 partidos¡±, como ha calificado a un eventual Ejecutivo de Pedro S¨¢nchez, o al bloqueo y la repetici¨®n de elecciones.

Las palabras de Feij¨®o suponen un gui?o a Vox, un partido del que dijo durante la campa?a que era un socio ¡°no fiable¡± y al que ahora presenta como parte del ¡°constitucionalismo¡±. En realidad, Vox es un partido constitucional, puesto que dice acatar la Constituci¨®n, pero no constitucionalista, pues no comparte algunos de sus postulados b¨¢sicos: por ejemplo, para el partido ultra la soberan¨ªa no reside en el pueblo espa?ol sino en la naci¨®n espa?ola.