Joan Rib¨®: ¡°Me met¨ª en pol¨ªtica por un planteamiento religioso¡±

Joan Rib¨® (Manresa, 75 a?os) est¨¢ encantado de que su nieta le valore m¨¢s que nunca por sus v¨ªdeos en TikTok y elogia el trabajo de su equipo para que, a su edad, se haya convertido en un referente pol¨ªtico en las redes sociales en Valencia. Aspira a un tercer mandado al frente del Ayuntamiento de la ciudad por la candidatura de Comprom¨ªs. Lejos queda ya la hernia discal que le hizo replantearse su futuro hace un a?o y medio y m¨¢s lejos a¨²n sus lecturas de Bakunin. Ahora, aboga por las revoluciones ¡°que se hacen en bicicleta¡±.

Pregunta. Ha asistido por primera vez en ocho a?os al popular traslado de la Mare de D¨¦u. ?La proximidad de las elecciones lo aconsejaba?

Respuesta. En primer lugar, los centenarios [de la coronaci¨®n de la virgen que se celebr¨® el s¨¢bado] no son cada ocho a?os. Era un acto importante. Y al de ayer [por el domingo] fui porque este a?o he estado con las fiestas de bienvenida, que algunos llaman bautizos laicos, y en el acto del final del ramad¨¢n, y quer¨ªa poner de manifiesto que en esta casa todo el mundo tiene un sitio.

P. ?No le atrajo con anterioridad esa lectura de la izquierda cat¨®lica que reivindica la Mare de D¨¦u dels Innocents, Folls i Desemparats por ser la protectora de los enfermos mentales, de los indigentes, de los m¨¢s vulnerables?

R. Est¨¢ muy bien reivindicar ese lado social. Estoy seguro de que al papa actual le encantar¨ªa.

P. Usted empez¨® en los movimientos cat¨®licos de base, ?no?

R. Completamente. Estuve trabajando con Cristianos por el socialismo, con los curas obreros.

P. ?Es creyente?

R. Tuve un problema serio con la Iglesia cat¨®lica. El papa Woytila me ech¨®, cuando no quiso bendecir a los curas sandinistas y, a la semana siguiente, bendijo a Pinochet.

P. ?Qu¨¦ opina de la actual deriva de Nicaragua, presidida por el antiguo l¨ªder sandinista, Daniel Ortega?

R. Una perversi¨®n, una dictadura. Me da mucha pena.

P. ?Por qu¨¦ y c¨®mo se meti¨® en pol¨ªtica?

R. Me met¨ª en pol¨ªtica como consecuencia de un planteamiento religioso. Mi familia es profundamente religiosa. Y mi entrada estaba vinculada al concilio Vaticano II, a los sacerdotes obreros, a la teolog¨ªa de la liberaci¨®n¡­

P. ?Y su militancia en el PCE?

R. Antes estuve vinculado a movimientos anarcosindicalistas, me cost¨® mucho entrar en el PCE. No entr¨¦ hasta la declaraci¨®n de la Junta democr¨¢tica. Hab¨ªa le¨ªdo a Bakunin, Trotski, Rosa de Luxemburgo¡­

P. ?Se ha moderado mucho ideol¨®gicamente?

R. Me he dado cuenta de que realmente la sociedad ha cambiado mucho. La experiencia de la revoluci¨®n rusa fue muy importante, pero el final es muy triste. Para m¨ª, ahora la revoluci¨®n se hace en bicicleta. No hay que correr mucho. La reciente experiencia chilena es muy gr¨¢fica. Hay que medir mucho y ser muy pedag¨®gico. Cuando planetas algo, la gente lo tiene que entender, aunque no sea todo el mundo. A veces si las cosas m¨¢s perfectas no las entiende mucha gente se pueden convertir en una regresi¨®n.

P. ?Cu¨¢l ser¨¢ su primera medida si vuelve a ser alcalde?

R. Por la vivienda p¨²blica, de un alquiler asequible. Estamos pendientes de la aprobaci¨®n definitiva de la ley para aportar medidas para parar la subida de los precios del alquiler, topar los apartamentos tur¨ªsticos y apostar por la colaboraci¨®n p¨²blico-privada.

P. ?Por qu¨¦ no lo ha hecho en estos ocho a?os? Solo han construido 14 viviendas p¨²bicas, seg¨²n la oposici¨®n.

R. Se ha construido m¨¢s, pero poco. La gravedad del problema ha aumentado conforme pasaba el tiempo. Dicen algunas revistas que Valencia es uno de los mejores sitios para vivir. La otra cara de la moneda de que vengan m¨¢s turistas o n¨®madas digitales es que la mitad de las viviendas son compradas por personas no residentes, seg¨²n los ¨²ltimos datos. Eso, junto a los apartamentos tur¨ªsticos, dispara los precios. Quien quer¨ªa alquilar un piso, ahora alquila una habitaci¨®n.

P. ?Crece la turismofobia?

R. Empieza a haber. Lo entiendo. Los comercios est¨¢n siendo copados por franquicias, los apartamentos tur¨ªsticos. No quiero que Valencia sea Venecia, ?msterdam ni Barcelona

P. No es comparable, ?no?

R. No, pero los datos de crecimiento tur¨ªstico son hist¨®ricos en Valencia. En este sentido, es fundamental una ciudad de hoteles, hay que controlar el apartamento tur¨ªstico.

P. Los empresarios, los aut¨®nomos, la oposici¨®n critican la lentitud del Ayuntamiento para conceder licencias.

R. No es lo mismo predicar que dar trigo. Cuando llegamos hab¨ªa en actividades un retraso de 7.600 expedientes, ahora hay menos de 3.000.

P. ?Y por qu¨¦ se ha extendido ese malestar?

R. Porque la gente tiene prisa.

P. Tambi¨¦n se critica que la ciudad est¨¢ sucia

R. No es cierto eso. Hay un dato: el informe de la OCU (Organizaci¨®n de Consumidores y Usuarios) nos indica que la ciudad est¨¢ mejorando. Valencia es la ciudad que tiene la mejor calificaci¨®n entre las grandes.

P. Toda la oposici¨®n se?ala el aumento de la inseguridad, de la tasa de criminalidad con datos, igual que ustedes lo rechazan esgrimiendo datos, ?a qui¨¦n debe creer el ciudadano?

R. Hay datos oficiales, del Ministerio de Interior. Lo que no se puede hacer es comparar la criminalidad con el a?o en que la gente estaba encerrada por la covid. Ha crecido la criminalidad s¨ª, pero junto con Zaragoza es la que menos ha crecido en toda Espa?a

P. En Ciutat Vella hay casi 100 solares, los mismos que hace ocho a?os¡­

R. Es un tema preocupante, hay que abordarlo e ir a un nuevo modelo. A veces no es f¨¢cil porque hay muchos propietarios. Tenemos que coger el toro por los cuernos.

P. El cambio en la presidencia del Puerto [Joan Calabuig por Aurelio Mart¨ªnez], ?puede acarrear que se elabore un nuevo informe de impacto ambiental, como usted pide?

R. El primer encuentro ha sido muy positivo y hemos coincidido en la voluntad de di¨¢logo y en la necesidad de una coordinaci¨®n y colaboraci¨®n entre la ciudad y el puerto. Uno de los asuntos que le traslad¨¦ fue precisamente el de la necesidad de una nueva declaraci¨®n de impacto ambiental para el proyecto de ampliaci¨®n que contemplara el impacto sobre las playas del sur, la Albufera, el paisaje y muy especialmente la movilidad. Y ¨¦l me traslad¨® la voluntad de estudiar esta demanda.

P. ?A qu¨¦ ciudad le gustar¨ªa que se pareciese Valencia?

R. A Viena, respecto a las viviendas p¨²blicas, porque tiene m¨¢s del 30%. En cuanto a sostenibilidad, Grenoble. Y me llam¨® mucho la atenci¨®n Vitoria. No me atrever¨ªa a decir una sola ciudad.

P. ?M¨¢laga le lleva delantera a Valencia como ciudad emergente y de moda?

R. M¨¢laga tiene muchos elementos, como los museos. Paco la Torre me parece un buen alcalde. Tengo una buena relaci¨®n con ¨¦l aunque sea del PP. Valencia tambi¨¦n tiene muchos elementos y muy potentes, como la innovaci¨®n.

P. ?Cu¨¢l ser¨ªa su lema para vender Valencia?

R. Quiero trabajar por una Valencia amable y sostenible.

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