S¨¢nchez aprieta a EH Bildu para que condene a ETA pero no cuestiona los acuerdos en el Congreso
Zapatero aplaude que Otxandiano pida perd¨®n a las v¨ªctimas, aunque siga sin denominar a la organizaci¨®n como ¡°banda terrorista¡± mientras el PP aprovecha para presionar a los socialistas para que rompan
La campa?a vasca tensa las costuras de la relaci¨®n entre el PSOE y Bildu, pero nada indica que vaya a romperlas. Los ¨²ltimos d¨ªas han servido para que todos los partidos aprovechen el hecho de que Pello Otxandiano, candidato de EH Bildu, se niega a llamar a ETA ¡°banda terrorista¡±, para intentar frenar el ascenso de este grupo en las encuestas. Y tambi¨¦n para que el PSE despeje cualquier duda que pudiera haber de la posibilidad de que fuera a gobernar con Bildu en Euskadi. En la c¨²pula del PSOE y del Gobierno lo tienen claro: no gobernar¨¢n con Bildu en esta comunidad, donde siguen apostando por el pacto con el PNV, pero tampoco van a renunciar a los imprescindibles cinco esca?os de Bildu en el Congreso. Una cosa es rechazar la posici¨®n de Bildu sobre ETA y su historia criminal, y otra no negociar con ellos leyes sociales como la vivienda, la subida de las pensiones, del salario m¨ªnimo, explican los socialistas en p¨²blico y en privado. Y as¨ª lo apunt¨® de forma rotunda Pedro S¨¢nchez eset jueves desde Bruselas.
La situaci¨®n es similar a la que se vivi¨® en las elecciones municipales de 2023: S¨¢nchez, desde la Casa Blanca, en Washington, justo despu¨¦s de reunirse con el presidente de EE UU, Joe Biden, reproch¨® con dureza a Bildu que hubiera colocado a siete terroristas con delitos de sangre en las listas municipales ¡ªalgo que finalmente los abertzales rectificaron¡ª, pero mantuvo la relaci¨®n con este grupo para aprobar normas en el Congreso, cont¨® con sus votos en la investidura e incluso les permiti¨® gobernar en Pamplona con los votos del PSN, que sin embargo no entr¨® en el Gobierno municipal. El salto de gobernar con Bildu a¨²n parece lejano y episodios como el de esta semana lo retrasan a¨²n m¨¢s. De nuevo, como en 2023, y en plena campa?a, S¨¢nchez y su equipo vuelven a mostrar una evidente distancia con Bildu y exigen una rectificaci¨®n, pero no llegan al punto que les exige el PP, esto es, la ruptura total.
Desde Bruselas, S¨¢nchez fue muy claro a la hora de apretar a Bildu, especialmente a Sortu, el principal partido de la coalici¨®n ¡ªque deriva de Batasuna y donde est¨¢n los dirigentes que nunca condenaron el terrorismo de ETA¡ª, liderados por Arnaldo Otegi, para que rompa de una vez con ese pasado, condene el terrorismo y ¡°llame a las cosas por su nombre¡±. Al presidente le preguntaron si eran suficientes las excusas de Otxandiano, que pidi¨® perd¨®n si hab¨ªa ofendido a las v¨ªctimas, pero sigue neg¨¢ndose a llamar a ETA ¡°banda terrorista¡±. ¡°Evidentemente no¡± contest¨® el presidente.
S¨¢nchez, que ya ten¨ªa presi¨®n del PP, que est¨¢ aprovechando esta pol¨¦mica para recuperar la campa?a de las elecciones municipales de 2023, en las que centr¨® toda la estrategia en acorralar a los socialistas por sus pactos con Bildu, aprovech¨® la misma respuesta para criticar tanto a los abertzales como a los populares, record¨¢ndoles que Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar lleg¨® a llamar ¡°movimiento de liberaci¨®n nacional vasco¡± a la banda cuando estaba negociando con ellos desde La Moncloa. ¡°A las cosas hay que llamarlas por su nombre, ETA no fue una banda armada, ni tampoco un movimiento de liberaci¨®n nacional como dijo Aznar en su momento. Fue una banda terrorista derrotada por la democracia espa?ola¡±, arranc¨® el presidente, que tambi¨¦n reivindic¨® la historia del PSOE precisamente como respuesta al PP. ¡°Hace m¨¢s de 10 a?os que ETA no existe. Fue derrotada gracias a la unidad de todas las fuerzas y del conjunto de las sociedad vasca y espa?ola con un acuerdo [el pacto antiterrorista] impulsado por cierto por un ex presidente del Gobierno, entonces jefe de la oposici¨®n, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, y luego con ¨¦l de presidente, con Alfredo P¨¦rez Rubalcaba como ministro del Interior y con Patxi L¨®pez como lehendakari, esa tambi¨¦n es la contribuci¨®n del PSOE¡±.
Mientras S¨¢nchez cargaba contra Bildu, Zapatero valoraba la rectificaci¨®n de Otxandiano. ¡°Pedir perd¨®n, reconocer el dolor y que faltan pasos por asumir es una rectificaci¨®n necesaria y positiva. La paz debe ser lo m¨¢s aut¨¦ntica posible¡±, se?alaba el expresidente a EL PA?S. Zapatero ha sido siempre uno de los grandes defensores del acercamiento a Bildu y sobre todo de contar con sus votos para sacar adelante reformas. En una entrevista en EL PA?S la semana pasada, se?alaba que ¡°el futuro dir¨¢¡± si el PSE llega alg¨²n d¨ªa a gobernar con Bildu, pero en cualquier caso ¡°la democracia puede sentirse satisfecha consigo misma por haber derrotado a la violencia pol¨ªtica y por haber permitido la participaci¨®n de los que han cuestionado nuestra democracia¡±.
El mensaje de fondo que va calando, y que dejan estas elecciones vascas de forma clara, es que mientras Bildu no d¨¦ m¨¢s pasos, y ni siquiera sea capaz de llamar a ETA banda terrorista, como se ha visto con Otxandiano, es muy dif¨ªcil pensar en un gobierno conjunto con el PSE o con el PSN, no solo en las autonom¨ªas sino en los ayuntamientos. Fuentes de Bildu se?alan que ese paso puede llegar en el futuro, pero en Sortu a¨²n pesan los presos de ETA y el miedo a que se pudiera producir una escisi¨®n que hasta ahora se ha evitado, al contrario de lo que ha sucedido en otros procesos de final de la violencia.
Pero esta distancia que marca el PSOE, y que reforz¨® S¨¢nchez, no implica que no pueda haber acuerdos para sacar adelante votaciones o incluso, el salto m¨¢s fuerte hasta ahora, que con los votos del PSN se permita que Bildu se haga con Pamplona. En este dif¨ªcil equilibrio se mueve la estrategia dirigida desde La Moncloa. Desde Bruselas S¨¢nchez trat¨® de justificarla como algo que ya estaba fijado en la campa?a de las elecciones de 2023, y por tanto sin enga?os a nadie: ¡°Ya lo dije el 23 de julio, nosotros para para aprobar la revaloraci¨®n de las pensiones, o la subida del SMI, la gratuidad del transporte p¨²blico, vamos a hablar con todas las formaciones pol¨ªticas. Somos un gobierno de coalici¨®n formado por PSOE y Sumar, vamos al Congreso donde estamos en minor¨ªa y hablamos con todos salvo con Vox para acordar medidas que benefician a la mayor¨ªa del pa¨ªs¡±. La relaci¨®n con Bildu, que dirige sobre todo Santos Cerd¨¢n, el secretario de organizaci¨®n, se mantiene igual, pero con esta dura llamada de atenci¨®n en plena campa?a para diferenciarse de posiciones inasumibles para el PSOE.
El lunes, cuando pasen las elecciones vascas, los n¨²meros en el Congreso seguir¨¢n siendo los mismos. Y Bildu seguir¨¢ siendo imprescindible. Las fuentes de este grupo consultadas insisten en que la apuesta por apoyar a S¨¢nchez es de fondo, sobre todo para sacar adelante medidas sociales y evitar un gobierno del PP y Vox, as¨ª que no se presumen cambios por ninguno de los dos lados.
Pero el PP y Vox s¨ª han visto un espacio abierto para recuperar uno de los elementos centrales del ataque al PSOE, centrado alrededor del lema que triunf¨® en el mundo conservador en 2023: ¡°?Que te vote Txapote!¡±. Feij¨®o se?al¨® en San Sebasti¨¢n que ¡°las pol¨ªticas del PNV y el PSOE son una f¨¢brica de votantes de Bildu¡±. Feij¨®o insisti¨® en el ¡°rechazo¡± del PP a que Bildu ¡°est¨¦ en las instituciones mientras no tenga clara la diferencia entre los que matan y los que mueren¡±. El l¨ªder del PP carg¨® contra S¨¢nchez, ¡°el primer presidente que lo es con los votos de Bildu¡±. ¡°Que el PSOE se r¨ªa del pueblo vasco e intente enga?arle diciendo que hay que romper con Bildu cuando gracias a este partido tenemos a un presidente del Gobierno es una falta de respeto al pueblo vasco¡±, remat¨®. El PSOE ha dejado ese campo abierto al PP con sus cr¨ªticas a Bildu, pero en La Moncloa creen que ten¨ªan que dejar muy claras sus diferencias con algo tan duro para las v¨ªctimas como negar que ETA fue una banda terrorista. Las posiciones est¨¢n fijadas, y todos conocen los l¨ªmites. El lunes no se romper¨¢ nada. Pero Bildu ya sabe que no ser¨¢ tan f¨¢cil pasar p¨¢gina y mucho menos llegar al poder sin dar los pasos que todos los dem¨¢s grupos le est¨¢n exigiendo.
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