¡°Aprovecho para hacer cosas que no hac¨ªa por falta de tiempo¡±
As¨ª vive el aislamiento el encargado de la Chocolater¨ªa San Gin¨¦s, cerrada como el resto de establecimientos de la capital
La ¨²ltima vez que Pablo S¨¢nchez (Madrid, 34 a?os) habl¨® con EL PA?S era verano y la Chocolater¨ªa San Gin¨¦s ¨Cde la que era y es encargado¨C ¡°estaba abarrotada, como siempre¡±. Meses despu¨¦s, la estampa es otra: el negocio cerrado y S¨¢nchez en casa, como casi el resto de Espa?a debido a la crisis sanitaria y la declaraci¨®n del estado de alarma. ¡°De momento lo llevo bien, estoy aprovechando para hacer cosas en casa que antes, sin apenas tiempo para parar por aqu¨ª, no pod¨ªa hacer¡±, cuenta por tel¨¦fono el empleado de la popular chocolater¨ªa madrile?a, que durante el primer de fin de semana de aislamiento mantuvo los pedidos a domicilio. El local de San Gin¨¦s en pleno coraz¨®n de la capital, cerca de la Plaza Mayor, llevaba una d¨¦cada abriendo las 24 horas.
En su caso, no hay posibilidad de teletrabajo.
No, la empresa ha decidido acogerse al ERTE (Expediente de Regulaci¨®n Temporal de Empleo) y estamos todos en casa. La ventaja de San Gin¨¦s es que no es una empresa peque?a y tiene cierta solvencia para afrontar un periodo de inactividad, una especie de fondo econ¨®mico que se hab¨ªa creado para posibles situaciones en las que el turismo, uno de nuestros principales pilares, descendiese.
?C¨®mo est¨¢ viviendo el aislamiento?
No lo llevo mal, me considero una persona bastante adaptable y tengo una situaci¨®n m¨¢s f¨¢cil que otros: no tengo hijos ni otras personas a las que tenga que atender.
?Tiene mascota?
Pues mira siempre he sido muy perruno y anteriormente he tenido varios, pero justo en este momento de la vida no tengo y lo echo de menos. Pero m¨¢s que por sacarlo a pasear, es por la compa?¨ªa que te hacen. Aunque tengo compa?eros de piso y me llevo bien con ellos, pero tener una mascota ser¨ªa diferente.
?A qu¨¦ se est¨¢ dedicando estos d¨ªas?
Pues a limpiar la casa en profundidad, ventanas, partes en las que tienes que retirar muebles¡ ten¨ªa pendiente colocar unos estantes en la pared y, por suerte, ya ten¨ªa comprado todo lo que necesitaba, as¨ª que tambi¨¦n lo har¨¦.
?Le gusta el bricolaje?
Bueno, no me disgusta, y prefiero aprovechar esta situaci¨®n para hacer algo que antes no pod¨ªa por falta de tiempo.
?Vive solo?
Comparto piso en el barrio de San Crist¨®bal, en Villaverde.
?Y c¨®mo est¨¢n viviendo la situaci¨®n en el vecindario?
Creo que, como en todas partes, la gente est¨¢ bastante concienciada, no se ve un alma por la calle. Aqu¨ª est¨¢ todo muy tranquilo, no he visto que haya tenido que venir la polic¨ªa o la ambulancia por ning¨²n incidente. Y las veces que he bajado ¨²ltimamente al supermercado ya no se ven esas aglomeraciones de gente de la semana pasada con la locura del papel higi¨¦nico que no entiendo muy bien a qu¨¦ se debe.
?No hay escasez de productos en el supermercado al que va?
No tanto como al principio. Habl¨¦ con el gerente, con el que tengo confianza, y me dijo que aquello se debi¨® a una falta de previsi¨®n: nadie se esperaba que la gente acudiese en masa a comprar y se quedaron sin stock de algunos productos, pero ya no ser¨¢ un problema. Yo no estoy preocupado con eso.
?Habla m¨¢s asiduamente con su familia que antes?
Claro, en una situaci¨®n as¨ª hablas m¨¢s, casi a diario. La verdad es que tenemos suerte de que esta crisis nos haya pillado ahora porque el aislamiento no es total, podemos hablar por tel¨¦fono, utilizar Internet¡ Vamos, que no tendr¨ªa que ser un grave problema, aunque entiendo que no todo el mundo lo pueda llevar de la misma forma.
?C¨®mo cree que afectar¨¢ esto a San Gin¨¦s cuando todo vuelva a la normalidad?
Hay una cosa a tener en cuenta en esta crisis y es que est¨¢ afectando de manera global. Es decir, si solo ocurriera en Espa?a, tendr¨ªamos un problema con respecto al turismo, por ejemplo, porque la gente no vendr¨ªa aqu¨ª y se ir¨ªa a otro lado. Pero dada esta situaci¨®n, el coronavirus se ir¨¢ erradicando poco a poco y m¨¢s o menos homog¨¦neamente en todo el mundo y con ello recobraremos la normalidad y la gente volver¨¢ a visitarnos.
Se le ve muy optimista¡
Creo que esta situaci¨®n nos est¨¢ golpeando, pero tambi¨¦n nos est¨¢ ense?ando mucho, vamos a aprender a valorar mucho m¨¢s las cosas.
Desde la ventana de Pablo de S¨¢nchez
Bloques de viviendas, establecimientos con el cierre echado, un parque infantil precintado y una parada de metro acostumbrada al trasiego de multitud de personas por la que ahora apenas pasa alg¨²n alma que tiene que ir a trabajar. Esto es lo que ve S¨¢nchez si echa un vistazo desde su ventana. Ante este panorama, aconseja ¡°no pensar mucho en la situaci¨®n¡±. ¡°Tom¨¦monoslo como una oportunidad para ponernos al d¨ªa con cosas que ten¨ªamos pendientes¡±.
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