Dramaturgos en combate
El Torneo de Dramaturgia re¨²ne a escritores teatrales contempor¨¢neos en el Teatro Espa?ol
Hay un ring de boxeo. Se oyen alegres rumbas macarrillas de Las Grecas o de Tijeritas. F¨¦lix Estaire, dramaturgo, a modo de jefe de pista, ataviado con una casaca, recibe al p¨²blico y presenta con algarab¨ªa el espect¨¢culo. M¨¢s que la sala Margarita Xirgu del solemne Teatro Espa?ol esto parece un circo ambulante o una feria de barrio. Es, en realidad, la quinta edici¨®n del Torneo de Dramaturgia.
En este torneo se enfrentan los textos de varios escritores teatrales. En esta jornada compiten, en singular lid, las obras de Carolina ?frica y Carol L¨®pez. Estas son las condiciones: las obras deben durar menos de 40 minutos y tener solo dos personajes. Los actores har¨¢n ante el p¨²blico una lectura dramatizada despu¨¦s de solo tres horas de ensayo esa misma ma?ana. Antes de ese ensayo no conoc¨ªan los textos que, adem¨¢s, se han escrito ex profeso para este evento. ¡°El torneo tiene una magia especial, porque se requiere una participaci¨®n activa del p¨²blico¡±, explica Miguel Cuerdo, productor de LAZONA, art¨ªfices del torneo en Madrid, ¡°no se trata de venir a sentarse y escuchar un texto, sino que despu¨¦s tendr¨¢ que votar por el texto que consideren ganador¡±.
La idea del torneo fue del dramaturgo Jordi Casanovas, que lo cre¨® para el festival Temporada Alta de Girona; hoy se celebra en diferentes puntos de Espa?a. Recuerda otras competiciones similares en otros ¨¢mbitos art¨ªsticos, como las cl¨¢sicas peleas de gallos del rap, el Letring Catch de narradores o las sesiones de Poetry Slam de la poes¨ªa. Participan en esta edici¨®n ocho dramaturgos espa?oles contempor¨¢neos: Esther Carrodeguas, ??igo Guardamino, Julio Escalada, Juli Disla, Albert Boronat e Irma Correa, adem¨¢s de las dos ya citadas, que competir¨¢n en tres rondas: cuartos de final, semifinales y final. Los ganadores de anteriores ediciones fueron Celia Mor¨¢n, Juana Escabias, Claudia Ced¨® e Ignacio del Moral.
Comienzan las hostilidades (por decirlo de alguna manera) y se suceden las dos lecturas dramatizadas. Una de ellas, titulada Filomena y ejecutada por Alba Alonso y Miguel ?ngel Amor, trata, con humor y cierta poes¨ªa, sobre lo que sucede cuando intersecan la vida cotidiana y los fen¨®menos atmosf¨¦ricos. O m¨¢s concretamente: un parto en un hospital aislado por las nieves de la reciente borrasca Filomena. La otra, Tres asaltos, ejecutada por Mar¨ªa Besant y Pepe Nufr¨ªo, es una comedia muy inc¨®moda sobre las formas de ver los abusos sexuales. Lo importante del asunto es que el p¨²blico, a la vez jurado, no sabe qu¨¦ obra sale de la pluma de ?frica y cu¨¢l de la de L¨®pez. Es un experimento ciego.
El torneo tambi¨¦n es una manera amable de acercar el teatro a nuevos p¨²blicos no habituados.
Uno de los objetivos del torneo es apoyar a la dramaturgia espa?ola contempor¨¢nea, esos autores j¨®venes (en el sentido amplio de la palabra) y muy vivos que conforman una nutrida cantera. ¡°Aunque se le da mucho ¨¦nfasis, aqu¨ª lo importante no es la competici¨®n¡±, dice Cuerdo, ¡°es m¨¢s bien un juego, una fiesta, una excusa para escribir y llevar a escena nuevos textos. Aqu¨ª muchos autores se conocen y acaban colaborando. Se dan a conocer al p¨²blico, o incluso a promotores y programadores con los que pueden acabar trabajando¡±. En efecto, algunas de las obras nacidas en el torneo se han estrenado con todas las de la ley. Por ejemplo, Espejo de v¨ªctima, de Ignacio del Moral, se pudo ver en el Centro Dram¨¢tico Nacional. Otros autores estrenados han sido Eva Redondo o Jan Vilanova. ¡°Esto es importante: no olvidemos que un dramaturgo trabaja en principio gratis, es decir, no obtiene beneficio hasta que estrena¡±, se?ala el productor.
El torneo tambi¨¦n es una manera amable de acercar el teatro a nuevos p¨²blicos no habituados. Algo necesario, ya que, como cuenta Cuerdo, la pandemia ha reducido los aforos, ha acabado con el p¨²blico flotante que ven¨ªa a los teatros desde fuera de Madrid y tambi¨¦n ha reducido el p¨²blico local, que en cierta medida ha dejado de acudir por miedo al virus (el p¨²blico teatral, adem¨¢s, no se caracteriza por su juventud). Si el teatro es un sector por lo general dif¨ªcil y heroico en cualquier coyuntura, la superposici¨®n de crisis puede llevar al cierre de salas y compa?¨ªas. ¡°Esto es una mierda¡±, sentencia el productor.
Despu¨¦s de las obras, se reparten las papeletas para que vote el respetable. Con la ayuda de un amable notario del p¨²blico, se hace el recuento. Llega el momento de la verdad. Estaire, maestro de ceremonias, coge a las dos contendientes por las mu?ecas. Hay nervios, silencio masticable. Y levanta una. La ganadora de esta eliminatoria es Filomena cuya autora, seg¨²n se revela ahora, es Carolina ?frica. ?Llegar¨¢ a la final llena de moratones teatrales? Lo sabremos en las siguientes citas, hasta la gran final, el 22 de mayo, que tendr¨¢ lugar en la sala Max Aub de las Naves de Matadero.
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