Ni gatos ni pasteles: el anestesista y el matem¨¢tico que arrasan en redes porque ayudan a entender la pandemia
El estad¨ªstico Javier ?lvarez y el m¨¦dico David Callejo han sumado miles de seguidores en el ¨²ltimo a?o y medio explicando la evoluci¨®n de la crisis sanitaria en Twitter e Instagram
Uno es matem¨¢tico, el otro anestesista. El primero, Javier ?lvarez, es profesor de Estad¨ªstica en Oviedo, pero es madrile?o del sur de la l¨ªnea verde de Metro. Naci¨® en 1989, hac¨ªa puzzles y c¨¢lculos con las matr¨ªculas de los coches y un profesor de su instituto de Carabanchel, en 3? de ESO, le hizo ¡°flipar¡± con la forma de ense?ar los n¨²meros. El segundo cumpli¨® 34 el 22 de julio, es David Callejo, hijo, nieto y bisnieto de madrile?os, creci¨® en La Ventilla, en Tetu¨¢n, era pele¨®n y las extraescolares le serv¨ªan para desfogar. Ahora se pone el EPI en el Gregorio Mara?¨®n y en el San Jos¨¦, de Quir¨®n. Comparten algo que ha sido esencial, a¨²n lo es, durante la pandemia: la divulgaci¨®n sobre el virus en redes sociales. Los dos han visto c¨®mo sus cuentas en Twitter o Instagram sumaban seguidores con cada publicaci¨®n. Y detr¨¢s no hab¨ªa gatos ni bailes ni pasteles. Solo ciencia.
Las situaciones nuevas y por tanto desconocidas, la incertidumbre, tambi¨¦n la abundancia de informaci¨®n y, a veces, la falta de formaci¨®n o de tiempo para elegir fuentes fiables o los bulos son algunas de las cuestiones que subyacen a esta crisis sanitaria desde el principio. Seg¨²n se suced¨ªan las olas, se fue sumando la polarizaci¨®n y el ruido informativo, derivada en parte de la pol¨ªtica ¡ªpor los choques entre autonom¨ªas y Gobierno central y la politizaci¨®n de la pandemia, y m¨¢s en Madrid que en otros territorios¡ª, y de otros fen¨®menos: ideas conspirativas, desconfianza en las instituciones y en los avances cient¨ªficos o, en su extremo, el rechazo directo, como ocurre con los antivacunas.
En este contexto, aparecen personas como ?lvarez o Callejo, que no forman parte de ninguna organizaci¨®n, partido o administraci¨®n y que, en parte por ello, consiguen construir una comunidad de seguidores que conf¨ªan en la informaci¨®n que dan. Y que crece con el tiempo. El estad¨ªstico tiene 29.531 personas que le siguen en Twitter y 11.761 en Instagram. ¡°Cuando comenz¨® la pandemia mi cuenta era la de una persona normal, que igual ten¨ªa unos cientos¡±, cuenta por Zoom. La del m¨¦dico, en Instagram (no tiene cuenta activa en Twitter), part¨ªa de algunos m¨¢s. ¡°M¨¢s de 10.000, era conocida en el mundo m¨¦dico, pero normalmente explicaba para un p¨²blico m¨¢s especializado, personal sanitario, pero con la pandemia eso cambi¨®¡±, dice ?lvarez, al tel¨¦fono. Ahora tiene 251.816.
Si algo percibieron los dos cuando el virus lleg¨® y la poblaci¨®n tuvo que encerrarse en casa, fue la necesidad de la gente de entender lo que estaba ocurriendo y de qu¨¦ se hablaba cuando se hablaba de incidencia acumulada o Rt (la velocidad de transmisi¨®n del virus). ¡°El 11 de marzo, cuando llegu¨¦ a casa, grab¨¦ un v¨ªdeo en el que explicaba qu¨¦ eran las curvas y por qu¨¦ hab¨ªa que intentar aplanarlas y por qu¨¦ la gente ten¨ªa que quedarse en casa¡±, recuerda el anestesista. Aquel v¨ªdeo sum¨® m¨¢s de 3,7 millones de reproducciones y, con los meses, Callejo entr¨® a formar parte de la agencia BSE Talents: ¡°Aunque la divulgaci¨®n sigue siendo algo que hago en mi tiempo libre, busco el que puedo, pero mi trabajo es la Medicina¡±.
Comenzaron a hablar del virus de forma continua y seg¨²n el momento en el que se encontraba la epidemia. ¡°Sobre todo¡±, matiza el estad¨ªstico, ¡°percib¨ª que hab¨ªa muchas cosas interiorizadas por la gente que sabe del tema y que parecen obvias pero que la poblaci¨®n no conoce y no tiene por qu¨¦ conocer, como los modelos predictivos que se usan para calibrar lo que puede venir¡±. Se r¨ªe: ¡°A ver, hab¨ªa que explicar por qu¨¦ sube y por qu¨¦ bajan los contagios, y ya, con palabras simples¡±. Su comunidad es menor que la de Callejo, tambi¨¦n su ¨¢rea es m¨¢s ¡°dura¡±: ¡°A ver a cu¨¢ntas personas conoces que te digan que cu¨¢nto les gusta las matem¨¢ticas, pero cuando enganchas a la gente con cosas que le interesan es mucho m¨¢s f¨¢cil¡±. Dice que las cuestiones que tienen que ver con conflictos b¨¦licos ¡°arrasan¡±.
En aquel momento, y por la necesidad de comprender la realidad m¨¢s inmediata, los n¨²meros empezaron a interesar a casi cualquiera y ?lvarez empez¨® a buscar formas de contar ¡°m¨¢s visuales¡±. Aprendi¨® por su cuenta c¨®mo funcionaban programas como Adobe, Premier, After Effects o Illustrator. Se qued¨® con Illustrator: ¡°No soy profesional ni tengo idea alguna de dise?o aunque me gustar¨ªa, pero hice un esfuerzo porque me gustaba y porque quer¨ªa poder contar mejor y de otra manera sin usar ilustraciones y dise?os de otros. Hago lo que puedo y voy aprendiendo un poco m¨¢s cada d¨ªa¡±.
Una de sus publicaciones favoritas ¡ª¡±aunque no tuvo mucho ¨¦xito¡±, advierte¡ª es el de la matem¨¢tica Sophie Germain. ¡°Gracias a ella existe la Torre Eiffel, pero no lo voy a explicar, ya lo explico en el hilo¡±, bromea. Cuando lleg¨® verano de 2020, ?lvarez estaba ¡°harto¡± de la pandemia, ¡°como todo el mundo¡±: ¡°Y adem¨¢s se fue politizando. Como yo funciono m¨¢s en Twitter, y en Twitter la gente va con los dientes fuera, se nota mucho m¨¢s cuando un tema se enreda con la pol¨ªtica y en Madrid todav¨ªa m¨¢s. Instagram es otra cosa, ah¨ª es todo flores¡±. Desde entonces intenta hablar m¨¢s de otras cuestiones, aunque las mezcle con el coronavirus de vez en cuando.
Callejo ha ido virando el mensaje seg¨²n avanzaba la crisis: confinamiento, curvas, capacidad de las unidades de cuidados intensivos, desescalada, aislamientos, contagios... Pero tambi¨¦n de un tiempo a esta parte incluye otras cuestiones. ¡°?ltimamente han surgido muchas preguntas sobre embarazos a ra¨ªz de si hab¨ªa o no que vacunar a las embarazadas, que por cierto, s¨ª¡±, dice. Pero no solo. Le preguntan desde qu¨¦ medicamentos se usan para anestesiar hasta si ¨¦l elegir¨ªa o no ser dormido para una gastroscopia.
?Mi admiraci¨®n al ver que[...]M. Le Blanc se metamorfosea en este personaje ilustre?
— ? Javi ?lvarez Li¨¦bana | Dados de Laplace (@DadosdeLaplace) September 13, 2020
Gauss acaba de descubrir que el matem¨¢tico que le salv¨® era...mujer
?Este hilo es la historia de SOPHIE GERMAIN, gracias a quien tenemos torre Eiffel ??#MatesEnDomingohttps://t.co/tqcyDdrU4N pic.twitter.com/CuXZjRJvn7
El matem¨¢tico y el sanitario no se conocen, pero coinciden en muchas partes de su discurso. Ambos creen que hab¨ªa una base de cultura cient¨ªfica poco s¨®lida. ¡°Hemos tenido una crisis sanitaria s¨²per importante que ha descubierto una gran crisis de educaci¨®n cient¨ªfica, a la que se suma una corriente negacionista que se deja enga?ar por argumentos que son f¨¢ciles de desmentir, hace falta explicar todo de forma clara y accesible¡±, dice Callejo. Eso, que en parte es trabajo de los medios de comunicaci¨®n, ¡°no siempre se ha hecho bien¡±, apuntan ambos. Aunque tambi¨¦n los dos matizan: ¡°Depende del medio¡±. Concuerdan en la fuerza del clickbait y lo que ello conlleva en titulares de peri¨®dicos o programas de televisi¨®n que llevan m¨¢s a ¡°la confusi¨®n¡± o ¡°el miedo¡± que al conocimiento.
La conclusi¨®n, que tiene que ver con el por qu¨¦ ellos sacan tiempo de sus respectivos trabajos para comunicar en redes sociales, es que ¡°hay que intentar que la gente conozca lo m¨¢s y lo mejor posible por qu¨¦ se toman las decisiones que se toman y qu¨¦ est¨¢ pasando. Conocer, tranquiliza y ayuda a que todo el mundo pueda actuar de acuerdo a lo que ocurre¡±, dice Callejo. Y ?lvarez, que tambi¨¦n comparte esa idea, a?ade algo a futuro: ¡°A todo el mundo le ha empezado a interesar la ciencia, la estad¨ªstica. Esto pasar¨¢ y espero que ese inter¨¦s no se vaya con ¨¦l, que este boom, que ha ayudado a la ciencia y a la poblaci¨®n, no sea un boom sino como algo que, como ya se ha visto, nos afecta de forma directa y es importante para todos¡±.
Suscr¨ªbete aqu¨ª a nuestra nueva newsletter sobre Madrid.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.