El evidente desgaste de Almeida
El alcalde de Madrid comparece este martes en un pleno extraordinario sobre el ¡®caso de las mascarillas¡¯, a petici¨®n de la oposici¨®n y en el peor momento de su mandato
Hay que pasar p¨¢gina cuanto antes: esa es la principal consigna del c¨ªrculo m¨¢s cercano que asesora a Jos¨¦ Luis Mart¨ªnez-Almeida. Pero ¨Dsiempre hay peros en el ala oeste de la pol¨ªtica¨D la misi¨®n se complica con el paso de los d¨ªas. El alcalde de Madrid cree que los medios de comunicaci¨®n llevan demasiadas jornadas narrando el caso de las mascarillas, el ¨²ltimo esc¨¢ndalo que hace tambalear los cimientos del Ayuntamiento de la capital de Espa?a con el principal regidor del PP en el centro de la diana. Fue un primo hermano suyo quien dio el tel¨¦fono de Elena Collado ¨Dla alto cargo del Consistorio que se encargaba de gestionar los contratos sanitarios¨D a los dos comisionistas. A Luis Medina, el hermano del actual duque de Feria e hijo de Naty Abascal, y a un amigo suyo, el empresario Alberto Luce?o. Los dos se llevaron una comisi¨®n de seis millones de euros sobre una compra de material sanitario que cost¨® cerca de 12 millones para las arcas municipales durante el pico de la primera ola de la pandemia, cuando fallec¨ªan en la capital centenares de madrile?os cada d¨ªa. Con el montante se compraron decenas de coches, relojes de alta gama, un piso de lujo en Madrid, seis noches de hotel en Marbella a 6.000 euros la noche, un velero...
La versi¨®n de Almeida es que ¨¦l no sab¨ªa nada de todo este asunto hasta hace solo unas semanas. Tambi¨¦n dijo que desconoc¨ªa que su pariente cercano dialogara por tel¨¦fono varias veces con la directora general de alcald¨ªa ¨Dy amiga suya desde hace m¨¢s de 20 a?os¨D, Matilde Garc¨ªa Duarte, para pedirle el contacto de la encargada de los contratos. ¡°No ten¨ªa ni idea de que mi primo hab¨ªa intervenido¡±, declar¨® el alcalde tras conocerse este esc¨¢ndalo. ¡°?Responsabilidad pol¨ªtica? No, hay que entender el contexto¡±, dijo otro d¨ªa. El caso est¨¢ ahora en los tribunales, sin ning¨²n miembro del Ayuntamiento investigado. Tampoco su familiar cercano. El juez ha retirado el pasaporte a los dos comisionistas.
Pero en el palacio de Cibeles se ha abierto una brecha m¨¢s y los mazos que golpean al PP se amontonan a menos de un a?o para las elecciones municipales. El foco del d¨ªa a d¨ªa se ha desvirtuado por completo. Por m¨¢s que Almeida inaugure obras, haga entrevistas a medios afines, acuda a eventos o anuncie peque?as reformas, el equipo del alcalde no logra marcar una agenda propia. Los esc¨¢ndalos se imponen sobre la gesti¨®n diaria. Nadie duda ya de que Almeida atraviesa ahora el peor momento de su mandato. ¡°El desgaste es evidente¡±, admite un alto cargo del Ayuntamiento.
¡°Todos los d¨ªas le preguntan por lo mismo¡±, a?ade uno de los colaboradores del regidor. Almeida considera que ya ha dado suficientes explicaciones, tanto del esc¨¢ndalo del intento de espionaje desde su propio partido a la presidenta regional Isabel D¨ªaz Ayuso a trav¨¦s de dos empresas municipales¨Dque termin¨® con la ca¨ªda de la anterior c¨²pula del PP y con la dimisi¨®n de su ¨ªntimo amigo y alto cargo del Ayuntamiento, ?ngel Carromero¨D, como del de las mascarillas.
La estrategia trazada desde el primer momento por el equipo de Almeida consist¨ªa en responder a todas las cuestiones, sin l¨ªmite de tiempo. El alcalde se desenvuelve como pez en el agua en este tipo de situaciones. Sin embargo, el pasado martes en el palacio de Cibeles se produjo una situaci¨®n in¨¦dita entre la vicealcaldesa, Bego?a Villac¨ªs, de Ciudadanos, y el propio regidor.
Rodeada de micr¨®fonos, la n¨²mero dos del Ayuntamiento atendi¨® a la prensa. Critic¨® que el alcalde hablara horas antes de una ¡°caza de brujas¡± al Consistorio por parte de la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n en el caso de las mascarillas. Villac¨ªs conf¨ªa plenamente en su alcalde, pero aqu¨ª la distancia entre ambos es evidente. ¡°No, no hay una caza de brujas. La justicia es m¨¢s independiente de lo que pensamos, m¨¢s all¨¢ de izquierdas o derechas¡±, record¨®. Al concluir, se gir¨®. Vio que Almeida bajaba las escaleras junto a su equipo. El alcalde y ella, con un desgaste pol¨ªtico evidente, evidencian sonrisas en p¨²blico y desavenencias en privado. Los dos coincid¨ªan de nuevo en un acto conjunto con un grupo de empresarios. La vicealcaldesa, al verle, le dijo: ¡°Te toca hablar a ti ahora¡±, mientras le indicaba con la mano izquierda el enjambre de micr¨®fonos de los periodistas.
Almeida, visiblemente inc¨®modo, contest¨®: ¡°Bueno, bueno, primero vamos al acto y luego ya hablamos¡±. Despu¨¦s, ya no hubo comparecencia. Un silencio que evidenciaba el cambio de rumbo interno de su equipo. En su lugar habl¨® la portavoz del Ayuntamiento, Inmaculada Sanz, del PP. Esta metamorfosis de caras a la hora de dialogar con la prensa fue un movimiento m¨¢s del c¨ªrculo m¨¢s cercano del alcalde, que cree que tantas comparecencias acaban por desgastar m¨¢s todav¨ªa al mandatario. Este martes, por ejemplo, habr¨¢ dos plenos en el mismo d¨ªa. Uno extraordinario y otro ordinario. As¨ª se evitan dos plenos en dos jornadas diferentes. Una manera de evitar posibles titulares negativos durante dos d¨ªas consecutivos: estrategias pol¨ªticas.
El pleno extraordinario se celebra a petici¨®n de la oposici¨®n. Ser¨¢ un monogr¨¢fico del esc¨¢ndalo de las mascarillas. Dar¨¢ comienzo a las nueve y cuarto de la ma?ana, con Almeida en el centro de la diana. Seg¨²n fuentes municipales, el alcalde hablar¨¢ ¡°mucho¡± del ¡°cinismo¡± de la izquierda durante su discurso. M¨¢s tarde, en el pleno ordinario que afecta a la pol¨ªtica municipal y a las cuestiones de ciudad, todo apunta a que el alcalde guardar¨¢ silencio. Ser¨¢n sus concejales quienes asuman los embistes del resto de grupos parlamentarios. Este a?o ha cambiado todo en la zona de mando del palacio de Cibeles. Por ahora, hablar mucho desgasta a Almeida. Un signo acorde con los nuevos tiempos pol¨ªticos del PP.
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