Esperanza Aguirre habla de ¡°la ni?a¡± para referirse a una profesional del programa Todo es mentira. Est¨¢ en directo y recuerda que ha enviado una foto a la productora porque quiere que la emitan. Es martes y acaba de arrancar un giro en la estrategia con la que el PP afronta el desastre causado por la l¨ªnea 7B del metro de Madrid en San Fernando de Henares (40.000 habitantes), donde la llegada del suburbano, impulsada en 2007 por la expresidenta, ha derivado en que m¨¢s de 150 vecinos hayan tenido que abandonar sus hogares.

¡°Fue la alcaldesa de entonces, Montserrat Mu?oz, de IU, la que decidi¨® y exigi¨® (...) que se cambiara el trazado (...) ?Y me echan la culpa a m¨ª!¡±, dice Aguirre, mientras se emite la foto de la corporaci¨®n municipal de la ¨¦poca celebrando la llegada de la tuneladora del metro. ¡°Fueron los ayuntamientos de la izquierda quienes insistieron en la ampliaci¨®n¡±, repite un d¨ªa despu¨¦s sobre Coslada y San Fernando Isabel D¨ªaz Ayuso. El intento coordinado de las dos baronesas para diluir la responsabilidad de la Comunidad pone en pie de guerra a los afectados y tambi¨¦n a los expol¨ªticos a los que ahora el PP quiere poner en la diana.

¡°Hay una sentencia de 2019 que dice que la Comunidad es la responsable. ?Qu¨¦ m¨¢s quieren?¡±, se queja por tel¨¦fono la exalcadesa de San Fernando. ¡°En el a?o 2006, la Comunidad plantea la ampliaci¨®n del metro desde la estaci¨®n de Jarama hasta el hospital del Henares, ya en Coslada. Esta ampliaci¨®n ni la pide, ni la conoce, ni la comparte, ni la quiere, San Fernando¡±, recuerda. ¡°En todo caso, el Ayuntamiento no tiene competencia ni para decidir el trazado, ni hace el proyecto, ni los estudios [previos del terreno], ni l¨ªcita la obra, ni contrata a la empresa¡±, a?ade.

¡°Que Aguirre y Ayuso hagan referencia a la responsabilidad de los ayuntamientos, cuando saben que es ninguna, pretende enfangar el asunto y distraer la atenci¨®n sobre el problema que sufren muchos vecinos, que no est¨¢n siendo atendidos como merecen por la Comunidad, y que siguen sin ver resuelto el problema de haberse quedado sin casa¡±, denuncia. Y afirma: ¡°Lo que dice Aguirre es mentira, se inventa que enviamos aquella foto como felicitaci¨®n de Navidad, porque est¨¢ acorralada y echa balones fuera. Es para desviar la atenci¨®n sobre su ineficacia¡±.

La sentencia de 2019 a la que hace referencia Mu?oz es taxativa. ¡°La causa del problema radic¨®, efectivamente, en el dise?o de la permeabilidad del pozo, cuya responsabilidad no puede atribuirse a Dragados, S.A. [la ejecutora de la obra] sino a Mintra [acr¨®nimo de Madrid Infraestructuras de Transporte, una empresa p¨²blica dependiente de la Comunidad] que supervis¨® y aprob¨® el modificado del proyecto que inclu¨ªa la ejecuci¨®n del pozo de bombeo como permeable, lo que se revel¨® como el defecto de proyecto determinante de la inundaci¨®n del t¨²nel¡±, se lee sobre el origen de las filtraciones de agua que acabaron por diluir parte del terreno, desestabilizando los edificios levantados sobre ¨¦l. ¡°La causa de la ruina producida fue el defecto del proyecto consistente en no tener en cuenta las singularidades del terreno que exig¨ªa un pozo impermeable en lugar del que se dise?¨® y ejecut¨® conforme al proyecto de la obra¡±.

El problema nace en 2007, cuando la entonces presidenta regional, Esperanza Aguirre, celebra la inauguraci¨®n de la l¨ªnea 7B, hecha a toda prisa para que se estrene justo antes de las elecciones. Desde el primer d¨ªa, las obras provocan algo parecido a un terremoto en el subsuelo: facilitan que el agua entre en contacto con la sal que entrevera el terreno, disolvi¨¦ndola y causando un corrimiento de tierras que hace que los cimientos de los edificios pierdan pie. Las consecuencias han sido dram¨¢ticas y se conjugan a¨²n en presente: como una mancha de aceite, el agua avanza bajo el suelo, afectando hoy a este edificio y ma?ana a otro, lo que sume a todos los vecinos del municipio en la incertidumbre.

M¨¢s de 150 vecinos de m¨¢s de 80 familias han tenido que abandonar sus hogares en alg¨²n momento desde 2021 como consecuencia de las grietas, roturas y desperfectos que han aparecido en sus viviendas. Quince a?os despu¨¦s de la inauguraci¨®n del metro, ya se han derribado 27 viviendas y otras tantas est¨¢n a un paso de seguir el mismo camino, seg¨²n anunci¨® en diciembre la Comunidad, para un total de 54, seg¨²n cifras de la Administraci¨®n regional, que no concuerdan con las de la local (que dice tener constancia de 53). La l¨ªnea 7b ha sido cerrada nueve veces por reparaciones, lo que ha resultado en un total de m¨¢s de tres a?os sin dar servicio. Y muchas familias siguen viviendo entre grietas, ruidos tenebrosos y el miedo permanente a que se les caiga el techo encima.

¡°Todo es intentar tapar las cosas¡±

¡°Lo de Esperanza Aguirre es pat¨¦tico¡±, se queja en rueda de prensa Eloy Rodr¨ªguez, miembro de la plataforma de afectados se?alado directamente en televisi¨®n por la expresidenta, debido a su pasado como concejal de IU en el municipio. ¡°Est¨¢ en una lucha de desprestigio, y al que pillan por medio lo quieren crujir¡±, lamenta. ¡°Todo es intentar tapar las cosas. No quieren hablar de la barbaridad, de la salvajada que cometieron con la administraci¨®n del agua¡±, denuncia Rodr¨ªguez.

Con las elecciones municipales y auton¨®micas del 28 de mayo ya en el horizonte, el enfrentamiento es total. El PP ha virado: no est¨¢ dispuesto a sufrir en exclusiva el desgaste electoral del drama, que se tradujo en una manifestaci¨®n improvisada y llena de gritos (¡±menos propaganda y m¨¢s soluciones¡±) cuando D¨ªaz Ayuso visit¨® la zona. Los vecinos no ceden: no est¨¢n dispuestos a que se diluyan las responsabilidades, ni a que se retire el foco de sus desalojos para ponerlo en la lucha pol¨ªtica.

Porque para los que ya no tienen casa, llega un momento clave. Tienen apenas 15 d¨ªas para decidir si aceptan la indemnizaci¨®n patrimonial que les ha propuesto la Comunidad: de 136.000 a 355.000 euros por sus viviendas (lo que supone valorar el metro cuadrado en 2.682 euros) y de 10.000 a 33.000 euros por sus garajes. La alternativa es acudir a los juzgados y prolongar el sufrimiento para lograr una mayor compensaci¨®n porque el metro les haya dejado sin los recuerdos de su pasado, sin alegr¨ªa en el presente, y sin esperanza en el futuro.

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