Rara es la despensa o el refrigerador donde no hay pimiento rojo (o morr¨®n). Y a¨²n m¨¢s raro el guiso con may¨²sculas que no incluye entre sus ingredientes esta humilde y vistosa hortaliza de la familia de las solan¨¢ceas que es sin duda uno de los alimentos b¨¢sicos de la dieta mediterr¨¢nea: alta en vitaminas, de sabor intenso y con un color que insufla vida al guiso m¨¢s aburrido que se le pase por la cabeza.
Como otras muchas exquisiteces lleg¨® a Espa?a tras el descubrimiento de Am¨¦rica. Empez¨® a cultivarse en Extremadura, pero, a falta de recetarios y de abuelas que supieran c¨®mo cocinarlos, al final se secaban. Como la comida no se tira, se mol¨ªan para hacer un polvo que pronto se usar¨ªa como especia. Vamos, el piment¨®n dulce. Alg¨²n avispado tuvo la genialidad de a?adirlo al chorizo, que hasta entonces era de un color desventurado, y ah¨ª nac¨ªa para la historia el chorizo rojo, tal como lo conocemos ahora.
Hay a quienes les gusta m¨¢s su sabor recio antes de madurar del todo. Por eso se venden tambi¨¦n verdes. Una vez maduro, la mayor¨ªa son rojos, pero hay variedades amarillas-anaranjadas, viol¨¢ceas y hasta negras. Por la forma se distinguen el pimiento tipo California, de silueta rechoncha: y el tipo Lamuyo, grande, muy carnoso y m¨¢s largo que ancho.
Se puede consumir crudo y asado y se comercializa fresco, desecado y en conserva. Su temporada va de mayo a noviembre, pero gracias a los invernaderos los tenemos todo el a?o. Para acertar con la compra busca los ejemplares m¨¢s rojos, con la piel brillante y sin da?os. En casa, hay que guardarlos en la nevera en una bolsa de pl¨¢stico abierta. Pueden llegar a durar un par de semanas. Una vez abiertos, la pulpa debe ser consistente y ligeramente crujiente. Si la notas blanda significa que los d¨ªas de gloria de esa pieza ya acabaron. En caso de haber fragmentos blancos, podr¨ªa ser moho. No hay soluci¨®n: desc¨¢rtala.
Fama justificada: sabor y nutrientes
Como casi todas las hortalizas, el pimiento es bajo en calor¨ªas (29 kcal/00 gramos). Esto se explica por dos razones: casi nada de l¨ªpidos (0,6 gramos) y un 92,2% de agua. Apenas tiene prote¨ªnas, aunque s¨ª hidratos de carbono (4,6 gramos) y es fuente natural de fibra (1,8 gramos).
Si en macronutrientes saca el aprobado raspado, en micronutrientes es master cum laude. De entrada, un alto contenido en vitamina C (152 mg), una buena raz¨®n para consumirlo m¨¢s en crudo, ya que ¨¦sta languidece si se somete al calor. La vitamina C es necesaria para la s¨ªntesis del col¨¢geno de tejidos como la piel o los m¨²sculos, mejora la absorci¨®n del hierro y es un potente antioxidante frente a los radicales libres. En cantidades no significativas, pero interesantes, encontramos las vitaminas A y E (90 mcg y 0,86 mg), y el potasio (155 mg).
?Es malo comerse la piel?
El pimiento puede comerse en crudo sin problemas, en forma de crudit¨¦s o incorporado a ensaladas. Simplemente, mast¨ªquelo bien para facilitar la digesti¨®n. En caso de tener est¨®mago delicado, es mejor retirarla. Si tienes hijos puntillosos, de esos que protestan en cuanto atisban una esquirla de pellejo, ret¨ªrala igualmente. En crudo es una tarea ardua, as¨ª que ¨¢salo y p¨¦lalo sin complicaciones. En cualquier caso, una vez cocido, el pellejo se ablanda y es m¨¢s f¨¢cil tolerarlo.
Colorante natural
?Le gusta el sabor pero tolera mal la piel? P¨ªcalo en la picadora hasta dejarlo casi como un licuado y a?¨¢delo a los guisos. Aportar¨¢ sabor y color de forma natural y te ahorrar¨¢ tener que realzar tus platos con sal (con los que supone de ahorro en la dosis total de sodio). Si no eres muy tiquismiquis, disfruta de uno de los pilares de la gastronom¨ªa espa?ola: en sofritos, asado y ali?ado con aceite de oliva virgen y ajo, en pipirrana, rellenos, en guisos¡ La imaginaci¨®n es el l¨ªmite. Aunque no hay que excederse ech¨¢ndolo a la paella. Los puristas de este plato lo ven como aberraci¨®n digna del chorizo de Jamie Oliver, aunque en algunas zonas de Alicante se a?ade con orgullo y sin remilgos. Si se busca algo m¨¢s ex¨®tico y menos pol¨¦mico, una opci¨®n es atreverse con el muhammara, una especie de hummus sirio a base de pimiento rojo con nueces, pan y zumo de granada. Es uno de los aperitivos t¨ªpicos de la cocina siria y un saludable tentempi¨¦ para picotear antes de la comida.
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