C¨®mo, cu¨¢ndo y por qu¨¦ se deben podar las tomateras

El verano es temporada de tomates. El fruto de esta planta, de la familia de las solan¨¢ceas, se beneficia de los largos y soleados d¨ªas de esta estaci¨®n. La variopinta inmensidad de variedades de tomate y su omnipresencia en las recetas de cocina estival lo convierten en uno de los cultivos preferidos de aquellos que se lanzan a la horticultura por afici¨®n. Pero el del tomate no es un cultivo f¨¢cil. Se trata de una planta bastante sensible. Para desarrollarse necesita una generosa cantidad de sustrato, unas necesidades respecto agua, abono y luz solar espec¨ªficas, y su cultivo est¨¢ expuesto a toda una diversidad de problemas como hongos, enfermedades y plagas. Factores que deben tenerse en consideraci¨®n antes de lanzarse a cultivarla. M¨¢s adelante, por a?adidura, surgir¨¢ un nuevo dilema: el de c¨®mo podar la planta para contribuir al desarrollo de sus frutos.

Lo primero que puede sorprender a un aficionado advenedizo en el cultivo del tomate es que no solo no existe un consenso s¨®lido sobre la cuesti¨®n de la poda de la planta, sino que, directamente, a menudo al buscar informaci¨®n la palabra ¡°pol¨¦mica¡± aparece m¨¢s de una vez. Existen posiciones enfrentadas entre los divulgadores de horticultura respecto a la cuesti¨®n de la poda de tomateras. Toni Jard¨®n, responsable del blog La Huertina de Toni, intenta mirar m¨¢s all¨¢ de este desencuentro de criterios desde su experiencia personal en su huerto en Bolgues (Asturias). ¡°Creo que la pol¨¦mica viene dada por las diferentes formas y corrientes de cultivo¡±, explica a EL PA?S. ¡°Un cultivo m¨¢s natural o cercano a la naturaleza nos hace pensar que no existir¨ªa una persona detr¨¢s quit¨¢ndole a la tomatera lo que consideramos que no necesita para desarrollarse.¡± Sin embargo, ¨¦l, que no se confiesa enemigo de coger las tijeras de poda, apunta a la variedad del tomate como la clave para conocer las necesidades de poda de la planta.

Variedades de crecimiento determinado

En general, reducir la frondosidad de hojas de una tomatera es una medida que se aconseja para favorecer la producci¨®n de frutos. Pero, como anota Jard¨®n, existen excepciones: ¡°Un tomate de crecimiento determinado, es decir, que crece hasta una altura m¨¢xima, no se suele podar. La planta no va a desarrollarse m¨¢s de ese tama?o y, por lo tanto, nos interesa que saque toda la floraci¨®n posible¡±, expone.

Ester Casanovas, autora de t¨ªtulos como Hortelanos de ciudad (Ediciones invisibles, 2014) y la divulgadora detr¨¢s de Picarona Blog, es especialista en sacar el m¨¢ximo partido a un huerto cultivado en macetas, lo que se ajusta al caso de muchos principiantes. Las tomateras de porte determinado, tal y como se?ala Casanovas, son perfectas para adaptarse a la limitaci¨®n de sustrato propia de una maceta (15-20 litros). Estas plantas no crecen demasiado, y por eso podarlas, advierte, podr¨ªa suponer renunciar a parte de su producci¨®n.

Como se?ala Casanovas, algunas de estas variedades, como las bons¨¢i y colgantes, ¡°suelen dar todos los frutos a la vez¡±, aclara en un post de su perfil de Instagram, advirtiendo de que podr¨ªa ser dif¨ªcil identificar un brote axilar de uno que no lo es: ¡°Resultan m¨¢s prol¨ªficas si las dejamos a su bola¡±.

El consejo que da el youtuber de jardiner¨ªa Kevin Espiritu a los dos millones y medio de suscriptores de su canal, Epic Gardening, es el de conocer la manera en la que crece y se estructura la planta del tomate antes de podar. Quien los ha cultivado sabe que se desarrollan alternando ramas de hojas y ramas de flores que, si todo va de acuerdo a los objetivos del hortelano, se convertir¨¢n en frutos. Como una escalera de hojas y flores. Aquellos escalones de hojas son necesarios tambi¨¦n para el crecimiento y la productividad perseguida, pues es a trav¨¦s de las hojas c¨®mo la planta consigue realizar la fotos¨ªntesis. ?Qu¨¦ parte se puede eliminar entonces? El foco se coloca en los llamados ¡°chupones¡±, un nombre que ya delata una popularidad no demasiado valorada.

Qu¨¦ son los chupones (o yemas axilares) y c¨®mo distinguirlos

¡°Los chupones son brotes de los que la planta va a desarrollar nuevos tallos, con nuevas hojas y frutos¡±, explica Toni Jard¨®n. Estos brotes axilares (porque aparecen en lo que podr¨ªa parecer la axila entre el tallo y las hojas) se pueden quitar utilizando los dedos cuando todav¨ªa son muy peque?os. ¡°Es lo m¨¢s f¨¢cil y lo menos da?ino, porque salen enteros y la herida que se le hace a la planta es menor¡±. Una precauci¨®n que puede evitar futuros problemas para la planta.

El chup¨®n brota entre el tallo principal de la tomatera y uno de los pisos de hojas, formando un ¨¢ngulo de 45 grados respecto a ambas. De no podarlos, la planta desarrollar¨¢ a partir de este brote una nueva rama, que a su vez tendr¨¢ nuevos nodos de hojas y flores. Por lo tanto, deber¨¢ repartir sus recursos actuales tambi¨¦n con esta nueva rama, de ah¨ª que esta sea la mayor consideraci¨®n a la hora de decidir eliminarlo.

Motivos para podar (pero nunca en exceso)

Para Toni Jard¨®n la ventilaci¨®n es una cualidad que se debe preservar cuando se cultivan tomates, y es algo que se consigue gracias a la poda peri¨®dica. ¡°El tomate es un cultivo muy sensible a la humedad. R¨¢pidamente, aparecen hongos que nos pueden dejar sin cultivo. Una planta muy hacinada y con poca ventilaci¨®n es m¨¢s propensa a que los hongos se desarrollen y propaguen¡±, se?ala el divulgador afincado en Asturias, que destaca otros beneficios de la poda como la obtenci¨®n de frutos m¨¢s grandes y la posibilidad de poner los cultivos m¨¢s pr¨®ximos unos de otros.

Ante la duda, es frecuente empezar aconsejando la poda de aquellas hojas que est¨¢n por debajo del primer nodo de flores. Unas hojas que por proximidad al suelo podr¨ªan estar expuestas a mayores agentes nocivos y que no son necesarias para el desarrollo de la planta. Otros nodos de hojas que deber¨ªan ser eliminadas son aquellos afectados por hongos y por gusanos minadores (que crean surcos de un tono diferente en las hojas a medida que se alimentan), de esta forma se evitar¨ªa que el ataque se propagase por el resto de plantas.

Excederse en la poda tambi¨¦n acarrea problemas, seg¨²n reconoce el divulgador de horticultura: ¡°Las plantas necesitan de las hojas para recibir el sol y alimentarse¡±. As¨ª que es importante asegurarse de dejar suficientes hojas, que adem¨¢s protegen los frutos de un excesivo impacto de luz solar.

Es habitual encontrar el consejo, a modo de precauci¨®n, de podar antes de regar, y no al rev¨¦s. El motivo es que el agua, y aquello que pudiera llevar consigo, no penetre en los espacios abiertos sobre la superficie del tallo tras la poda. Sin embargo, Jard¨®n prefiere atenerse a una precauci¨®n previa para evitar enfermedades, que consiste en regar sin mojar la planta. Adem¨¢s, aconseja desinfectar bien las tijeras al cambiar de planta ¡°para evitar propagar esporas de una a otra¡±.

Usos inesperados de los chupones: origen de plantas nuevas e insecticida natural

Los chupones no son brotes del todo indeseables cuando se trata de cultivar tomates. Para Jard¨®n, es la mejor forma de reproducir las tomateras y obtener un clon. Algo que aconseja hacer en caso de que la primera planta muera. ¡°Normalmente, plantamos los chupones alrededor de la planta madre¡±, explica. Aunque se?ala que estos enra¨ªzan bien, independientemente de su tama?o, s¨ª recomienda esperar a que haya alcanzado unos 10 o 15 cent¨ªmetros: ¡°Sus ra¨ªces se pueden desarrollar tanto plant¨¢ndolo en una maceta como en un vaso con agua¡±.

De la poda de las tomateras pueden surgir otras bondades imprevistas, como un remedio eficaz contra algunas plagas del huerto, como la mariposa de la col, las orugas, la pulguilla y el pulg¨®n. En un v¨ªdeo alojado en su canal, Jard¨®n explica c¨®mo elaborar un insecticida utilizando chupones y algunas ramas que hayan sido podadas (pero sanas, que no hayan sido infectadas por hongos). El resultado de colar y colocar en un pulverizador la combinaci¨®n de estas ramas troceadas con abundante agua (un litro por cada 100 gramos de ramas), removidas una vez al d¨ªa durante seis d¨ªas a la sombra, ha demostrado para el hortelano ser eficaz en la prevenci¨®n y eliminaci¨®n de este tipo de plagas en sus cultivos. ¡°Las plantas solan¨¢ceas como el tomate contienen en sus hojas unos compuestos llamados alcaloides que son t¨®xicos para ciertas plagas¡±, detalla. Porque las lecciones de aprendizaje que se desprenden de un peque?o huerto amateur se multiplican con la experiencia.