La rara y cautivadora medinilla, la planta de las tres mentiras

Poco o casi nada se sabe de la enigm¨¢tica medinilla. Conocida popularmente como orqu¨ªdea de Malasia, este cautivador arbusto de hoja perenne e inusuales flores ni es malayo ni es una orqu¨ªdea. Sus primeras dos mentiras quedan desmontadas de un plumazo. Nativa de Java y Filipinas, esta rara planta tropical crece en su h¨¢bitat natural como epifita ¨Dcaracter¨ªstica que s¨ª comparte con las orqu¨ªdeas¨D, es decir, sin sustrato. Siempre varios metros por encima del suelo firme, la medinilla enraiza en tallos huecos y grietas llenas de abono detritus en la corteza del tronco de los ¨¢rboles, y trepa hacia las alturas en busca de la luz en los h¨²medos y umbr¨ªos bosques de las islas al sur del Pac¨ªfico occidental. All¨ª, en las frondosas junglas tropicales y subtropicales, se han catalogado m¨¢s de 300 especies diferentes de medinilla con variedades que alcanzan la envergadura de arbustos de rugosa piel de corcho y tallos retorcidos de m¨¢s de tres metros de alto. La apellidada Magn¨ªfica (Medinilla magnifica) es la m¨¢s habitual cultivada en maceta y disponible para la vida dom¨¦stica en los viveros fuera de su h¨¢bitat. La ¨²nica que podemos disfrutar en persona a m¨¢s de 12.000 kil¨®metros del lugar del que es originaria.

Lo que m¨¢s llama la atenci¨®n la primera vez que uno se encuentra cara a cara con una Medinilla magnifica son sus tallos colgantes, p¨¦ndulos, que dirigen hacia el suelo ramilletes de preciosas flores rosadas. Choca ¡ªcomo cuando, desde la mirada occidental, ojeamos un manga o un libro de haikus¡ª esta direcci¨®n de crecimiento contraria a nuestra l¨®gica. Al igual que ocurre con sus parientes lejanas las orqu¨ªdeas, la posici¨®n natural de las varas de flores de la medinilla es p¨¦ndula. Y aqu¨ª est¨¢ la tercera mentira: los llamativos capullos que cuelgan en cascada no son flores, sino br¨¢cteas. Esto es: un ¨®rgano formado a base de hojas modificadas, diferentes a las hojas est¨¢ndar, que tienen algunas especies. Esta estructura bot¨¢nica surge alrededor de las flores para protegerlas, como un chal o un paraguas. Aunque hay br¨¢cteas verdes, excepcionalmente estas curiosas hojas tienen otras tonalidades. Al igual que ocurre con la flor de Pascua (Euphorbia pulcherrima), las buganvillas (Bougainvillea) o las hortensias (Hydrangeas), las br¨¢cteas de la medinilla son de un color inusual para una hoja, lo que hace que las asimilemos visualmente con los p¨¦talos de una flor.

El Pantone de la medinilla basta para enloquecer a cualquier fan de la Barbie de Greta Gerwig. Del rosa pastel al fucsia, pasando por un decadente rosa viejo y por tonalidades encendidas ¨Dm¨¢s pr¨®ximas al coral¨D o fr¨ªas ¨Dtirando al malva¨D, el refinamiento monocrom¨¢tico es uno de los grandes espect¨¢culos de esta planta. Una vez al a?o, en primavera, de entre las hojas est¨¢ndar ¨Dperennes, gruesas, de un verde oscuro brillante, flexibles como el cuero¨D brotan tallos rosas que crecen hasta alcanzar 20 o 30 cent¨ªmetros y tienen en su extremo colgante las hojas rosadas que permanecen durante meses cerradas, como una c¨¢psula. Cuando finalmente se abren, las br¨¢cteas dejan al descubierto las verdaderas flores. Se trata de inflorescencias o ramilletes compuestos por peque?as florecillas agrupadas que recuerdan a un racimo y que dan lugar a otro de los apodos de la medinilla: la uva rosa. Brotan en verano y permanecen largo tiempo en la planta, a veces durante m¨¢s de cuatro o cinco meses.

Buenas vibraciones

La singular condici¨®n de sus flores explica otro curioso comportamiento de la medinilla silvestre relacionado con su mecanismo de reproducci¨®n: atrapado en diminutos sacos en el extremo de los estambres, el polen se libera gracias al zumbido de los polinizadores, que consiguen que el polvillo se desprenda con la vibraci¨®n de sus cuerpos y su fren¨¦tico aleteo.

Como ejemplar decorativo, en el clima de Espa?a ¡°la medinilla crece bien en maceta, en interior, en un lugar muy luminoso, pero protegido de los rayos del sol directos¡±, seg¨²n explica Yolanda L¨®pez, de la Florister¨ªa Jard¨ªn, en Madrid. ¡°Le gusta la humedad o pulverizaci¨®n frecuente, y el riego moderado cuando el sustrato est¨¢ seco, evitando que las ra¨ªces se encharquen. En regiones c¨¢lidas puede darse bien en exterior, aunque en las zonas fr¨ªas necesita ser cobijada en invierno¡±, aconseja la experta.

En su Filipinas natal, la medinilla se llama Kapa-kapa, que se traduce del tagalo como gasa o manto, haciendo referencia tal vez a las hojas que cubren la flor. ?rbol de candelabro, Hortensia tropical y Pink grape son otros de los nombres por los que se conoce a esta planta de las tres mentiras de la que poco o casi nada se sabe, pero tiene mucho que contar. Su apellido, magnifica, da una idea.