Lecciones para un planeta sano

Para Katia Hueso, profesora universitaria en materia de medio ambiente y fundadora de la primera escuela infantil al aire libre en Espa?a, educar en la naturaleza es ¡°una cuesti¨®n de mirada y de actitud¡±. Y es que, en un contexto de p¨¦rdida de contacto con la naturaleza y de deterioro medioambiental, cobra una mayor importancia prestar atenci¨®n a la educaci¨®n ambiental, quiz¨¢s la ¨²nica tabla de salvaci¨®n ahora que parece que navegamos a la deriva de una crisis clim¨¢tica sin precedentes.

La LOMLOE, que entr¨® en vigor en 2021, promueve acciones como la transformaci¨®n de patios escolares m¨¢s verdes, que puedan darse clases al aire libre, metodolog¨ªas m¨¢s activas o que haya m¨¢s salidas a la naturaleza. Para Marta L¨®pez Abril, miembro de la Red Estatal de Equipamientos de Educaci¨®n Ambiental y responsable del departamento de educaci¨®n ambiental de los colegios Gredos San Diego, lo m¨¢s destacable de esta ley es la oportunidad de que los centros educativos se transformen en espacios de ¡°cuidado y custodia del medio ambiente¡±, donde los contenidos socioambientales se trabajen de forma transversal en las distintas etapas educativas. ¡°En el escenario actual de emergencia clim¨¢tica, los centros deben mejorar su gesti¨®n ambiental y abordar su renaturalizaci¨®n y el aumento de la biodiversidad, de forma que se transformen en islas clim¨¢ticas de resistencia¡±, sostiene.

Para Laura Ben¨ªtez, t¨¦cnico de educaci¨®n ambiental y coordinadora de proyectos educativos en SEO/BirdLife, aunque es cierto que se est¨¢ produciendo un cambio, cree que no es justo que la mayor carga para lograrlo recaiga en el profesorado que quiera o pueda asumir este ¡°extra¡± dentro de sus aulas. ¡°Son los centros educativos y su profesorado los que en la mayor¨ªa de los casos toman la iniciativa y ponen en marcha acciones que los ayuden a trabajar y adaptar su entorno para educar en la sostenibilidad¡±, cuenta.

Es por ello por lo que profesionales como Silvia Corchero, educadora ambiental, maestra e ingeniera forestal, reivindican que educadores ambientales, docentes y comunidades educativas se coordinen, complementen y ayuden para hacer de la educaci¨®n ambiental una realidad. Recuerda Corchero que la educaci¨®n ambiental no es algo nuevo, ya que existen equipamientos y profesionales especializados desde hace a?os en este ¨¢mbito que pueden hacer m¨¢s sencilla la integraci¨®n en los centros educativos. Comparte esta idea Marta L¨®pez, quien a?ade que muchos colegios llevan d¨¦cadas participando en programas de educaci¨®n ambiental como Ecoescuelas o ESenRED, conferencias internacionales como la Confint, otras redes como Teachers for Future, programas de transformaci¨®n de patios, caminos escolares seguros, etc¨¦tera. ¡°Estos programas no solo est¨¢n transformando la escuela, sino que transforman a toda la comunidad educativa y a los barrios, pueblos y ciudades en los que se encuentran¡±, dice.

Lourdes Berzas es psic¨®loga especializada en medio ambiente, una disciplina que analiza c¨®mo nos influye el entorno a las personas y c¨®mo las personas influimos en el entorno. En su caso, normalmente trabaja en colegios e institutos analizando con el alumnado por qu¨¦ unos animales o unos paisajes nos gustan m¨¢s o menos, a qu¨¦ se debe, y c¨®mo eso nos hace querer protegerlos, matarlos, tenerlos como mascotas o ignorarlos. Berzas cree que la educaci¨®n ambiental es crucial sobre todo en las etapas de primaria y secundaria, ya que este grupo de edad est¨¢ todav¨ªa configurando su personalidad y est¨¢ aprendiendo muchas herramientas para relacionarse con otras personas y con el entorno. ¡°Hay estudios que se?alan que si de peque?os participamos en actividades al aire libre, probablemente de mayores mantengamos el inter¨¦s y tengamos m¨¢s conciencia sobre la naturaleza y el medio ambiente. Por ejemplo, votaremos pol¨ªticas m¨¢s verdes, participaremos en m¨¢s voluntariados, compraremos en comercios locales¡­¡±. Ahora bien, tambi¨¦n insiste en que esto no implica que la educaci¨®n ambiental tenga que limitarse a estas etapas, sino que debe llegar a toda la sociedad, incluyendo a quienes toman decisiones.

Amplitud de miras

En ello tambi¨¦n incide Corchero, quien considera que no es suficiente con la educaci¨®n ambiental de los colegios e institutos, sino que debe llegar a cada rinc¨®n de la sociedad: ¡°Debe estar en todas partes y en cada paso que damos. Solo desde el aporte de cada persona y el paso a la acci¨®n podremos enfrentar con ¨¦xito los grandes retos ambientales y sociales que tenemos por delante¡±. ?En qu¨¦ punto estamos? Para Berzas, aunque cada vez es mayor la toma de conciencia global y hemos avanzado mucho en las ¨²ltimas d¨¦cadas, a¨²n falta mucho para conseguir activar el paso a la acci¨®n a todos los niveles, tanto individual como colectivamente. Para lograrlo cree que es esencial el aporte de nuestro papel individualmente, pero siempre acompa?ado de una toma de decisiones contundentes en el ¨¢mbito pol¨ªtico y estrat¨¦gico. ¡°Debemos demandar a nuestros representantes esta mirada a los cuidados y saber elegirlos, para que estos aspectos tan esenciales para nuestra supervivencia y bienestar, la del planeta y las de todos los seres con los que convivimos, est¨¦n siempre sobre la mesa y se prioricen por encima de intereses econ¨®micos e individuales¡±, dice.