?Qu¨¦ come una aspirante a ¡®geisha¡¯?
De curry agripicante a tortitas de arroz, un manga descubre las tradiciones y costumbres de las futuras ¡®geishas¡¯

¡°Me llamo Kiyo. Tengo diecis¨¦is a?os. Por casualidades de la vida, trabajo de cocinera interna makanai en esta yakata¡±. As¨ª comienza uno de los mangas m¨¢s populares del momento: Makanai. La cocinera de las maiko, de Aiko Koyama, editado por Tomodomo editorial y traducido por Ana Mar¨ªa Caro.
El comienzo del manga sit¨²a al lector en Kioto, en las sombreadas calles de Gion K¨bu, el barrio donde se desarrolla esta historia de amistad entre dos j¨®venes que ingresan en una yakata (casa o mansi¨®n o palacio donde se alojan nobles, samur¨¢is o geishas de alto rango) con el fin de convertirse en futuras geishas. ¡°Esta vieja ciudad del oeste, al caer el sol, en un peque?o barrio emergente de la oscuridad frente al r¨ªo, hay un rinc¨®n poblado de flores que despliega sus p¨¦talos al anochecer: el kagai¡±. En este escenario tiene lugar esta historia trazada con tanto realismo que a ratos te ayuda a visualizar esa postal de las mujeres caminando sin prisa por las sombreadas callejuelas.
La escritora, Aiko Koyama, nos introduce en ese fascinante mundo, pero con una mirada muy original y ¨²nica, la de una joven cocinera que, una vez dentro de la yakata, se da cuenta de que su verdadera vocaci¨®n est¨¢ en los fogones. ¡°Y a ti Kiyo, ?no te gusta nadie?¡±, le pregunta una de las j¨®venes maiko; a lo que Kiyo responde: ¡°S¨ª, yo estoy enamorada de mis ollas¡±.

En este manga, la autora nos mete en la vida real de las maiko, invit¨¢ndonos a mirar sus vidas como si estuvi¨¦ramos curioseando a trav¨¦s de una mirilla, oteando con descaro sus maneras, sus primeras veces: el primer d¨ªa de convivencia entre las diferentes aprendices, la primera noche en un r¨ªgido tatami, sus despertares, sus dudas, sus deseos... Una radiograf¨ªa que la autora pasa por el tamiz de la gastronom¨ªa, haciendo que todo acabe en la mesa, a?adiendo la parte emocional que aporta la comida. As¨ª, vi?eta a vi?eta, descubrimos c¨®mo se alimenta una futura geisha, c¨®mo son sus caprichos, sus apetencias, sus ganas. ¡°Hoy deseo desayunar flan de pan¡±, le dice Sumire a Kiyo. Es decir, tostadas francesas ba?adas en caramelo. ¡°?Y qu¨¦ comeremos hoy?¡±, preguntan las j¨®venes aspirantes, a lo que responde Kiyo: ¡°Oyakodon¡±, un plato cuya base es el arroz aderezado, en este caso, con pollo, huevo, cebolla y salsa de arroz. ¡°Escuchad chicas, ?qu¨¦ os apetece cenar¡±, interroga Kiyo, en uno de los cap¨ªtulos, donde la joven cocinera muestra un momento de falta de creatividad en la cocina. Entonces, la respuesta de las maiko descubre c¨®mo son sus apetencias culinarias: ¡°Chuleta tonkatsu (...), fideos ramen (...) karaage ¡ªpollo frito¡ª (...).
Al final de cada cap¨ªtulo, aparecen las notas gastron¨®micas de Kiyo. Y si recopilamos todos los platos que salen a lo largo del manga podr¨ªamos hacer este recetario de las maiko: oyakodon (con pollo, huevo, cebolla y salsa de arroz); huevos a la plancha; korokke (croquetas de patata); onigiri (bolas de arroz); gratinado de miso en concha; filetes rusos con salsa; curry agripicante de cerdo, con pollo, ternera y calamar; la sopa de hittsumi; el flan ¨¤ la mode con bien de nata; s¨¢ndwich de tonkatsu; tortitas de arroz omurice; yakisoba...

Uno de los cap¨ªtulos m¨¢s deliciosos y repleto de gastronom¨ªa es cuando Sumire recibe la noticia de que ella es una de las grandes candidatas a convertirse en geisha: ¡°Esa muchacha s¨ª que es una fuera de serie. Puede que nos encontremos ante una futura maiko; de las que solo aparece una cada 100 a?os¡±, dice una de las maestras, refiri¨¦ndose a ella. Ante semejante noticia, su amiga, Kiyu, decide preparar un gran fest¨ªn para celebrarlo: estofado, tortillas de cangrejo, gyozas a la plancha... ¡°Cuando era peque?a sal¨ªamos a comer en familia, hab¨ªa un local de fideos ramen que sol¨ªamos frecuentar. Hace tiempo que cerr¨®, pero su ramen acompa?ado de empanadillas gyoza sigue en mi cabeza como uno de los mejores ejemplos de lo que significa darse un fiest¨®n¡±, escribe la joven cocinera en sus notas gastron¨®micas.
No es la primera vez, que un libro nos invita a entrar en la vida fascinante de las geishas; recordemos Memorias de una Geisha, escrita por Arthur Golden, llevada al cine por Rob Marshall y donde el autor contaba la vida de Mineko Iwasaki, una de las geishas m¨¢s importantes del Jap¨®n del siglo XX. O la represalia que hizo la propia Iwasaki quien, descontenta con la narraci¨®n de Golden, decidi¨® contar su verdad en el libro que tradujo al espa?ol Ediciones B como Vida de una geisha. La verdadera historia.
El manga tiene 38 tomos, de los cuales solo 14 se han traducido al espa?ol, y, en este 2025, las librer¨ªas tan solo recibir¨¢n tres. Este mes de marzo saldr¨¢ el tomo dos y en junio, la tercera parte. La colecci¨®n logr¨® tal ¨¦xito en Jap¨®n que pronto se hizo la serie de animaci¨®n y, a?os m¨¢s tarde, se llev¨® a la ficci¨®n en una serie que hoy en d¨ªa se puede ver en Netflix.
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