Endivias gratinadas con jam¨®n y bechamel

La endivia, que no envidia -eso es otra cosa, bastante m¨¢s amarga-, es una de esas hortalizas que uno no suele saber muy bien c¨®mo cocinar. Podemos verla en ensaladas y en alg¨²n otro plato, pero digamos que no goza de la fama del calabac¨ªn, por ejemplo. Yo misma, confieso, no las hab¨ªa probado hasta hace unos pocos a?os atr¨¢s cuando la madre belga de un amigo, de quien tomo la receta, me invit¨® a comer este plato de endivias gratinadas o, como ellos lo conocen, chicons au gratin.

Result¨® ser una de esas comidas reconfortantes ideales para estos meses. El sabor amargo de la endivia queda suavizado con el jam¨®n, la bechamel y ese maravilloso gratinado final. Si lo quisieras rebajar a¨²n m¨¢s porque ni siquiera en peque?as dosis es lo tuyo, puedes hacerlo eliminando la parte central del coraz¨®n de la endivia. Hazlo usando una puntilla y con cuidado de no retirarlo del todo, o las hojas se separar¨¢n y no llegar¨¢s al final de la receta. Si, al contrario, te pirra el sabor de las endivias, puedes intensificar el plato elaborando la bechamel con 350 ml de leche y 150 ml del l¨ªquido de cocci¨®n de las mismas, en vez de prepararla en su totalidad con leche.

Sea como sea que adaptes la receta a tus gustos, lo que s¨ª es obligatorio es utilizar productos de calidad. No la estropees con un jam¨®n de dudosa procedencia o uno de esos mix de quesos de colorinchis para fundir. No. Busca un buen jam¨®n cocido y un buen queso emmental. Y si adem¨¢s preparas la bechamel con leche fresca, ser¨¢ la cr¨¨me de la cr¨¨me.

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