Strudel de cordero

Como dir¨ªa Mariah Carey, ¡°all I want for Christmas is¡­¡± ?cordero!. S¨ª, es una realidad: las dos primeras celebraciones de esta Navidad ya han ca¨ªdo, y con ellas sus correspondientes comilonas insaciables con infinitas sobremesas. Por mucho que antiguamente la Navidad fuera una ¨¦poca en la que hab¨ªa que practicar la abstinencia -gastron¨®mica y de todo, ?eh!-, hoy en d¨ªa est¨¢n hechas para disfrutar, comer y beber hasta que el cintur¨®n no aguante m¨¢s. Las luces cuelgan en las calles, las tiendas se abarrotan y los anuncios de juguetes en la televisi¨®n est¨¢n a la orden del d¨ªa; y todav¨ªa t¨², sin saber qu¨¦ cocinar.

Espa?a es un pa¨ªs diverso, con muchas tradiciones y comidas t¨ªpicas distintas. En funci¨®n de la regi¨®n donde uno se encuentre, las preparaciones pueden variar: hay protagonistas atemporales como el marisco, la lombarda, el consom¨¦, el cochinillo o el cordero. Este ¨²ltimo sea quiz¨¢s el m¨¢s demandado y extendido, ya que no es un asado m¨¢s o menos sencillo, de esos que se mete en el horno y ya te olvidas de ¨¦l. Son muchos los corderos que se venden en estas fechas y muchas las sobras navide?as que alimentan semanas despu¨¦s: croquetas o gratinados donde todo cabe son ejemplos perfectos de lo que estamos hablando.

Hoy, os traemos una receta de aprovechamiento de cordero -o de cualquier otra verdura o carne- divertida, resultona y muy sencilla de hacer. Te ganar¨¢s a tus invitados haciendo algo distinto y muy rico a base de restos: un strudel. S¨ª, ese rollo normalmente relleno de manzana que entendemos como un postre, aqu¨ª se convierte en un entrante perfecto para recuperar la paletilla ha sobrado en una de esas comidas en las que acabas diciendo nopuedoconlavida.

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