Andrea Bocelli, una vida de superaci¨®n, rechazo y ¨¦xito

El tenor italiano Andrea Bocelli dio un emotivo concierto el d¨ªa de Pascua para transmitir un mensaje de esperanza en medio de la pandemia desde la catedral de Mil¨¢n completamente vac¨ªa que ya han visto m¨¢s de 33 millones de espectadores a trav¨¦s de Internet. ¡°Gracias a la m¨²sica, retransmitida en directo, uniendo a millones de manos juntas en todo el mundo, abrazaremos este coraz¨®n palpitante de la tierra herida, maravillosa f¨¢brica internacional que es motivo de orgullo italiano. La generosa y valiente Mil¨¢n y toda Italia ser¨¢n muy pronto de nuevo un modelo ganador, motor de un renacimiento que todos esperamos¡±, se?al¨® Boccelli, de profunda fe cat¨®lica como ¨¦l mismo se ha definido en muchas ocasiones. Y a?adi¨®: ¡°Creo en la fuerza de rezar juntos, creo en la Pascua cristiana, s¨ªmbolo universal de un renacimiento que todos, creyentes y no, necesitamos ahora¡±.

Bocelli cant¨® cuatro canciones dentro del magn¨ªfico templo g¨®tico y termin¨® el concierto con una interpretaci¨®n del himno cristiano Amazing Grace delante de la catedral, con un montaje de im¨¢genes que mostraban las calles vac¨ªas de Par¨ªs, Londres y Nueva York.

El tenor, adem¨¢s, a trav¨¦s de su fundaci¨®n ya ha recaudado m¨¢s de 300.000 euros que est¨¢ destinando a apoyar a hospitales italianos desbordados por la emergencia sanitaria y a comprar material m¨¦dico. Bocelli cre¨® la fundaci¨®n que lleva su nombre en 2011 con el objetivo de ayudar a personas en dificultad a causa de la enfermedad, la pobreza o la marginalidad. Y ha impulsado varios proyectos en Italia y en pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo.

La historia de este cantante l¨ªrico toscano, de 61 a?os, que ha vendido m¨¢s de ochenta millones de discos en todo el mundo en las dos ¨²ltimas d¨¦cadas, es de superaci¨®n, rechazo y ¨¦xito. Bocelli naci¨® con un glaucoma cong¨¦nito que le provoc¨® ceguera parcial y a los 12 a?os deriv¨® en la p¨¦rdida total de la vista a causa de un golpe que recibi¨® jugando al f¨²tbol. Su pasi¨®n por la m¨²sica se despert¨® en ¨¦l cuando ten¨ªa tres a?os y qued¨® fascinado por la ¨®pera que escuchaba un paciente ruso en una habitaci¨®n cercana a la suya en una cl¨ªnica de Tur¨ªn. Siempre se empe?¨® en llevar una vida normal. Practica equitaci¨®n desde peque?o y en sus or¨ªgenes actu¨® en locales nocturnos para pagar las clases de canto que recib¨ªa del tenor Franco Corelli, mientras compaginaba la m¨²sica con sus estudios de Derecho. Con 14 a?os gan¨® un concurso de j¨®venes talentos.

En 1994, cuando ya era conocido en el panorama internacional, gan¨® el famoso Festival de la Canci¨®n de Sanremo y su popularidad creci¨® como la espuma. A partir de ah¨ª comenz¨® a batir r¨¦cords de ventas en varios pa¨ªses. Por el camino tuvo que superar el rechazo de cr¨ªticos musicales y de productores que no lo ve¨ªan id¨®neo para la ¨®pera. Pero nunca se dej¨® condicionar por las cr¨ªticas, por muy feroces que fueran. En 2017 el director brit¨¢nico Michael Radford llev¨® sus memorias a la gran pantalla, con la adaptaci¨®n de la novela autobiogr¨¢fica La M¨²sica del silencio que el mismo Bocelli escribi¨® en 1999.

En 1992, el multipremiado tenor se cas¨® con su primera esposa, Enrica Cenzatti, a quien conoci¨® cuando tocaba el piano de noche en un bar al principio de su carrera y con la que tuvo dos hijos. En 2002 la pareja puso fin a su relaci¨®n y poco despu¨¦s ¨¦l comenz¨® a salir con Ver¨®nica Berti, con la que pas¨® por el altar en 2014 y que es la madre de su ¨²nica hija. La pareja vive en una inmensa villa en la localidad toscana de Forte dei Marmi, muy cerca de la exesposa del tenor, con quien mantiene una relaci¨®n cercana. ¡°Es simplemente un modo inteligente para vivir la propia vida familia porque es m¨¢s inteligente hacer la paz que la guerra¡±, declar¨® el cantante al peri¨®dico The Independent. En una entrevista con Vanity Fair, el maestro cont¨® que con Ver¨®nica comenz¨® a sentar cabeza. ¡°Es mi compa?era, mi amiga, mi amante. Ella me ha hecho comprender la bondad moral de la monogamia¡±, se?al¨®.