La bofetada de Will Smith y todo lo dem¨¢s: los momentos m¨¢s comentados en redes de los Oscar 2022

La 94? edici¨®n de los Premios Oscar parec¨ªa destinada a ser la del reencuentro con la normalidad, despu¨¦s de que el impasse del coronavirus desluciese inevitablemente la gala de 2021. Pero la incomodidad y la estupefacci¨®n ante un momento, la bofetada de Will Smith a Chris Rock, que ya es historia, se adue?aron entonces de la conversaci¨®n digital y tambi¨¦n de un espect¨¢culo que aspiraba a ser hist¨®rico por razones muy diferentes, como su diversidad o el inesperado triunfo de CODA: Los sonidos del silencio.

Sobre la alfombra roja, pocas horas antes, nada parec¨ªa que pudiera rivalizar en viralidad con los atrevidos atuendos de Kristen Stewart (nominada por Spencer), vestida de Chanel con unos min¨²sculos shorts, o Timoth¨¦e Chalamet, que apareci¨® con un traje de Louis Vuitton sin camisa:

No obstante, el ambiente no tard¨® en enrarecerse debido a la pol¨¦mica decisi¨®n de la Academia de entregar este a?o ocho galardones fuera del directo, entre ellos el de mejor montaje, mejor banda sonora o mejor cortometraje de animaci¨®n, este ¨²ltimo conquistado por el espa?ol Alberto Mielgo, director de El limpiaparabrisas. As¨ª, mientras muchas estrellas continuaban posando sobre la alfombra roja y concediendo entrevistas, fuera de emisi¨®n se entregaban unos premios que, de forma ins¨®lita, el p¨²blico ha podido conocer por los tuits de los periodistas all¨ª presentes. M¨¢s tarde, los v¨ªdeos de las diferentes entregas se incorporaron (editados para agilizar su ritmo) en falso directo.

Personalidades como Jessica Chastain (nominada y, finalmente, ganadora del Oscar a la mejor actriz por Los ojos de Tammy Faye) o Guillermo del Toro (director de la candidata a mejor pel¨ªcula El callej¨®n de las almas perdidas) redujeron su presencia en la alfombra roja para apoyar a los profesionales de las categor¨ªas apartadas. Del Toro, incluso, lleg¨® a retransmitirlo al mundo con im¨¢genes desde el teatro:

Tras un inicio con Beyonc¨¦ interpretando su canci¨®n Be alive, nominada por El m¨¦todo Williams, en un gran campo de tenis y vestida de verde, Amy Schumer ¡ªla m¨¢s biliosa del tr¨ªo de presentadoras que conform¨® junto a Regina Hall y Wanda Sykes¡ª sacudi¨® el teatro Kodak con un mon¨®logo donde lanz¨®, entre otras, bromas a costa de Leonardo DiCaprio, protagonista de No mires arriba, su preocupaci¨®n por la crisis clim¨¢tica y la edad de sus parejas, que, como sabemos, finalmente estuvo lejos de ser el chiste m¨¢s hiriente de la noche. Menos entusiasmo gener¨® Hall con un chiste sobre test de coronavirus basados en cachear a hombres atractivos, como Jason Momoa, o un comentario sobre la relaci¨®n de Will Smith con su esposa, que tampoco acab¨® todo lo mal que pod¨ªa acabar un comentario de esa naturaleza, visto lo que vino despu¨¦s.

Como en a?os anteriores, los Oscar han continuado corrigiendo su tendencia hist¨®rica de reconocer casi en exclusiva a figuras de la industria cauc¨¢sica y normativas, para abrirse a una diversidad de la que este a?o han sido punta de lanza los ganadores en las categor¨ªas de actriz y actor secundarios: Ariana DeBose, que por su papel en West Side Story se ha convertido en la primera mujer abiertamente homosexual y racializada en ganar la estatuilla; y Troy Kotsur, de CODA, primer hombre sordo en triunfar en su categor¨ªa, que ha protagonizado otro momento enormemente emotivo ofreciendo su discurso en lengua de signos, aclamado por los presentes con un aplauso a manos alzadas. No pas¨® tampoco desapercibida para las redes la mirada de Rita Moreno a DeBose, que recogi¨® en esta versi¨®n de West Side Story dirigida por Steven Spielberg el personaje que ella interpret¨® hace m¨¢s de 50 a?os.

No todos los intentos de la Academia de ofrecer unos premios m¨¢s representativos y alcanzar una mayor cuota de p¨²blico salieron como planeaba. Los #OscarsFanFavourite y #OscarsCheerMoment, conocidos como los Oscar de Twitter y ampliamente considerados una excusa para poder premiar a Spider-Man: No way home, la pel¨ªcula m¨¢s taquillera de 2021, no fueron para el hombre ara?a, sino para Zack Snyder, despu¨¦s de una campa?a masiva entre n¨²cleos duros de diferentes fandoms: el de DC, el de Marvel, el de Camila Cabello (protagonista de Cenicienta) y el de Johnny Depp (del que se intent¨® reivindicar El fot¨®grafo de Minamata, ¨²nica pel¨ªcula que el actor ha conseguido realizar tras la acusaci¨®n de malos tratos a su expareja).

El Oscar a la pel¨ªcula favorita del p¨²blico, seg¨²n este sondeo donde solo pod¨ªan participar usuarios de Twitter residentes en Estados Unidos, fue para Ej¨¦rcito de los muertos, de Snyder, mientras que el otro premio al mejor momento cinematogr¨¢fico del a?o fue para, concretamente, la escena del montaje de cuatro horas de Justice League (tambi¨¦n de Snyder) estrenado por HBO donde Flash entra en Fuerza de Velocidad, algo que gener¨® los memes m¨¢s graciosos de la noche, puesto que pocos parec¨ªan haber visto realmente la pel¨ªcula o recordar que algo as¨ª sucediera.

La inesperada rima argumental entre la triunfadora de la noche, CODA. Los sonidos del silencio (que gan¨® los tres premios a los que optaba, mejor pel¨ªcula, mejor guion adaptado y mejor actor secundario) y la japonesa Drive my car (mejor pel¨ªcula internacional), ambas con el lenguaje de signos integrado en sus tramas y sus narrativas, se plasm¨® tambi¨¦n en el escenario. Al discurso silente de Troy Kotsur, cuya defensa de las oportunidades para las personas con cualquier discapacidad record¨® al chejoviano ¡°Hay que vivir, vivir¡± del final del drama nip¨®n, se sum¨® despu¨¦s un discurso de Ry¨±suke Hamaguchi que ampli¨® las formas expresivas, entre las interrupciones musicales de la organizaci¨®n, la extra?a presencia de su int¨¦rprete en el escenario tomando notas con una libreta o, sobre todo, la tarta conmemorativa de Drive my car, que es un concepto que todos necesit¨¢bamos y ahora existe.

Drive my car, con su triunfo, se impuso a Fue la mano de Dios, de Paolo Sorrentino, pel¨ªcula donde juega un importante papel el gol con la mano que Maradona marc¨® a Inglaterra en la final del Mundial de F¨²tbol de 1986.

A las 4.30 del lunes, hora peninsular espa?ola, un chiste del c¨®mico Chris Rock sobre la alopecia de la actriz Jada Pinkett Smith, visiblemente molesta, desat¨® la ira de su marido, el nominado y, a la postre, ganador del premio al mejor actor, Will Smith, que se levant¨® para propinarle un golpe en directo ante la audiencia de todo el planeta. Ese momento hizo que la conversaci¨®n sobre la gala pasase de las redes sociales al mundo entero.

Minutos despu¨¦s, el actor sub¨ªa de nuevo al escenario, esta vez para recoger el Oscar a mejor actor por El m¨¦todo Williams entre llantos, err¨¢ticas apelaciones a Dios y a la manera en que el ente divino act¨²a a trav¨¦s de ¨¦l. Todo termin¨® de agudizar la sensaci¨®n de extra?amiento de una gala que no pudo reponerse del esperpento ni reuniendo al reparto de Pulp Fiction.

(Aclaraci¨®n de este ¨²ltimo tuit: Will Smith y Chris Rock doblaron, respectivamente, esos personajes de pel¨ªculas de Dreamworks)

La reacci¨®n de Nicole Kidman al momento de la bofetada tambi¨¦n se viraliz¨® instant¨¢neamente:

Otros tuiteros observaron tambi¨¦n la iron¨ªa de haber presenciado un chiste de mal gusto y la agresi¨®n en el escenario antes de que Jane Campion ganara el Oscar a la mejor direcci¨®n por El poder del perro, una cr¨ªtica a la toxicidad de los viejos valores masculinos.

Por suerte para la Academia, Sean Penn no cumpli¨® su amenaza de grabarse fundiendo sus dos Oscar como protesta porque no se conectara en directo con el presidente de Ucrania, Volod¨ªmir Zelenski, como ¨¦l reclamaba. Una acci¨®n incendiaria que, con la crisis de imagen repentina a la que ahora se enfrenta la instituci¨®n, qui¨¦n sabe si hubiera supuesto m¨¢s le?a para el fuego o realmente la distracci¨®n que necesitaba.

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