No merece la pena perder m¨¢s tiempo: Puigdemont ignora la situaci¨®n internacional

Un partido que tiene siete diputados en el Congreso, que qued¨® quinto en Catalu?a en cuanto al n¨²mero de votos en las ¨²ltimas elecciones generales, cuyo principal dirigente, Carles Puigdemont, vive en Waterloo (B¨¦lgica) y que puede perder su inmunidad como europarlamentario en cualquier momento, exige, para favorecer la formaci¨®n de un Gobierno de coalici¨®n PSOE-Sumar, que se firme un ¡°acuerdo hist¨®rico¡± reconociendo el derecho a la autodeterminaci¨®n de Catalu?a. Leyendo fr¨ªamente estos datos se podr¨ªa pensar que el se?or Puigdemont no tiene ni idea de lo que est¨¢ sucediendo ahora mismo en el mundo, ni del lugar que ocupa Catalu?a en las preocupaciones internacionales, y que el PSOE se ha enredado en una estrategia negociadora confusa. Porque en estos momentos, una nueva guerra (adem¨¢s de la que ya se desarrolla en Ucrania) pende de un d¨¦bil hilo. Una guerra en Oriente Pr¨®ximo que alcanzar¨ªa de lleno a Europa y en la que participan pa¨ªses con armamento nuclear, empezando por Israel, que nunca ha firmado ning¨²n tratado al respecto.

Los pr¨®ximos a Carles Puigdemont deber¨ªan facilitarle un buen resumen de la actualidad internacional. Informarle de que el Gobierno de Estados Unidos ha recomendado a sus ciudadanos que no viajen, no a Oriente Pr¨®ximo, sino a ning¨²n lugar del mundo, por temor a sufrir ataques terroristas. Que a uno y otro lado de la frontera de L¨ªbano con Israel se acumulan misiles y que Washington ha enviado parte de sus fuerzas navales al Mediterr¨¢neo para advertir a Ir¨¢n de que no aceptar¨¢ que entre en la batalla. Que ha habido incidentes armados y bombardeos en Irak y en Siria. Quiz¨¢s podr¨ªan incluir algunas fotos de lo que est¨¢ ocurriendo en Gaza, el espanto de la aniquilaci¨®n f¨ªsica de un pueblo bajo la mirada indiferente de medio mundo (1.500 ni?os muertos y 4.000 heridos, 500 desaparecidos, datos de la UNRWA), y recordarle que si la comunidad internacional dispusiera de mediadores en conflictos no los enviar¨ªa, desde luego, a Catalu?a, un lugar donde impera el Estado de derecho y el respeto pleno a los derechos humanos, con alto nivel de vida, lengua propia y brillante futuro.

Quiz¨¢s esos asesores (incluidos los empresarios catalanes que le siguen financiando) le podr¨ªan recordar que existe una cosa que se llama jerarqu¨ªa de prioridades y que, en estos momentos, con su actitud de bloqueo impidiendo la formaci¨®n de un Gobierno en plenitud de ejercicio en Espa?a, est¨¢ perjudicando a Catalu?a, a Espa?a y a Europa. Aunque es muy probable que los responsables de los pa¨ªses europeos no est¨¦n dedicando en estos momentos ni un segundo de sus pensamientos a los eventuales objetivos del independentismo catal¨¢n, s¨ª recordar¨¢n en el futuro qui¨¦n perdi¨® los papeles en una situaci¨®n de grave inestabilidad.

Es dif¨ªcil comprender por qu¨¦ el PSOE se ha enredado en una estrategia de negociaci¨®n con Junts tan confusa. El resultado de las elecciones generales dej¨® claro que el Partido Popular no podr¨ªa alcanzar el Gobierno, como se demostr¨® en la fallida investidura de Alberto N¨²?ez Feij¨®o. El PP no lo logr¨®, ni podr¨¢ hacerlo mientras mantenga una estrategia pol¨ªtica que le impide cualquier alianza parlamentaria. El PSOE, por el contrario, ha demostrado que es capaz de alcanzar esa mayor¨ªa. ?Qu¨¦ pasar¨ªa si convocara r¨¢pidamente la sesi¨®n de investidura y Pedro S¨¢nchez presentara un programa pol¨ªtico de fuerte contenido social, protagonismo europeo y que ofreciera directamente a los independentistas, sin m¨¢s negociaci¨®n, medidas de gracia para los implicados en los sucesos de octubre de 2017 (bajo la forma de Ley de Amnist¨ªa o no), nueva financiaci¨®n y nuevo Estatuto de autonom¨ªa, que necesariamente, tal y como establece la Constituci¨®n, deber¨ªa ser sometido a refer¨¦ndum en Catalu?a? Es posible que Junts (y detr¨¢s, ERC) negara su voto y provocara nuevas elecciones, pero tambi¨¦n que comprendiera que ni el momento ni sus expectativas justificar¨ªan esa decisi¨®n.

No es cierto que los problemas internos de un pa¨ªs condicionen su posici¨®n internacional. Todos los pa¨ªses tienen problemas internos y no por eso dejan de jugar su papel en el mundo. Lo que s¨ª dificulta ese trabajo es la condici¨®n de no disponer de Gobierno, o de que ese Gobierno est¨¦ en funciones, desprovisto de algunas capacidades. Las condiciones internacionales aconsejan que Espa?a (Catalu?a incluida) disponga de un Gobierno en pleno ejercicio. Si Junts no lo entiende, no merece la pena perder m¨¢s tiempo.

Ap¨²ntate aqu¨ª a la newsletter semanal de Ideas.