El fiscal general de EE UU asegura que detener a Julian Assange ¡°es una prioridad¡±

El fiscal general de Estados Unidos asegur¨® este jueves que detener a Julian Assange, fundador de Wikileaks, ¡°es una prioridad¡±. El Departamento de Justicia que lidera Jeff Sessions estudia presentar cargos contra Assange, responsable de la revelaci¨®n en el pasado de miles de documentos clasificados de las agencias de inteligencia estadounidenses. El Gobierno, seg¨²n fuentes consultadas por los medios norteamericanos, investiga si la organizaci¨®n ha cometido un delito al obtener recientemente informaci¨®n secreta sobre las herramientas de espionaje de la CIA.

¡°Vamos a aumentar nuestros esfuerzos en la lucha contra todas las filtraciones¡±, declar¨® Sessions en una rueda de prensa este jueves. El fiscal general declar¨® que este asunto ha llegado m¨¢s lejos ¡°que nada que yo sepa¡± y que su departamento ¡°intentar¨¢ poner a algunas personas en la c¨¢rcel all¨ª donde tengamos un caso¡± contra ellos.

La decisi¨®n de la Administraci¨®n Trump supone un giro de 180 grados con respecto a lo defendido por el presidente republicano cuando era candidato. Entonces dijo ¡°amo a Wikileaks¡±, alentando a la organizaci¨®n a que publicara los correos electr¨®nicos de su rival, Hillary Clinton. Pero las filtraciones realizadas por Wikileaks en las ¨²ltimas semanas, incluidos miles de documentos con herramientas de espionaje empleadas por la CIA, podr¨ªan suscitar una nueva investigaci¨®n sobre la responsabilidad del grupo en el robo de esa informaci¨®n.

Trump estar¨ªa adoptando adem¨¢s un camino que su predecesor, Barack Obama, ya dio por imposible en 2013. Una querella contra Wikileaks por revelar informaci¨®n clasificada ser¨ªa muy dif¨ªcil de sacar adelante sin acusar tambi¨¦n a las cabeceras estadounidenses ¡ªcomo The New York Times¡ª que sacaron a la luz el mismo contenido. La Constituci¨®n estadounidense reconoce el derecho de los medios a publicar informaci¨®n clasificada, por lo que el Gobierno no ha podido acusar a Wikileaks por sus revelaciones.

La ¨²nica opci¨®n del Gobierno est¨¢ en acusar a Assange de conspiraci¨®n para robar informaci¨®n clasificada, por lo que tendr¨ªa que demostrar que el fundador de Wikileaks instruy¨® a Chelsea Manning o a Edward Snowden, responsables de las dos mayores filtraciones, a robar los documentos pertenecientes al Departamento de Estado, el Pent¨¢gono y la Agencia de Seguridad Nacional. Hasta la actualidad, EE UU no ha podido justificar si Assange estuvo involucrado directamente en el robo de la informaci¨®n.

La organizaci¨®n ha argumentado en su defensa que funciona como un medio de comunicaci¨®n, por lo que sus actividades est¨¢n protegidas ante la justicia. ¡°Nuestras motivaciones son id¨¦nticas que las de The New York Times o The Washington Post: publicar contenido noticioso¡±, escribi¨® Assange recientemente en el Post. ¡°Publicamos material que podemos confirmar que es verdadero, al margen de si las fuentes lo obtuvieron legalmente o si tienen derecho a entreg¨¢rselo a los medios¡±.

Sin embargo, la Administraci¨®n estadounidense tiene una opini¨®n muy distinta de Assange. El director de la CIA Mike Pompeo afirm¨® la semana pasada en Washington que el trabajo de Wikileaks va m¨¢s all¨¢ de las actividades protegidas por la Libertad de Prensa. ¡°Es el momento de llamar a Wikileaks por lo que es, un servicio de inteligencia hostil que a veces act¨²a instigado por poderes estatales como Rusia¡±.

Pompeo tambi¨¦n declar¨® que Wikileaks ¡°orden¨®¡± a Chelsea Manning que interceptase informaci¨®n clasificada y que Assange carece de protecciones bajo la legislaci¨®n estadounidense. ¡°No puede acogerse a la libertad de prensa. Est¨¢ sentado en una embajada en Londres. No es un ciudadano estadounidense¡±, asegur¨®.