Provocadores, conservadores y neonazis

Mucho tiempo antes de las elecciones del pasado domingo, el viejo Bundestag reaccion¨® a un mal presentimiento y anul¨® una larga tradici¨®n. Para evitar que la primera sesi¨®n del nuevo Parlamento fuera inaugurada por el diputado de m¨¢s edad ¡ªun honor que le habr¨ªa correspondido a Wilhelm von Gottberg, un reci¨¦n elegido diputado de Alternativa para Alemania (AfD) de 77 a?os que ha pasado gran parte de su vida calificando de mito el Holocausto jud¨ªo causado por los nazis¡ª, el Parlamento aprob¨® que el discurso de inauguraci¨®n fuera pronunciado por el ministro Wolfgang Sch?uble, el diputado m¨¢s longevo de la C¨¢mara.

Von Gottberg no est¨¢ solo en su postura. Siegbert Droese, l¨ªder de AfD en Leipzig y nuevo diputado, tiene un coche con matr¨ªcula AH 1818, que responde a las iniciales de Adolf Hitler y al n¨²mero que utilizan los neonazis para referirse al F¨¹hrer. El 1 y el 8 son la posici¨®n que tienen la A y la H en el alfabeto.

Jens Maier, exmilitante del SPD, se puede convertir en el portavoz de la corriente parlamentaria m¨¢s dura de AfD. Maier cree que ha llegado la hora de que Alemania se quite la carga de culpabilidad por el Holocausto y prometi¨®, durante la campa?a, que luchar¨ªa para impedir el ¡°mestizaje¡± de la poblaci¨®n y la extinci¨®n de la identidad nacional. Tampoco se cans¨® de calificar a los musulmanes de ¡°chusma¡±.

Timo Lochocki, analista pol¨ªtico del German Marshall Fund, y experto en partidos de ultraderecha, est¨¢ convencido de que los diputados de AfD utilizar¨¢n la plataforma parlamentaria para convertirse en el ¨²nico partido de oposici¨®n. ¡°AfD fue elegida porque muchos alemanes ya no tienen confianza en los otros partidos de oposici¨®n¡±, dice el analista. ¡°En el grupo parlamentario hay dos corrientes: los ultraderechistas y los enemigos de la Constituci¨®n. Habr¨¢ que esperar para ver qu¨¦ corriente se impone¡±.

Seg¨²n Lochocki, algo m¨¢s de la mitad de los votantes de AfD son conservadores desilusionados con los partidos tradicionales y Angela Merkel. El resto son nacionalistas y racistas, seg¨²n algunos an¨¢lisis sobre el origen del voto a AfD.

El d¨ªa de las elecciones, un total de 1,1 millones de votantes de la CDU y la CSU optaron por la lista de AfD, y otro medio mill¨®n del SPD hizo lo mismo. Otras 400.000 personas que votaban por La Izquierda prefirieron apoyar a Alternativa para Alemania, algo que tambi¨¦n hicieron unos 40.000 electores de Los Verdes y los liberales. Los expertos tambi¨¦n descubrieron que 1,2 millones de abstencionistas se dejaron seducir por el discurso xen¨®fobo.

¡°Por eso es err¨®neo calificar a los diputados de AfD como un club de neonazis, pero hay un peligro latente. Falta por saber qu¨¦ posici¨®n adoptar¨¢ Alexander Gauland, que en este momento es la persona m¨¢s importante de ese partido. No sabemos si se inclinar¨¢ por defender posiciones de ultraderecha o se unir¨¢ al grupo de neonazis¡±, dice Lochocki.