Guy Ryder: ¡°Si la desigualdad sigue aumentando, en 30 a?os la situaci¨®n ser¨¢ catastr¨®fica¡±
El exsindicalista brit¨¢nico destaca el progreso regional contra el trabajo infantil, pero advierte que s¨®lo el consenso de todos los pa¨ªses permitir¨¢ soluciones de fondo
La Organizaci¨®n Internacional del Trabajo (OIT) aspira a llegar a 2025 con un mundo sin trabajo infantil. Su director general, el exsindicalista brit¨¢nico Guy Ryder (Liverpool, 1956) cree que es posible si los Estados hacen cumplir las leyes y garantizan el acceso a la educaci¨®n de calidad para todos los ni?os y al trabajo decente para los adultos. En Buenos Aires, donde se ha celebrado la IV Conferencia Mundial Sobre la Erradicaci¨®n Sostenida del Trabajo Infantil, Ryder destaca el progreso regional, pero, a su vez, pide voluntad pol¨ªtica para combatir la informalidad y tambi¨¦n la creciente desigualdad mundial generada por los cambios en el mercado de trabajo.
Pregunta. Hace d¨¦cadas que se lucha contra el trabajo infantil. ?Por qu¨¦ cuesta tanto erradicarlo?
Respuesta. Porque es un tema complejo. En muchos pa¨ªses el trabajo infantil est¨¢ integrado como parte de la realidad nacional. Hay mucho por hacer, quedan 152 millones, pero hay que reconocer que en los ¨²ltimos 20 a?os esta cifra se ha reducido en 100 millones, as¨ª que gran reto hacia delante, pero gran avance por detr¨¢s, y tambi¨¦n aprendizaje, porque ahora ya sabemos qu¨¦ funciona y que no.
P. ?Qu¨¦ funciona?
R. Se necesita un enfoque integral. Primero, legislaci¨®n conforme a las normas de la OIT y la inspecci¨®n que pueda hacerla efectiva. Segundo, protecci¨®n social. Am¨¦rica Latina ha hecho programas de transferencia econ¨®mica muy eficaces. El tercero, acceso a la educaci¨®n de calidad. Cuando existe la posibilidad de que un ni?o o ni?a vaya al colegio, se reduce de forma muy importante la vulnerabilidad al trabajo infantil. El cuarto elemento son pol¨ªticas del mercado de trabajo para promover buenas condiciones para adultos en los sectores donde el trabajo infantil es m¨¢s presente. Por ejemplo, el trabajo rural, que concentra el 70% del trabajo infantil, la informalidad y los pa¨ªses en condiciones de conflicto y crisis.
¡°El punto d¨¦bil de Am¨¦rica Latina en el trabajo infantil es la informalidad¡±
P. ?C¨®mo ve la situaci¨®n en Am¨¦rica Latina?
R. La regi¨®n ha progresado mucho en la lucha contra el trabajo infantil, la cifra se ha reducido de 20 millones a 11, pero el punto d¨¦bil es la informalidad, que tambi¨¦n es un cultivo para el trabajo infantil. Es el tema en el que queremos concentrar nuestros esfuerzos.
P. En los ¨²ltimos a?os ha habido debates en varios pa¨ªses, como Bolivia, donde incluso el presidente Evo Morales defendi¨® el valor de que los ni?os trabajaran. ?Todo el trabajo infantil es explotaci¨®n?
¡°Ning¨²n pa¨ªs puede decir que es culturalmente distinto para no cumplir las leyes de trabajo infantil¡±
R. No. Las normas de la OIT son muy claras al respecto. Algunas actividades no se pueden calificar de trabajo infantil, como los ni?os que ayudan en casa o en el contexto rural hay actividades que se pueden aceptar, pero no se pueden aceptar actividades que obstruyen el desarrollo normal del ni?o, ni el trabajo que impide la educaci¨®n de un ni?o ni su integraci¨®n social. Ning¨²n pa¨ªs puede decir que culturalmente es distinto, no, las leyes son universales.
P. En la apertura habl¨® tambi¨¦n de la incertidumbre del mercado laboral actual por los cambios en curso. A medida que avance la robotizaci¨®n y la automatizaci¨®n, ?d¨®nde se va a generar empleo?
R. Cuando hablamos del futuro del trabajo, la gente de forma autom¨¢tica piensa en la tecnolog¨ªa. Y es cierto, la tecnolog¨ªa importa, pero no se puede reducir el debate del futuro del trabajo a si la tecnolog¨ªa va a destruir o crear empleo. Todo depende de c¨®mo usemos la innovaci¨®n tecnol¨®gica, de si somos capaces de fijarnos objetivos de desarrollo y usar la tecnolog¨ªa para alcanzarlos. Esa es nuestra responsabilidad pol¨ªtica, porque nos puede proteger de trabajos peligrosos y tediosos. Pero hay otro tema, porque la tecnolog¨ªa en la cuarta revoluci¨®n industrial tiene la capacidad de transformar la manera en que se organiza el trabajo.
P. ?C¨®mo cambia las relaciones laborales?
¡°La tecnolog¨ªa transforma las relaciones laborales en relaciones comerciales¡±
R. Ahora la mayor¨ªa de las personas tiene un empleador, pero en la econom¨ªa de las plataformas, como Uber, uno no tiene empleador, entonces la relaci¨®n laboral se convierte en una relaci¨®n comercial. Porque yo voy a una plataforma y busco a alguien que me puede ofrecer un bien o un servicio y encuentro a alguien que ofrece un bien o un servicio. Es una relaci¨®n comercial de corta duraci¨®n. Creo que tenemos que asumir esta posible transformaci¨®n y si es as¨ª repensar, hacer un nuevo marco regulatorio, porque todos nuestros sistemas laborales y sociales est¨¢n construidos sobre la idea de una relaci¨®n laboral.
P. Esa precarizaci¨®n, sumada a la globalizaci¨®n, trae asociada salarios cada vez m¨¢s bajos.
R. Es una preocupaci¨®n que no es nueva. Hemos visto durante 30 a?os que los ingresos nacionales que van a los salarios han disminuido en todos los pa¨ªses del mundo y han aumentado los del capital.
P. ?Es posible parar esa rueda que gira a favor del capital?
R. S¨ª. Para m¨ª es casi la preocupaci¨®n m¨¢s importante cuando vemos el futuro del trabajo, parar el crecimiento de la desigualdad. Si el mundo sigue creciendo en los pr¨®ximos 30 a?os y la desigualdad crece al mismo ritmo creo que vamos a llegar a una situaci¨®n completamente catastr¨®fica. Estamos atrapados en la idea de que la desigualdad es el precio que tenemos que pagar para ser competitivos. Pero conocemos muy bien las pol¨ªticas que pueden reducirla: pol¨ªticas fiscales de redistribuci¨®n, salarios m¨ªnimos, negociaciones colectivas. Hay instrumentos, lo que falta en este momento voluntad pol¨ªtica para utilizarlos.
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