Termina en Colombia el cese al fuego con el ELN sin acuerdo sobre su renovaci¨®n

El cese al fuego bilateral entre el Gobierno de Colombia y la guerrilla del Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n Nacional (ELN) termina este martes sin un acuerdo sobre su renovaci¨®n. El Ejecutivo de Juan Manuel Santos, como manifest¨® el propio presidente el fin de semana, busca prorrogar la tregua pactada el pasado septiembre en v¨ªsperas de la visita del Papa. Sin embargo, la organizaci¨®n insurgente m¨¢s activa en el pa¨ªs tras la desmovilizaci¨®n de las FARC plantea ahora m¨¢s exigencias al Estado.

Los equipos negociadores de ambas partes se reunieron el lunes en Quito, capital de Ecuador, para comenzar un nuevo ciclo de conversaciones. Todos manifestaron su disposici¨®n a reeditar el pacto. Pero el entendimiento sobre el fondo de la cuesti¨®n no es suficiente. El ELN dio este martes por terminado el alto el fuego. ¡°Hoy, martes, a las 24 horas termina el cese, que tuvo una duraci¨®n de 101 d¨ªas¡±, afirm¨® el l¨ªder guerrillero encargado de los contactos con el Gobierno, Pablo Beltr¨¢n, que lanz¨® adem¨¢s una advertencia a las autoridades.

¡°Fuimos los que m¨¢s colocamos para que este cese saliera adelante. Este es el balance que vamos a comenzar a mirar en la mesa. Quiere decir que otro cese el Gobierno, que supuestamente tiene voluntad pol¨ªtica, m¨¢s aliento, m¨¢s fuerza, m¨¢s que nosotros, tiene que colocar m¨¢s que lo coloc¨® en esta oportunidad, porque se trata de demostrar voluntad pol¨ªtica¡±, dijo en Caracol Radio.

Desde octubre, cuando se inici¨® la tregua, la tensi¨®n entre el Estado y el ELN no ha cesado y se han registrado varias violaciones del acuerdo por parte de esta guerrilla, que naci¨® en 1964 casi al mismo tiempo que las FARC y tiene cerca de 2.000 combatientes. En estos tres meses murieron al menos 14 personas, seg¨²n los c¨¢lculos del Centro de Recursos para el An¨¢lisis de Conflictos (Cerac), entre las que figura un gobernador ind¨ªgena del departamento del Choc¨®, en el noroeste del pa¨ªs. En esa regi¨®n, una de las m¨¢s perjudicadas por el conflicto armado, opera la columna m¨¢s descontrolada, el llamado Frente de Guerra Occidental Omar G¨®mez. Su comandante, conocido como Uriel, orden¨® a sus hombres volver a las armas. ¡°A todas nuestras unidades ya les fue orientado reactivar las actividades normales y est¨¢n en posici¨®n¡±, comunic¨®.

El di¨¢logo con el ELN, que empez¨® oficialmente en febrero de 2017, apenas ha tenido avances. El alto el fuego fue fruto del clima generado en septiembre por el viaje pastoral del papa Francisco. No obstante, las negociaciones se reanudan ahora con un nuevo impulso. Antes de Navidad, Santos nombr¨® a un nuevo responsable de las conversaciones. Se trata de Gustavo Bell, exvicepresidente de Andr¨¦s Pastrana, que sustituye en el cargo a Juan Camilo Restrepo.

La Iglesia y Naciones Unidas, garantes de esa tregua, pidieron a las autoridades y a la insurgencia que preserven ahora ¡°los logros obtenidos en materia de reducci¨®n de la violencia¡± y destacaron el ¡°alivio humanitario¡± para las comunidades rurales. Manifestaron, adem¨¢s, ¡°la necesidad de un acuerdo de cese al fuego m¨¢s robusto que genere mayor confianza entre las partes y en la sociedad colombiana¡±.

La paz con el ELN supone para Colombia, junto con la lucha contra el narcotr¨¢fico, uno de los mayores retos para garantizar la convivencia en el campo. Las FARC ya han entregado las armas y concurrir¨¢n a las pr¨®ximas elecciones, pero los acuerdos con la guerrilla m¨¢s antigua de Am¨¦rica no han sido suficientes para enterrar la violencia. Seg¨²n los expertos, el proceso de negociaci¨®n con esta organizaci¨®n, fundada sobre unos cimientos te¨®ricos que mezclan marxismo y cristianismo, ser¨¢ lento y complicado. Su estructura, menos jer¨¢rquica que la de las FARC, no garantiza, por ejemplo, el cumplimiento estricto de las ¨®rdenes de sus dirigentes. La gesti¨®n de este desaf¨ªo quedar¨¢, en cualquier caso, en manos del presidente que salga de las urnas en las elecciones de mayo.