¡°No podemos poner un polic¨ªa detr¨¢s de cada radical fichado¡±

A preguntas sobre terrorismo, dice la eurodiputada francesa Nathalie Griesbeck (Metz, 1956), no se puede responder s¨ª o no. La cosa es m¨¢s compleja. Tanto como la gruesa l¨ªnea que separa un comportamiento poco com¨²n y ser candidato al yihadismo. Por eso Griesbeck, del centrista Movimiento Democr¨¢tico (MoDem), no es muy partidaria de fichar a todo el que se mueva. Preside la comisi¨®n sobre la lucha contra el terrorismo del Parlamento Europeo, nacida el pasado julio con el objetivo de evaluar en poco m¨¢s de un a?o c¨®mo Europa puede combatir mejor su mayor amenaza.

Pregunta. ?Los retornados del califato son el mayor reto?

Respuesta. Los combatientes extranjeros son un desaf¨ªo y una amenaza potencial. No dividir¨ªa entre hombres y mujeres. Yo soy una mujer y s¨¦ que podemos ser terribles. Sobre los ni?os que vuelven, depende de la sociedad. Los hay que pueden estar embriagados por las im¨¢genes que han visto o cosas que han hecho. Para en la mayor¨ªa de Estados del norte de Europa, si un combatiente vuelve, la sociedad debe tratar de reinsertarle. La lucha real contra el terrorismo es justamente con la prevenci¨®n, es la forma m¨¢s fuerte para evitar el acto terrorista. Pero eso es muy complicado, los j¨®venes son muy pobres: en los atentados de Madrid, Barcelona y Cambrils, Marsella o Tr¨¨bes.

P. ?Hay suficiente prevenci¨®n en Europa?

R. La prevenci¨®n es detectar un comportamiento singular, algo que se salga de lo ordinario. En Francia, por ejemplo, de las llamadas recibidas, un 30% son descripciones susceptibles de permitir la prevenci¨®n. En cada Estado hay programas de trabajo en com¨²n, entre fiscales, jueces, equipos policiales¡­ Eso existe. Pero tiene que ser una respuesta muy diversificada, que pase por la educaci¨®n, la lucha contra el desempleo, la vida en sociedad. Y en esto hay un margen de mejora posible; en mi pa¨ªs lo podemos hacer mucho mejor. Y la repercusi¨®n de esta prevenci¨®n es muy grande: con la compa?¨ªa, la educaci¨®n, sentirse parte de una sociedad ayuda a estar integrado. Hace falta, adem¨¢s, disociar religi¨®n del compromiso con el acto terrorista.

P. ?Es posible la desradicalizaci¨®n de un joven?

R. Hay que creer en ello e intentarlo. Hemos escuchado a muchos j¨®venes que han dicho estar desradicalizados, pero no podemos asegurar al 100% que vaya a durar en el tiempo, porque frecuentemente son j¨®venes radicalizados a los que se les puede haber prometido el para¨ªso y que se han construido una historia porque no la tienen, parecen perdidos en la sociedad. El terror es as¨ª muchas veces.

P. ?Se puede tener controlados a todos los fichados?

R. Desde el punto de vista de recursos humanos, en mi pa¨ªs, muy concernido, es imposible. Las fichas S [archivos policiales de radicalizados] pueden ser de personas que simplemente tengan v¨ªnculos con alguien; puede ser solo una intenci¨®n. En Francia son miles [unos 20.000]. Deber¨ªamos reducir las fichas S y ver cu¨¢les son los m¨¢s peligrosos, vigilarlos y detenerlos si es necesario. Eso es la prevenci¨®n. Yo quiero una fiscal¨ªa europea -est¨¢ previsto que sea operativa entre 2020 y 2021- con competencias sobre terrorismo. Hoy estas est¨¢n limitadas al fraude, a asuntos financieros... La criminalidad organizada comparte el modelo del terrorismo: tr¨¢fico de drogas¡­

P. La misma estructura.

R. Los mismos medios, modelo, financiaci¨®n. La fiscal¨ªa debe responder en t¨¦rminos de prevenci¨®n, protecci¨®n y combate de la diversidad de la amenaza. No podemos poner un polic¨ªa detr¨¢s de los miles de fichados, pero podemos perfeccionar el sistema.