¡°Hay que convencer a la sociedad de que exija un mundo sin armas nucleares¡±
La directora de la Campa?a Internacional para la Abolici¨®n de las Armas Nucleares, premio Nobel de la Paz en 2017, aboga por la prohibici¨®n mundial de las bombas at¨®micas
Cuando Beatrice Fihn recibi¨® la llamada del Comit¨¦ Noruego del Nobel el pasado octubre crey¨® que alguien le estaba tomando el pelo. La Campa?a Internacional para la Abolici¨®n de las Armas Nucleares (ICAN, por sus siglas en ingl¨¦s), plataforma de ONG que dirige Fihn, fue galardonada en diciembre en Oslo por su infatigable labor contra las bombas at¨®micas. Fihn (Gotemburgo, 1982) comenz¨® a trabajar en la no proliferaci¨®n y el desarme con una beca en la rama sueca de la Liga Internacional de Mujeres por la Paz y la Libertad. Despu¨¦s se traslad¨® a Ginebra para convertirse en la directora ejecutiva de ICAN, cargo en el que cumpli¨® cuatro a?os este domingo.
El proyecto principal de ICAN gira en torno al Tratado sobre la Prohibici¨®n de las Armas Nucleares, aprobado en julio de 2017 en la ONU con el voto favorable de 122 de los 193 Estados. El camino de la firma y la ratificaci¨®n es m¨¢s complejo. Hasta la fecha, 59 pa¨ªses lo han suscrito y solo diez (entre ellos M¨¦xico, Cuba y Venezuela) lo han ratificado. ¡°El proceso es lento y complejo, pero tendremos las 50 ratificaciones necesarias para que el tratado entre en vigor¡±, explica Fihn durante entrevista celebrada este mi¨¦rcoles en Madrid, donde se reuni¨® con algunos diputados y fue recibida por la alcaldesa de la ciudad, Manuela Carmena.
Pregunta:??C¨®mo puede funcionar un tratado que rechazan las nueve potencias nucleares?
Respuesta: Puede funcionar con o sin ellas. El mundo ha aceptado que cinco Estados tengan armas nucleares legalmente [EE UU, China, Rusia, Francia y Reino Unido] y otros cuatro de forma t¨¢cita [Israel, Corea del Norte, India y Pakist¨¢n]. El primer paso es crear la normativa que proh¨ªba su existencia, como se ha hecho con las minas o las bombas de racimo. Luego ser¨¢ absolutamente necesaria la presi¨®n social para exigir la destrucci¨®n de las armas nucleares.
P: Sus defensores aseguran que su capacidad disuasoria ha evitado durante siete d¨¦cadas cualquier enfrentamiento militar a gran escala entre los pa¨ªses que las poseen.
R: Que no haya habido una guerra entre las potencias nucleares no es evidencia de nada. La ONU ha tenido un papel fundamental en el mantenimiento de la paz. La capacidad disuasoria es un argumento que debemos rechazar por completo. Adem¨¢s del riesgo de que un Trump act¨²e instintivamente, no podemos olvidar la posibilidad de un accidente.
P: Jeremy Corbyn [l¨ªder laborista brit¨¢nico] ha sido un firme defensor de ICAN. ?Ser¨ªa algo distinto si ¨¦l hubiera ganado las elecciones del a?o pasado?
R: No podemos esperar a un Corbyn, no podemos fiar el cambio a una persona o a un partido. Tenemos que llegar a todo el espectro ideol¨®gico y convencer a la sociedad globalmente de la necesidad de exigir un mundo libre de armamento nuclear.
P: Un estudio de la Universidad de Stanford revel¨® que el 60% de los estadounidenses estar¨ªa a favor de matar a dos millones de iran¨ªes con un ataque nuclear para salvar a 20.000 marines.
R: La mayor¨ªa de los ciudadanos de EE UU cree en la doctrina de que la posesi¨®n de armas nucleares les convierte en m¨¢s seguros por ignorancia; ni siquiera son conscientes de los miles de norteamericanos que han padecido las consecuencias de los cientos de ensayos realizados en Nevada. Necesitamos un movimiento similar al que despert¨® la matanza de Parkland?[tiroteo en un instituto de Florida], pero ojal¨¢ que no sea un accidente o un ataque nuclear su germen.
P: Austria ratific¨® en mayo el tratado convirti¨¦ndose en el ¨²nico pa¨ªs de la UE y de Europa, junto al Vaticano, en hacerlo. ?C¨®mo se logr¨®?
R: Es un pa¨ªs con una fuerte tradici¨®n pacifista y antinuclear. El nuevo Gobierno [del conservador Sebastian Kurz] nos ha apoyado en todo momento. Esto no es asunto de derechas o izquierdas.
P: ?C¨®mo se fuerza el cambio en Rusia o en China?
R: En esos pa¨ªses nuestros equipos trabajan m¨¢s en el ¨¢mbito acad¨¦mico. Creemos que es el primer paso.
P: ?Y en Israel, que ni siquiera reconoce oficialmente su capacidad nuclear?
R: Nuestra funci¨®n principal all¨ª es sacar a la luz la informaci¨®n. Los israel¨ªes tienen derecho a saber qu¨¦ armas se almacenan en su territorio y el riesgo que implica poseerlas. Las posibilidades de cat¨¢strofe se han multiplicado en los ¨²ltimos a?os con el terrorismo o las armas cibern¨¦ticas.
P: ?Tiene alguna fe en la desnuclearizaci¨®n de Corea del Norte anunciada por Trump? ?C¨®mo podr¨ªa llegar a verificarse?
R: No, no creo mucho en la hoja de ruta de Trump, pero seguro que es mejor que estar amenazando con una destrucci¨®n sin precedentes. Existe un protocolo con todos los mecanismos necesarios para verificar la desnuclearizaci¨®n de un pa¨ªs, no necesitamos un proceso ad hoc creado por Trump.
P: Todos los miembros de la Alianza Atl¨¢ntica han rechazado por completo el tratado. ?Tiene alguna esperanza de que Espa?a se adhiera?
R: Espa?a ya fue valiente al rechazar [en 1986] la instalaci¨®n y almacenamiento de armas nucleares. Es hip¨®crita que no apoye la prohibici¨®n de estas en todo el mundo. Los miembros de la OTAN no pueden pretender ser el adalid de los derechos humanos mientras apoyen el actual statu quo.
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