Trump redobla sus ataques a los medios tras la denuncia de m¨¢s de 300 peri¨®dicos
Tras los editoriales en defensa de la prensa libre, el Senado aprueba por unanimidad una resoluci¨®n contra la ofensiva del presidente
En una actuaci¨®n coordinada sin precedentes, m¨¢s de 300 peri¨®dicos estadounidenses publican este jueves editoriales en defensa de la libertad de prensa frente a la ofensiva despiadada de Donald Trump contra los medios de comunicaci¨®n. Con diferentes palabras y opiniones, pero con un mismo mensaje, las publicaciones, la mayor¨ªa locales, se han puesto de acuerdo para decir a sus lectores, a la sociedad y al presidente que no son enemigos de nadie. La respuesta de Trump ha sido redoblar su cruzada: ¡°Los medios de comunicaci¨®n falsos son el partido de la oposici¨®n. Es muy malo para nuestro gran pa¨ªs. ?Pero estamos ganando!¡±, ha escrito en Twitter. Sin embargo, el Senado, de mayor¨ªa republicana, ha aprobado por unanimidad una dura resoluci¨®n en defensa de la prensa.
La iniciativa surgi¨® el pasado viernes por parte de The Boston Globe que convoc¨® a todos los peri¨®dicos de EE UU que quisieran sumarse a publicar editoriales, este jueves, respondiendo al insulto m¨¢s grave de Trump contra la prensa: a la que llama ¡°enemigo del pueblo¡±. En un pa¨ªs donde la libertad de expresi¨®n es un principio sagrado blindado por ley, el insulto bananero de Trump ha disparado las alarmas sobre la posibilidad de que acabe desatando violencia contra los medios. Los periodistas que cubren sus m¨ªtines ya soportan acoso y gritos durante horas por parte de sus seguidores.
Trump, cuya ret¨®rica vive de la creaci¨®n constante de enemigos, ha multiplicado en las ¨²ltimas semanas sus ataques verbales a los medios. Tambi¨¦n se han traducido en consecuencias pr¨¢cticas, como el veto a una periodista de CNN en un acto en la Casa Blanca. Los acusa de minimizar intencionadamente sus logros y de ser deshonestos. Solo se salvan un pu?ado de medios conservadores afines. El republicano ha tergiversado el concepto de ¡°noticias falsas¡± para tildar as¨ª cualquier informaci¨®n desfavorable para ¨¦l.
La ofensiva ha surtido efecto aunque la creciente desconfianza de una parte de la poblaci¨®n con los periodistas ya exist¨ªa antes de Trump: un 85% de votantes republicanos consideraba en 2017 que los medios tienen un efecto negativo en EE UU frente un 68% en 2010, seg¨²n una encuesta de Pew Research. Muy pocos editoriales de diarios apoyaron la candidatura electoral de Trump en 2016.
THE FAKE NEWS MEDIA IS THE OPPOSITION PARTY. It is very bad for our Great Country....BUT WE ARE WINNING!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) August 16, 2018
¡°No hay nada que quisiera m¨¢s para nuestro pa¨ªs que una verdadera libertad de prensa. Es un hecho que la prensa es libre de escribir y decir lo quiera, pero mucho de lo que dice son noticias falsas, impulsando una agenda pol¨ªtica o simplemente tratando de da?ar a la gente. ?La honestidad gana!¡±, escribi¨® el mandatario en Twitter. En otro mensaje, atac¨® directamente a The Boston Globe. Se burl¨® de sus problemas financieros en el pasado y de embarcarse en una ¡°colusi¨®n con otros peri¨®dicos por una prensa libre¡±.
Los medios de comunicaci¨®n, dispuestos a indagar a fondo en un sinf¨ªn de asuntos, son una amenaza para cualquier presidente. Todav¨ªa m¨¢s para Trump, que sufre una sensibilidad extrema a cualquier reproche y tiene tendencia a mentir (dice de promedio 16 falsedades o medias verdades cada d¨ªa, seg¨²n un registro de The Washington Post). Por ejemplo, fue la prensa la que destap¨® una cinta de Trump en 2005 en la que despreciaba a mujeres, revel¨® numerosas reuniones secretas entre el entorno del republicano y personalidades rusas durante la campa?a -claves en la investigaci¨®n a la injerencia electoral de Mosc¨²- o descubri¨® las irregularidades en la Fundaci¨®n Trump.
Poco despu¨¦s de los mensajes de Trump, el Senado aprob¨® una resoluci¨®n que, sin citar al presidente, ¡°afirma que la prensa no es el enemigo del pueblo¡±, ¡°reafirma el papel vital e indispensable de la prensa libre¡± y ¡°condena los ataques a las instituciones de la prensa libre¡±. El texto, impulsado por un senador dem¨®crata de Haw¨¢i, no se someti¨® a voto sino que se aprob¨® mediante un mecanismo por el cual avanza si no hay objeciones. El hecho de que la c¨²pula republicana de la C¨¢mara Alta diera luz verde a la resoluci¨®n supone un tir¨®n de orejas a Trump aunque por ahora han sido escas¨ªsimos los conservadores que han denunciado su diatriba contra la prensa.
¡°Reemplazar a medios libres por medios gestionados por el Estado ha sido siempre la primer orden de cualquier r¨¦gimen corrupto que toma un pa¨ªs¡±, escribe el Globe en su editorial. Advierte de que Trump ¡°env¨ªa la se?al alarmante a los d¨¦spotas, desde Ankara hasta Mosc¨², Pek¨ªn o Bagdad, de que los periodistas pueden ser tratados como un enemigo interior¡±.
The New York Times es el diario de tirada nacional m¨¢s importante que se uni¨® a la iniciativa. En su editorial, titulado ¡®La prensa libre te necesita¡¯, recuerda que los ¡°reporteros y editores son humanos y cometen errores¡± pero ¡°insistir en que las verdades que no te gustan son ¡®noticias falsas¡¯ es peligroso para la vitalidad de la democracia¡±.
La lista de peri¨®dicos va desde grandes cabeceras hasta publicaciones con tiradas de 4.000 ejemplares. Marjorie Pritchard, subdirectora editorial del Globe, dijo que espera que la denuncia conjunta ¡°haga entender a los lectores que atacar la Primera Enmienda [de la Constituci¨®n] es inaceptable¡±.
Una explicaci¨®n m¨¢s mundana vino del peque?o Arizona Daily Star de Tucson: ¡°En la pr¨¢ctica, los periodistas nos tragamos aburridas reuniones de gobierno y nos estudiamos las f¨®rmulas de financiaci¨®n de las escuelas p¨²blicas para que usted no tenga que hacerlo¡±. El Dallas Morning News, el gran diario conservador de Texas, tambi¨¦n reconoci¨® que los periodistas pueden cometer errores pero lanz¨® un aviso: ¡°Est¨¢ en juego aqu¨ª una cuesti¨®n m¨¢s amplia, que afecta a la libertad de la prensa de cuestionar las cosas y que afecta a los verdaderos fundamentos de nuestra Rep¨²blica¡±.
Ausencias notables
Los editoriales en defensa de la libertad de prensa abarcaron a peri¨®dicos desde el Estado de Maine hasta el de Haw¨¢i. Pero hubo tambi¨¦n ausencias notables de diarios conocidos, como The Washington Post, The Wall Street Journal o The San Francisco Chronicle. Este ¨²ltimo justific¨® su ausencia esgrimiendo que, pese a la "seria amenaza" democr¨¢tica que suponen los ataques de Trump, valora la independencia period¨ªstica y que unirse a un clamor colectivo iba en contra de eso. Tambi¨¦n sostuvo que la iniciativa puede reforzar el argumento de Trump y sus fieles de que los medios est¨¢n en su contra.
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