Trump ha sufrido una veintena de bajas en 20 meses
Todas las ¨¢reas clave del Gobierno se han visto afectadas salvo contadas excepciones
Trabajar para Donald Trump es una actividad de alto riesgo. De las ¨²ltimas presidencias, la actual es, con diferencia, la que experimenta un mayor n¨²mero de bajas. Si se incluyen secretarios o asesores, una treintena de cargos han dimitido o han sido despedidos en los 20 meses de presidencia. La Casa Blanca suma ya el quinto jefe de comunicaci¨®n y el tercer consejero de Seguridad Nacional. Si se excluyen la vicepresidencia, Defensa, Tesoro y Justicia, todas las ¨¢reas clave han cambiado. La mayor¨ªa de salidas se deben al deseo de Trump de alterar su pol¨ªtica o por esc¨¢ndalos.
En medio de este panorama, la renuncia de Nikki Haley, como embajadora de EE UU ante la ONU, es extra?a. Por las formas: ning¨²n alto cargo que ha dimitido lo ha hecho de forma tan solemne y cordial junto a Trump en el Despacho Oval. Las sonrisas entre ambos este martes contrastaban con la furia del presidente al anunciar algunos de sus despidos en un mensaje en Twitter, por ejemplo al exsecretario de Estado Rex Tillerson. Y tambi¨¦n sorprende por los tiempos: todas las salidas previas hab¨ªan estado acompa?adas de semanas de rumores por las desavenencias y pol¨¦micas que rodeaban a esa persona.
De 21 puestos de altos cargos en el Gobierno o en la Casa Blanca, nueve cambiaron de persona en los primeros 14 meses de presidencia de Trump, seg¨²n un recuento del diario The New York Times. En cambio, en el mismo periodo, hubo tres reemplazos durante la Administraci¨®n de Bill Clinton, dos en la de Barack Obama y uno en la de George W. Bush.
Consejero de seguridad nacional. La primera crisis de Gobierno le estall¨® a Trump apenas semanas despu¨¦s de asumir el cargo. El entonces consejero de Seguridad Nacional, Michael Flynn, se vio forzado a dimitir el 14 de febrero de 2017 tras revelarse que hab¨ªa mentido sobre sus contactos con el entonces embajador ruso en Washington tras la victoria electoral del republicano en noviembre. Flynn es ahora objeto de investigaci¨®n del fiscal especial encargado del caso de la trama rusa que buscaba ayudar a Trump a ser presidente. En marzo de 2018, renunci¨® el sucesor de Flynn, H. R. McMaster. El mandatario opt¨® por un perfil m¨¢s radical en pol¨ªtica exterior y design¨® a John Bolton.
Director del FBI. Un terremoto sacudi¨® Washington el 9 de mayo de 2017. Trump despidi¨® fulminantemente a James Comey como m¨¢ximo responsable de la agencia policial. Comey, al que el presidente hab¨ªa pedido lealtad, era el encargado de supervisar la intromisi¨®n electoral rusa y su despido propici¨® la designaci¨®n de un fiscal especial del caso.
El radical Bannon. Steve Bannon anunci¨® su salida pactada de la Casa Blanca el 18 de agosto de 2017. John Kelly, que hab¨ªa sido nombrado jefe de gabinete tres semanas antes, decidi¨® que el jefe de estrategia era un impedimento a su objetivo de traer disciplina a la gesti¨®n presidencial. Sin embargo, la doctrina antiglobalizaci¨®n y de tinte supremacista de Bannon sigue influyendo a Trump.
Un marzo fren¨¦tico. En 23 d¨ªas del pasado marzo se produjeron hasta seis salidas de altos cargos. Gary Cohn dimiti¨® como asesor econ¨®mico en protesta por la guerra arancelaria de Trump, y Rex Tillerson fue despedido como secretario de Estado por medio de un mensaje de Twitter. Al margen del citado McMaster, renunci¨® Hope Hicks como jefa de comunicaci¨®n, acechada por la sombra de la investigaci¨®n rusa. Y hubo otros dos ceses: David Shulkin como secretario de Veteranos, por varias pol¨¦micas, y Andrew McCabe como director adjunto del FBI, dos d¨ªas antes de poder jubilarse. Trump lo consideraba un exponente de la supuesta caza de brujas contra ¨¦l de un sector dem¨®crata en la agencia policial.
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