Los socialistas lanzan su carrera para reconquistar la Comisi¨®n Europea
Los actuales vicepresidentes, el holand¨¦s Frans Timmermans y el eslovaco Maros Sefcovic, se postulan para suceder a Jean-Claude Juncker
El italiano Romano Prodi ha sido hasta ahora el ¨²ltimo representante de las filas socialistas en lograr la presidencia de la Comisi¨®n Europea, un poderoso cargo controlado desde 2004 por el Partido Popular Europeo. Tras 15 a?os de ausencia, los socialistas europeos (S&D, seg¨²n sus siglas) parten a una dif¨ªcil reconquista del sill¨®n ocupado actualmente por el conservador luxemburgu¨¦s Jean-Claude Juncker.
Y lo hacen con un proceso de primarias internas (que se dirimir¨¢ en diciembre) en el que ya se ha colocado en cabeza el vicepresidente primero de la actual Comisi¨®n, Frans Timmermans. El holand¨¦s parece contar con el apoyo de las grandes delegaciones nacionales de socialistas, con la de Alemania a la cabeza.
Los socialistas espa?oles tambi¨¦n han secundado de inmediato las aspiraciones de Timmermans. "Valoramos su extensa y demostrada trayectoria en las instituciones comunitarias, as¨ª como su compromiso firme y robusto con el proyecto europeo", ha se?alado la eurodiputada Iratxe Garc¨ªa, secretaria de UE del PSOE.
En liza ha entrado tambi¨¦n el vicepresidente de Energ¨ªa de la Comisi¨®n, el eslovaco Maros Sefcovic, reconocido en Bruselas por su poso intelectual. Sefcovic asegura que cuenta con el apoyo de nueve delegaciones nacionales, pero parte en aparente inferioridad de condiciones frente a la envergadura pol¨ªtica de Timmermans
Pero la carrera de cualquiera de los dos hacia la presidencia de la Comisi¨®n se augura complicada porque los sondeos apuntan a una ca¨ªda de los socialistas en pa¨ªses tan esenciales como Alemania, Francia, Italia o la propia Holanda. Los populares parten por ahora como favoritos y ya cuentan con dos aspirantes, el eurodiputado alem¨¢n Manfred Weber, y el ex primer ministro finland¨¦s Alex Stubb.
Los dos aspirantes socialistas forman parte de la actual Comisi¨®n, pero representan sensibilidades y trayectorias pol¨ªticas diferentes, en un claro ejemplo de la brecha que parece haber reaparecido entre los pa¨ªses veteranos de la UE y los de la ampliaci¨®n hacia Europa central y del Este.
En vaqueros, sin corbata y con m¨²sica de Bruce Springsteen como tel¨®n de fondo, Timmermans (Maastricht, 1961, casado y con cuatro hijos) confirm¨® este martes su candidatura a liderar la campa?a de los socialistas europeos en las elecciones al Parlamento Europeo de mayo de 2019.
Pol¨ªglota reconocido (habla con fluidez ingl¨¦s, franc¨¦s, alem¨¢n, italiano y ruso), Timmermans opt¨® por hacer el anuncio en holand¨¦s, su lengua materna, y desde su distrito electoral en Heerlen. Un gesto que denota la intenci¨®n de apelar a unas ra¨ªces que la opini¨®n p¨²blica de algunos pa¨ªses, entre ellos Holanda, siente amenazadas por proyectos de integraci¨®n y globalizaci¨®n como el europeo.
"Creo en Europa porque en un mundo que cambia tan r¨¢pidamente necesitamos una respuesta de una magnitud que no pueden dar los Estados a nivel individual", se?al¨® Timmermans en la presentaci¨®n de la candidatura a las puertas de un bar local.
El holand¨¦s evoc¨® la trayectoria de sus ancestros, que viv¨ªan, trabajaban y se desplazaban entre Holanda y Alemania hasta que la II Guerra Mundial hizo trizas el continente. Aquella Europa dividida, record¨® Timmermans, parece tan lejana que cuando explic¨® a su hija peque?a el origen de los restos de bunkers en la zona lim¨ªtrofe entre Holanda y Alemania, la ni?a pregunt¨®: "pap¨¢, ?qu¨¦ es una frontera?".
Pero el aspirante socialista advirti¨® contra el riesgo de dar por garantizado que las pr¨®ximas generaciones de europeos crecer¨¢n en un mundo sin barreras. "Solo os quiero decir que no es muy dif¨ªcil crear las condiciones para llevar a las personas de una situaci¨®n de dependencia mutua y de un respeto mutuo a otra de odio y rechazo", advirti¨® Timmermans ante el ascenso de movimientos xen¨®fobos en varios pa¨ªses, entre ellos Holanda.
Sefcovic anunci¨® su candidatura el pasado 17 de septiembre, en un acto de apariencia m¨¢s institucional que mitinera. Trajeado y en plena sede del Parlamento Europeo en Bruselas, Sefcovic evoc¨® el Tel¨®n de acero tras el cual se preguntaba, hace 30 a?os, c¨®mo se vivir¨ªa al otro lado del Danubio y c¨®mo se las apa?ar¨ªan sus vecinos austriacos en el lado occidental. Sefcovic (Bratislava, 1966, casado y con tres hijos) es miembro de la Comisi¨®n Europea desde 2009 y se marca como objetivo, si logra la presidencia del organismo, "dejar de hablar de este y oeste, norte y sur, para poner en marcha de nuevo el motor de la integraci¨®n". Para lograrlo deber¨¢ imponerse, como m¨ªnimo, al candidato occidental de sus propias filas y al candidato occidental del PPE.
Riesgo de conflicto de inter¨¦s
Todos los aspirantes de los dos grandes partidos (PPE y S&D) a presidir la Comisi¨®n Europea forman parte destacada de las instituciones comunitarias y tres de ellos ocupan altos cargos que podr¨ªan provocar conflictos de inter¨¦s durante la campa?a.
Los socialistas (Frans Timmermans y Maros Sefcovic) ocupan sendas vicepresidencias de la Comisi¨®n Europea. El c¨®digo de conducta de la instituci¨®n ha relajado recientemente las normas para permitir a los comisarios participar en las elecciones sin renunciar temporalmente al cargo, como ocurr¨ªa antes. A cambio, se exige a los candidatos establecer una clara separaci¨®n entre su labor institucional y su campa?a electoral y el compromiso de no utilizar los recursos a su disposici¨®n para su actividad como candidatos. Una fina barrera que puede dar lugar a equ¨ªvocos.
Timmermans, por ejemplo, anunci¨® su candidatura en un acto de su partido? en Holanda recogido por las c¨¢maras de televisi¨®n del canal de la Comisi¨®n (Ebs). Las presentaciones de los otros candidatos tambi¨¦n fueron recogidos por el mismo canal, aunque sin necesidad de desplazarse porque se hicieron en las sedes del Parlamento Europeo en Bruselas o en Estrasburgo.
El aspirante conservador Alex Stubb ha decidido zanjar cualquier suspicacia y ha anunciado que renunciar¨¢ temporalmente a su actual cargo, vicepresidente del Banco Europeo de Inversi¨®n (BEI).
El otro conservador en liza, el alem¨¢n Manfred Weber, tiene intenci¨®n de mantener su actividad como eurodiputado y como l¨ªder del grupo Popular en el Parlamento Europeo. El car¨¢cter pol¨ªtico de ambos puestos reduce el riesgo de un conflicto de inter¨¦s, pero dentro de su propio partido pueden alzarse voces para pedirle que se centre en su carrera electoral si finalmente sale elegido como candidato principal.
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