Otras dos mujeres denuncian abusos de ?scar Arias, expresidente de Costa Rica y Nobel de la Paz

Nuevos testimonios de abusos sexuales se suman a la demanda judicial de violaci¨®n interpuesta este lunes por una mujer contra el expresidente de Costa Rica y premio Nobel de la Paz en 1987, ?scar Arias, de 78 a?os. Dos mujeres han afirmado este martes haber sufrido abusos sexuales por parte de Arias: la periodista costarricense Nono Antill¨®n, que escribe de su caso en el diario La Naci¨®n, y Emma Daly, directora de comunicaciones de la organizaci¨®n Human Rights Watch, que cuenta el suyo en The Washington Post.

M¨¢s informaci¨®n

El expresidente de Costa Rica y Nobel de la Paz, ?scar Arias, acusado de corrupci¨®n

Arias es conocido por su protagonismo en la pacificaci¨®n de Centroam¨¦rica en la d¨¦cada de los ochenta. Este lunes fue acusado de violaci¨®n por una activista en asuntos de desarme nuclear. La demanda judicial fue interpuesta por la mujer, una m¨¦dica de 35 a?os, ante la Fiscal¨ªa Adjunta de G¨¦nero del Ministerio P¨²blico costarricense, seg¨²n ha adelantado el semanario Universidad, que reconstruye el caso con la versi¨®n de la mujer y de otras personas que conocieron su relato desde el 1 de diciembre del 2014, a?o en el que se produjeron los supuestos abusos.

Arias, que presidi¨® Costa Rica en dos per¨ªodos distintos (1986-1990 y 2006-2010) y fue galardonado por sus gestiones para la paz en los conflictos centroamericanos de los ochenta,?fue consultado por el semanario antes de la publicaci¨®n y declin¨®, a trav¨¦s de su abogado, referirse al caso. Ya este lunes, horas despu¨¦s de que Universidad publicase la noticia, ha negado los cargos en un escueto comunicado. "Rechazo categ¨®ricamente las acusaciones que se me hacen. Nunca he actuado irrespetando la voluntad de ninguna mujer, menos a¨²n trat¨¢ndose de su libertad de relacionarse con otra persona (...) Siendo que, seg¨²n se informa, existe una denuncia formulada en mi contra, ejercer¨¦ mi defensa ante los tribunales de justicia y no realizar¨¦ m¨¢s comentarios p¨²blicos sobre este tema".

En la denuncia del lunes, la m¨¦dico de 35 a?os describe c¨®mo Arias se aprovech¨® de una visita que ella le hizo a su casa, como representante de la filial de una ONG internacional que lucha contra las armas nucleares. Al despedirse la bes¨®, le toc¨® los senos, le meti¨® la mano bajo la ropa y le introdujo los dedos en la vagina, seg¨²n el relato de la joven, hija de una exdiputada cercana al que fuera presidente. La denunciante relata que ese mismo d¨ªa acudi¨® a reuniones en el Congreso y cont¨® lo ocurrido a una diputada y a un asesor legislativo, que la hab¨ªan notado alterada. Tambi¨¦n lo relat¨® posteriormente a su novio y despu¨¦s a personas de la ONG en la que trabajaba y a otros activistas de la Campa?a Internacional para Abolir las Armas Nucleares (ICAN, por las siglas en ingl¨¦s). Entre ellas estaba?la Nobel de la Paz sueca Beatrice Fihn, quien confirm¨® al semanario que en 2017 supo de ese caso y le recomend¨® que presentara una denuncia.

Durante estos a?os, la mujer ¡ªsiempre seg¨²n su relato¡ª sigui¨® recibiendo llamadas y correos de Arias para asuntos propios del desarme y en una ocasi¨®n ¨¦l se quej¨® por no obtener respuesta. Sin embargo, la denunciante no llev¨® el caso a la justicia por temor y para no afectar al trabajo de su organizaci¨®n, por tratarse de una figura pol¨ªtica de talla internacional. Despu¨¦s lo habl¨® con m¨¢s personas y tom¨® la decisi¨®n de formalizar la denuncia penal este lunes, poco despu¨¦s de las tres de la tarde hora de San Jos¨¦, como consta en la copia del expediente que el semanario publica en su edici¨®n digital, aunque reservando siempre la identidad de la mujer. En el documento, la activista expresa que no desea recibir indemnizaci¨®n econ¨®mica alguna.

Las dos nuevas acusaciones se han difundido en sendos medios de comunicaci¨®n. "Estaba sentada frente a su escritorio, se me acerc¨®, me tom¨® la mano y me la puso en su pene que estaba erecto. Yo lo empuj¨¦ y me puse de pie y ¨¦l se me lanz¨®. Me cogi¨® por los hombros, me tir¨® contra un ropero y me empez¨® a toquetear", relata Antill¨®n en La Naci¨®n. Por su parte, Daly cont¨® a The Washington Post que en 1990, en un hotel de Managua, Nicaragua, se acerc¨® al pol¨ªtico para hacerle una pregunta y en lugar de responder le toc¨® los senos y le dijo: "No est¨¢s usando brassier (sost¨¦n)".

El expresidente costarricense tambi¨¦n se enfrenta a una acusaci¨®n por un delito de prevaricaci¨®n?por?haber, presuntamente, actuado al margen de la ley al favorecer la instalaci¨®n de una pol¨¦mica mina de oro en la frontera norte, colindante con Nicaragua. Sobre ¨¦l pesa una acusaci¨®n del Ministerio Fiscal y, tras haber finalizado las audiencias previas, solo falta conocer si el caso va a juicio. El exmandatario lo atribuye todo a una persecuci¨®n pol¨ªtica dirigida desde la Fiscal¨ªa, a cargo de una abogada carente de antecedentes partidarios llamada Emilia Navas.